Destino o Casualidad >3<

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Después de como 2 semanas más iba a tener mi primer partido con las de la facultad de la universidad, así que lo invité con esperanzas bajas de que fuera ya que iba a ser en miércoles y él trabaja lunes, miércoles y viernes, pero de igual forma lo intenté

-Oye, la siguiente semana tengo el primer partido de copa de voleibol, y quería ver si querías y, obviamente, si podías ir- le dije como en tono nervioso, no sé porque me pone tan nerviosa éste chico

-¿Qué día?- me preguntó

-El miércoles – le dije con una mueca

-Mmm... ¡Ah, sí!, si puedo, no habrá academia ese día

-¿En serio?- le pregunté intentando ocultar mi emoción

-Sí, ¿a qué hora es?

-A las 5 en el otro campus

-¡Va! ¿Nos vamos saliendo de clases?

-¡Claro!- le dije y seguimos platicando de otras cosas, ¡no puedo creer que tenga tanta suerte!

En fin, pasó esa semana y la siguiente me tocó jugar, ganamos, por su puesto, y aparte de él, 2 amigos más me acompañaban, y al otro día en el salón me aseguraban y me juraban ante cualquier cosa que yo también le gustaba a ese chico, obvio no les creí, ¿cómo puedo gustarle a alguien como él? Es muy tonto, personalmente no me considero bonita y nadie me ha hecho sentir de forma contraria, así que yo seguía con ese pensamiento...

...

Después de varias semanas de estar prácticamente todo el día juntos, me invitó a salir, nuestra primera salida fue en jueves, y fue a comer, somos sencillos (él es un poco más "especial" que yo, pero somos sencillos ambos), así que fuimos por comida china y estuvo bastante bien, ya habíamos comido muchas veces juntos en la escuela, así que para cuando salimos él ya sabía que yo era un desastre comiendo, y para colmo él adoraba burlarse de mi cuando tiraba comida (decía que si no tiraba comida no era una comida norma de nosotros), porque no sólo la tiraba, sino que cuando se me caía, yo hacía corajes y berrinches pequeños, así que él disfrutó esa comida riéndose de mí, a tal grado que cuando yo fui a sentarme a la mesa yo tenía la bandeja con mi plato y el sólo suplato, porque "yo necesito la bandeja más que él", fue una salida muy divertida, la verdad, y como ambos estamos en restricción al refresco, fuimos por un agua a la paletería de un lado, regresamos y, cuando estábamos comiendo vi pasar a dos compañeros de mi salón y cuando me vieron ¡RAYOS! Es como si hubieran visto su sueño hecho realidad en una sola escena, sus ojos se abrieron demasiado y sus mandíbulas se cayeron, luego sonrieron hacia mí y siguieron caminando.

...

Después de esa salida se nos hizo costumbre faltar a entrenar cada jueves para salir a algún lado o simplemente quedarnos dormidos o platicando en las gradas del campo de béisbol, lo cual fue muy bonito, pues teníamos un día completo para nosotros solos, habíamos agarrado una mañía de que él decía algo tonto y yo automáticamente respondía "¡AY CALLATE!" y él me decía "cállame" y así nos la llevamos hasta que un día volvimos a lo mismo, él dijo algo tonto y yo le respondí

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