Emocionalmente inestable, inseguro y prepotente, aquel hombre que a primera vista demostraba en su mirada poder, en sus palabras seguridad, y en su sonrisa sinceridad, no era nada más que una máscara ocultando la realidad, también tenia su lado oscuro, su lado deprimente que lo llevo a ser en lo que es ahora, el desequilibrado Kim Taehyung con la sonrisa más seductora.
Aún así su belleza y carisma que lograba convencer a los demás, no lo consiguió con ella, su máscara cayo justo en frente de sus ojos dejando salir todo aquello que durante mucho tiempo trataba de controlar, salió a flote con la persona equivocada, dañando y lastimando a la mujer que jamás pensó que podría amarla de una forma tan obsesiva y enfermiza, su intención nunca fue herirla, pero ahora que se sincero con ella que en verdad sentía culpa y arrepentimiento por ser un cretino, ahora que en verdad estaba dispuesto a dejar todo por estar con su linda novia, simplemente el destino que presenciaba cada palabra y acción doliente, no podía permitírselo.
— No te creo —declaró Suni, resoplando y limpiando las traicioneras lágrimas que recorrían sus mejillas— No puedo, me has hecho tanto daño y simplemente creerte que cambiaras por mi, por un nosotros, que nunca existió, no es tan simple.
Él solo escuchaba cabizbajo, sosteniendo el par de maletas de viaje en sus manos, su pecho se oprimía y un nudo en su garganta daba a notar lo dolido que estaba ante su triste declaración, sus parpados temblaban,y lagrimas amenazaban con salir
— Creo que deberías ir, tu vuelo esta por salir —propuso la joven alejando sus pasos, también retenía sus ganas de compadecerse por su estado, decirle que si le creí y por supuesto lo esperaría, pero sabia que había algo más detrás de su sonrisa afligida y ojos llorosos
— Espera —pidió Taehyung tomando un gran respiro para caminar a su dirección— Por lo menos dame una señal de que puedo reconquistarte, de que si lo intento no será en vano
— No, lo siento —sin más y después de a ver lanzado el último dardo con fuerza y rellena de resentimiento al sensible corazón del pelinegro, se dispuso a salir del aeropuerto sin una despedida, dejando a un Taehyung que desconcertado observaba como ella desaprecia por la multitud, una que otra lágrima se deslizaba por sus pómulos.
— Eso es lo que crees, pero en verdad te arrepentirás por lo que dijiste —murmuró enarcando la comisura de sus labios, limpiando bruscamente sus lágrimas
Estaba dolido, pero eso no quería decir que iba soltarla y dejarla ir, su corazón hablaba y pensaba adecuado aferrarse más a ella, que a pesar de que suelte su mano, él volverá a agarrarla e incluso si es necesario atarla con la suya. No iba a renunciar a ella así de fácil
El anuncio de su vuelo a segundo de salir hizo que saliera de sus pensamiento, respirando ondo y apretando entre sus dedos aquellas pesadas maletas, camino a su fila propuesta, pasando por los revisores para después subir al avión y dirigirse a su objetivo; Venecia
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— ¿Suni? —preguntó YoonGi al llamo de la joven quién le había citado en aquel solitario bosque detrás del instituto — ¿Donde estas?
— Aquí —apenas dejo ver su mano de entre lo matorrales del jardín donde en un pasado habían tenido una amena compañía el uno al otro. Sin pensarlo cruzó el barandal y camino en su dirección, visualizando como ella relajada se encontraba acostada sobre las rojas flores, cerrando sus ojos. Verla de nuevo reconfortaba su corazón.
