Capítulo 8: Más dudas que respuestas...

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Independientemente de si alguna persona nota o no las preocupaciones de los demás, al ver que se encuentra en un punto cumbre de preocupación o alteración es normal tener lo mejor conocido cómo la empatia... Bonnie era un chico, que a lo largo de sus diecisiete años de vida conocía muy bien este termino, aun sin haberlo investigado del todo su forma de percibirlo era impresionante a su parecer.

Una de las cosas que con normalidad le hacia ver su estado inusual en lo que respecta a su condición, era la forma y actitud que llevaban sus padres a lo largo de esta extraña causa. Claro que, cada uno tenia su propia impresión sobre su estado y a decir verdad una forma de actuar totalmente opuesta...

Apenas abrió los ojos y lo primero que notó fue el alrededor en dónde se encontraba y cómo era la costumbre sus cómodas mantas lo tapaban hasta los hombros, no es que hubiera mucho frió en su habitación, después de todo la temperatura era normal, no le daba ni calor, ni frió, y al sentir el pañuelo húmedo en su frente pudo suponer que había tenido fiebre. Se levantó de forma lenta, dándose su tiempo de observar mejor su habitación ya un poco mas ordenada.

Suspiró con cansancios tras recordar lo que había pasado anterior mente, el dolor de cabeza que había tenido ya había desaparecido por completo y no estaba totalmente seguro de cuanto tiempo fue en que se quedo dormido. Ladeó la cabeza hacia la dirección de la ventana en su habitación que ya se hallaba cerrada por las cortinas. Decidiéndose por fin se levantó de su cama y fue directamente hasta allí... Apenas logró presenciar cómo las luces de las casas y las farolas a lo largo de la calle era lo único que las iluminaba, el sol ya se había puesto y la noche se hizo presente.

Bostezó y restregó su mano en su rostro... ¿Qué se suponía que tenia que hacer ahora? Estaba seguro de que sus padres se hallaban abajo, preocupados por lo sucedido. Dispuesto a entablar una platica con ellos para aclarar les que lo que había pasado simplemente fue una bajada de tensión, estando casi seguro de que no le creerían se detuvo de esto apenas llegó a mitad de las escaleras... Justo en la cocina por lo que podía escuchar, allí se encontraban ambos platicando. No estaba muy seguro de lo que decían puesto que el muro que tenia justo al lado le impedía esto, así que bajo unos dos escalones más, pegando el oído a la delgada pared. Si, puede verse algo metiche pero conociendo a sus progenitores tenia en cuenta perfectamente de que el tema principal era él.

—Si, podría ser para el próximo fin de semana, si... Gracias —dijo la peli-violácea para seguido colgar la llamada que había hecho. Observó a su marido con una cansada y deprimida mirada.

Toda la situación no hacia más que alterarle los nervios, pues no comprendía que era lo que estaba pasando con Bonnie. Siempre era un chico enérgico, con una actitud algo agria a pesar de que ella fuera tan dulce, él siempre se comportaba así luego de los años. Simplemente le preocupaba lo de esa noche, a cada segundo parecía que se quedaba de a poco sin aire, como si no lograra pasarlo a los pulmones o algo por el estilo, ver aquello no hizo otra cosa mas que aterrarle de sobre manera.

—De verdad no entiendo que esta pasando —asegura al borde de un colapso de lágrimas, sus ojos ya estaban comenzando a empañarse, su cabello se había desordenado aun más debido a que no sabia donde poner las manos más que en su cabeza. No comprendía nada ¡¿Por que le pasaba todo esto a su hijo?!

—Kara...

—No lo entiendo, no entiendo...

Sus lágrimas al fin comenzaron a brotar mientras susurraba esa palabra una y otra vez. El peli-blanco la observó sin saber que decir, de entre los dos la mas afectada siempre era ella, esto no significaba que no se preocupara por su hijo, al contrario, siempre se quedaba meditando con sumo atento e implementaba alguna investigación cuestionando a los doctores que ya conocía. Pero nunca tenia una respuesta certera, solo dejaba impresionado a los profesionales con el caso de su hijo y algunos hasta se empeñaban en investigar a fondo su “defecto” claro que nunca permitiría que le hiciera esa clase de estudios a Bonnie y mucho menos su mujer permitiría eso conociendo la incomodidad de su hijo al respecto.

Hilo Rojo (BxB)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora