¿Verdad o Reto? || YoonGi [+18]

↪ CATORCE ↩

  — Ya no puedo confiar en ti,  YoonGi —soltó Suni con sarcasmo— Nunca mencionaste una segunda parte

— Te recuerdo que aceptaste las condiciones del juego —agregó YoonGi con su peculiar sonrisa de lado. Ella arrugo su nariz a la vez parpadeaba seguidamente ocasionando que su mayor riera por tan tierno acto

 — Ya no quiero jugar —musitó Suni con una tierna voz negando con la cabeza— Quiero divertirme de otro modo —concluyó enrollando sus manos en el cuello del rubio, acariciando suavemente su nuca

 — Claro que nos divertiremos —susurro YoonGi cerca de sus labios y antes de probarlos desvió su mirada a unas esposas y antifaz que permanecían en su cama, volviendo a su sonrisa incitante al ver tales objetos y recordar lo que tenía en mente, su pequeña quería divertirse, él gustoso la complacerá.

El rubio tomo la mano de la joven para caminar unos cuantos pasos y ambos sentarse al borde de la cama, este alargo su mano a los objetos visualizados que después de a verlos agarrado los coloco en sus piernas logrando la atención de ella quién enarco una ceja y antes de que indagara o reprochara, YoonGi coloco su dedo indice en los labios de Suni impidiéndole hablar.

— Será parte del juego —murmuró el joven con voz profunda refiriéndose a ambas piezas— Tu solo relájate, yo me encargaré que te diviertas

En un movimiento rápido, Suni quito el dedo del mayor de sus labios, con gran impresión balbuceó— Tú, de do-donde sacaste esas esposas

 — De un SexShop

 — ¿Fuiste a uno de esos? —interrogo con sus ojos exageradamente abiertos

 — No me mires así,  no soy el primero ni el único que ha ido a esas tiendas —recalcó con expresión neutra— La próxima vez te llevaré. Por ahora continuemos.

Acercándose al rostro de la joven, YoonGi planto sus labios en los de ella, entreabriendo sus bocas dando paso a sus lenguas para que así se entrelazaran, una tierna pero a la vez deseosa pelea de besos apasionados que hacía que ambos empezaran a sentir fogosidad y deseo, tras sonrisas en medio de sus besos el mayor se alejo de la joven estirando su labio inferior.

— Vamos a ver que tan buena eres para recordad las cosas —mencionó YoonGi, mientras se deshacía del amarre de aquella bata que cubría el cuerpo de Suni, segundos después y con movimientos precisos logro quitar la prenda, deleitando su mirada con el seductor cuerpo esta vez semi-desnudo, que antes de acariciarlo lo examino mientas mordía su labio.

— YoonGi sé más claro —reprocho con el entre cejo fruncido— Para empezar ¿Porqué las esposas y el antifaz?

  — Lo sabrás, no seas impaciente, además de eso tengo una sorpresa que te encantara —respondió con un guiño, cegado por la lujuria, ahora su concentración la tenia el cuerpo de la menor, que en un movimiento rápido empujo su anatomía en la cama para así él colocarse sobre ella, y antes de empezar con el contacto, se deshizo del bracier de la joven. Relamió sus labios para acercar su boca al cuello de ella, sintiendo en su lengua el deliciosos dulce— El chocolate sabe mejor si esta en tu cuerpo

Prosiguió con su excitante recorrido de caricias, tras dejar un corto beso en los pechos de la joven, bajo directamente a su vientre que previamente sus fosas nasales olfatearon la exquisita esencia. Lamió y succiono cada parte donde se encontraba aquel dulce, la piel morena de la castaña se erizaba ante la placentera sensación que provocaba la lengua viperina de YoonGi.

En un chasquido de dedos el mayor se alejo del cuerpo de Suni, para de nuevo sentarse y de un suspiro profundo hablar— Seré rápido, segunda mesa ¿Qué contenía?