— Te quedarás allí —intervino la dulce voz de Suni, invitándole a disfrutar del delicioso aroma de las flores y de los calmados rayos de sol. Sonriente se sentó a lado de ella— Quería verte —habló las castaña levantado su torso para poder sentarse, regalarle una sonrisa y descansar su cabeza en el hombro del rubio
Después de varios segundos, suspiro tras otro, el mayor hablo algo nervioso— Quiero que vengas a mi departamento —ofreció logrando que ella se sorprendiera y levantara su cabeza para mirarlo de frente— Me había conformado solo con verte a lo lejos con él, pero ahora sé que Taehyung estará fuera del país, que no habrá nada que me impida tenerte cerca, saborear tus labios —con delicadeza junto sus labios con los de la joven, volviendo a probar el dulce y tan extrañado sabor a cereza de sus labios. Sobre estos logro hablar— Necesito sentirte
— Yo, yo no sé si sea lo correcto —se alejo de su rostro con un leve carmesí en sus mejillas— Además como sabes que Taehyung...
— JungKook —la interrumpió— Él me contó, también le ordenó que te vigilara, cualquier acercamiento que tengas conmigo dejaría todo allá y vendría dispuesto a matarme
— ¿Enserio hizo eso? por un momento pensé que en verdad cambiara su comportamiento
— No lo hará hermosa, el intenta convencerte que todo será mejor, cuando nunca lo sera
— Ya no sé que pensar
— Piensa en lo que te dije —sonriente, jugueteaba con algunos cabellos de la menor, enrollándolos en sus dedos— ¿Irás? —insistió dejando su cabello detrás de su oreja. Ella asintió con la cabeza, analizando como en los ojos de YoonGi reflejaba lo ansioso que estaba, Suni había extrañado verlo sonreír, y por supuesto también extrañaba sentir esas miles sensaciones y emociones que solo él lograba provocarlas— Perfecto, hoy por la noche, a partir de las nueve
— ¿Hoy? no sé si tenga el atuendo adecuado
— Ya verás que no lo necesitaras
Ambos después de tan grato momento juntos, dejaron el lugar para asistir a las últimas clases del día, inquietos escucharon el timbre anunciando el final de un gran agotado y conmocionante día. Guardando sus útiles, Suni caminaba por el bullicioso pasillo, disponiéndonos a salir de del instituto y llegar lo más rápido posible a su casa.
Trataba de deducir el porque la repentina invitación de YoonGi a su departamento, fue entonces que recordó el tercer reto, quizás se trataba de eso, quizá este rencuentro sea para inducir sus sentimientos, si lo que siente por YoonGi es pasajero, fácil de olvidar o lo que sentía era más allá que solo una atracción física, hoy iba a averiguarlo.
— Me gusta —alago examinándose en el espejo, llevaba más de tres horas urgando su armario buscando alguna vestimenta que le convenciera, logrando encontrar un corto vestido negro con pequeñas piedras planteadas. Hizo algunos retoques en su cabello y rostro, por su puesto la infaltable colonia a cereza que sabía que volvía delirante a YoonGi
Durante el trascurso en dirección al departamento de YoonGi un inadecuado pensamiento llego a su cabeza: Taehyung porque el pensarlo, sentía escalofríos, aun teniendo su presencia lejos sentía miedo y preocupación. Suspiró desprendiendo aquel nombre de su mente, se encontraba tras la puerta del lugar que se hallaba entreabierta.
Sigilosamente entro encontrándose con una sala alumbrada por una luz palpitante color roja acompañado de diferentes tonalidades de velas con un exquisito aroma, dio dos pasos adentrándose más, tropezando con una mesa que en le centro tenía una vela roja junto con un papel doblado, la cual sin pensarlo lo abrió y lo leyó.
"Bienvenida mi pequeña al inicio del juego '¿Verdad o Reto?'. Tú mi hermosa jugadora ¿Estas dispuesta a decir la verdad y aceptar los retos propuestos?"
Con una sonrisilla picara susurro bajo— Acepto
"Cuando el gato no está los ratones hacen fiesta" ahre esta frase queda como anillo al dedo con lo que esta pasando con ellos dos, lokillos estos
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¿Verdad o Reto? || YoonGi [+18]
Fiksi PenggemarYoonGi logró aprovecharse de un absurdo juego y de sus eróticos retos, para tenerla sudorosa gimiendo su nombre, tal y como él quería, después de todo satisfacía su instinto sexual y saciaba su incontenible mente vengativa. Salió como lo tenía plane...