A pesar de la contrariedad que tenia Bonnie en ese momento se sorprendía de gran manera sobre las decisiones que tomaba. Le hacia recordar vagamente a sus años de niñez cuando era ignorante a todo lo que pasaba a su alrededor, como cuando aquella vez unos niños le dijeron que seria buena idea investigar en el salón de profesores y lo terminaron encerrando allí, por lo que tuvo que pasar alrededor de tres horas de esa forma para luego ser castigado, pues estaba prohibido estar allí siendo un estudiante sin supervisión... También estaba aquella vez en la que una niña menor de su primaria le suplicó ver si en una zanja se había caído su muñeco solo para cuando se inclinara empujarlo dentro y salir gritando; “¡Alabenme! ¡He encerrado al demonio y le he dado de comer a los muertos con su cuerpo!” Fue un momento raro, para que negarlo... Y aun con esas resumidas anécdotas la mas reciente que le pasó por la mente fue la que le pasó hace unos dos años, en dónde un club de musica se había organizado para hacerle una “fiesta sorpresa” por su cumpleaños número quince, y Bonnie como todo un ingenuo, sabiendo que casi nunca se la pasaba con otras personas y aun presintiendo que algo malo iba a pasar aun así fue, para terminar con la golpiza de su vida pues el ritual de “saquen al moustro” había comenzado...
¿Y a que punto quería llegar pensando en todo aquello?
Pues muy simple, era el hecho de que inclusive alguien le diera la idea sobre hacer algo que involucraba su presencia, él igual aceptaba aun teniendo la sensación de peligro activada y de que en cualquier momento algo saldría mal... ¡Pero aun así lo hacia! ¿Y saben por qué lo hacia? Su curiosidad era mucho más grande que su apática y contraria actitud que dejaba demostrar siempre...
Ahora se encontraba en un Bus, sentado en uno de los asientos mas hacia atrás, a pesar de que éste estuviera casi vació. Por la distancia que mantenía notaba a cierto chico de orbita gris en los primeros puestos de vista hacia el lado que daba al estrecho pasillo del largo vehículo, pudo haberse sentado a su lado o al menos un puesto mucho más cerca, pero no quiso.
La retrospectiva estaba de la siguiente manera; él en un vehículo público acompañando a aquel joven menor que de la nada le pidió ir ambos a su casa siendo que se consideraban —o al menos él si lo consideraba— personas ajenas. Su forma de actuar al respecto se podría juzgar fácilmente como una acción contradictoria de si mismo y lo sabía. Pasaron alrededor de unos veinte o quince minutos, no podría asegurarlo ya que no traía su móvil, hasta que por fin el peli-morado notó como el chico delante de él se levantaba de su asiento indicando que ya se bajaría. Así que sin esperar mucho le siguió el paso bajando de aquel vehículo.
El de mirada verdosa volteó hasta centrase en él, y con una muy extraña expresión que Bonnie no podría asegurar si estaba....¿Molesto? O simplemente nervioso, lo miró y ladeó la cabeza indicando el camino que seguirían a continuación.
—Bien... Sigueme.
—¿Estas de broma? —inquirió Bonnie luego de recapitular y darse cuenta de que el menor no podía estar hablando en serio. ¿Él? ¿Yendo a su casa? Se despegó de aquel extraño acorralamiento que tenia y que lo había dejado vagando un rato entre pensamientos para mirar al chico gris frunciendo el entrecejo a través de esos poco reflejadores lentes que cargaba—. Ni siquiera te conozco ¿por qué lo haría?
ESTÁS LEYENDO
Hilo Rojo (BxB)
Fiksi PenggemarEn todo el mundo existe el desprecio... Las personas no son capaces de tolerar la aparecía o actitud extraña que posee otra. Las peculiaridades son lo que normalmente nos caracteriza como persona. Pero... Cuando artormetan a alguien por una anorma...