thank u - (Gay).

Capítulo 2: 15 años después.

-

Padre, ¿Por qué tenemos que viajar a Suiza?, ¿Por qué justamente hoy?, ¿Por qué no sólo vas tú? - Preguntó Arien mientras terminaba de empacar sus últimas cosas con mala cara.

- Porque mi trabajo así es y no puedo dejarte aquí, nos iremos a vivir a Suiza, un momento.... ¿Por qué tanto interés en querer quedarte? - Preguntó su padre mirándolo con seriedad y confusión.

- Tenía una cita hoy padre, ¿Recuerdas que cuando cumplí los 13 años me dijiste que al cumplir 18 años podría tener citas? Bueno, ahora tengo 19 años, ha pasado un año ya desde que cumplí la edad suficiente para poder tener citas y hasta hoy, por fin iba a tener una. - Por supuesto que su padre estaba enterado de que le gustaban los chicos y por eso mismo le había prohibido tener citas antes de los 18, porque no quería que ningún chico se aprovechara de él, de su inocencia y pureza.

- Claro que lo recuerdo Arien, pero lo lamento, nos tenemos que ir hoy. ¿Con quién era esa cita? - Preguntó curioso.

- Con Nyle Garner padre, el hijo de Samuel Garner, uno de tus colegas. - Arien suspiró. Desde hace casi cinco meses Nyle había intentado salir con él, era un buen chico, con modales, atractivo, simpático y de buena familia. El chico se había esforzado para que Arien aceptara una cita con él y cuando lo hizo se puso feliz, incluso Arien estaba emocionado por esa cita porque había visto el esfuerzo del chico y eso le había gustado, pero ahora tenía que cancelarle, pobre muchacho.

- Uh, ese muchacho me agrada, es muy buen partido, pero lo siento Arien, tenemos que irnos. - Sabía que Nyle estaba interesado en su hijo, no porque Arien le había dicho, sino porque su padre del chico le había comentado que su hijo estaba interesado en Arien y quería saber si dejaría que lo cortejara. Él por supuesto accedió porque no creía que Arien terminaría aceptando salir con él, pero si lo hacía en algún momento no le molestaría, porque como dijo, era un buen partido y de muy buena familia. - Date prisa o perderemos el avión. - Y sin más salieron de casa directo al aeropuerto.

[ Horas más tarde. Muchas horas más tarde. ]

Después de llegar a Suiza y de terminar con los últimos procesos que tienen que hacer en el aeropuerto para poder cruzar hacia la ciudad, por fin estaban en su nuevo hogar. Arien estaba un poco asombrado por la enorme mansión que estaba frente a sus ojos, en Inglaterra tenían una mansión también, muy grande, pero no tanto como la que estaba viendo en esos momentos.

- ¿No crees que es demasiado para nosotros dos? - Por supuesto que a él no le interesaba el dinero en lo absoluto, pero a su padre de cierta manera le gustaba demostrar que podía darse ciertos "lujos".

- Para nada, es perfecta. Ahora espera a ver cómo mandé a decorar tu habitación. - Sin más que decir ambos entraron a la que ahora sería su nueva casa y Arien miró como estaba decorada por dentro, se veía bastante lujosa y todo se veía demasiado caro, si, sin duda era demasiado para ellos dos.

- ¿Dónde está mi habitación? - Preguntó subiendo las escaleras. Su padre le dijo hacia que lado del enorme pasillo tenía que ir y así lo hizo, su habitación se encontraba hasta el final del pasillo y cuando entró se sorprendió bastante, su padre se había encargado de decorar su habitación y para ser honestos, fue del gusto de Arien, a pesar de que la habitación decía "soy la habitación de un niño rico muy caprichoso y que le gusta gastar el dinero" era bastante linda, estaba muy bien decorada y cada cosa combinaba con todo. - Esta vez si me sorprendiste padre. - Dijo para sí mismo sonriendo y recorriendo la habitación. Estaba distribuida correcta y estratégicamente, los que la decoraron hicieron un trabajo increíble y su padre también, por lo que suponía él había escogido el color de la habitación, el televisor y los demás aparatos electrónicos, ya lo demás supuso que contrató a personas que trabajan como decoradores de interiores para que su idea quedara espectacular y lo había logrado, bien por su padre.