Astrid camina de un lado al otro con Josefina preguntado a donde van a ir.
"Nena" la llamo. Ella para de seguir a la estresada pelinegra y se acerca "tus padres van a salir"
"Y yo? " pregunta.
"Tu te quedarás conmigo y Chris" le sonrío. La decepción es notable en sus orbes verdes.
Haré como si el gesto no me hubiera dolido."Marce! " escucho el grito proveniente de la habitación principal de la casa y me acerco.
Astrid está con un vestido apegado que hace notar un poco más su abultado vientre. Esos pequeños bodoques que apenas tiene cinco meses en esa panza no dejan de crecer con rapidez."Sí esta bien. En verdad está genial" hablo animando a que salga de una vez por todas por que Joel no deja de llamarme a mi celular preguntando por su mujer.
"Que zapatillas? "
"Las que tienen poca plataforma"
"Me las pasas porfa. Ya no puedo agacharme, están muy grandes " carcajea. Y es verdad.
Desde que Astrid y Joel se han mudado hace ya un año han pensado el hecho de tener bebés propios, pues Josefina ya esta más grande. Y, además, Joel quiere -por lo menos- siete hermosos retoños.
Yo sinceramente me había quedado como estúpida, aceptaría hasta tres hijos. Pero siete? Dios no! Prefiero dejar al hombre antes de que eso pase.Soy mujer, no una cosa que bota niños de su vientre como máquina.
Nuevo mi cabeza negando y saco las zapatillas para después ponerme de cuclillas y colocarselas a Astrid.
"Gracias! " exclama. Me encojo de hombros como gesto desinteresado y la empiezo a empujar a la puerta donde el chófer ya la espera.
"Tu amado te espera " le informo.
Mi amiga vuelve a verse al espejo que está de adorno en la pared y sonríe satisfecha."Si... " suspira.
No puedo creer que después de todo lo que pasó siga así. Yo ya estaría en China y cerraría las puertas de mi corazón a cualquier persona que tenga algo colgando entre las piernas.
Pero bueno, cada loco con su cuento.
El vestido café oscuro que lleva Astrid es algo apegado y las zapatillas color crema le dan un toque más inocente. Me enorgullece que no utilice tanto negro como antes. Al final ya no le quedarán sus poleras de antes, esos bebés están creciendo con mucha rapidez para ser sincera.
Ya ni agacharse puede, y Joel, como todo un exagerado contrató un chófer y dos personas que se encargan de limpieza y cocina.Muevo mi mano en forma de despedida cuando el auto arranca y vuelvo dentro de la lujosa casa.
Josefina está en la sala viendo La cenicienta. No la molesto y voy a la cocina.
Espero encontrar por algún lado a Sonia o Ruth. Ambas fueron elegidas por Astrid, descartó a todas las mujeres que fueran menores de cuarenta años. Otra exagerada.
Voy al refrigerador y saco un posillo que hay con helado de chocolate y crema a medio comer, lo llevo a la sala con dos cucharillas.
Josefina ni mira que hago por estar muy atenta al hada madrina. Empiezo comiendo sola el helado y para la media hora escucho el timbre.
Me levanto con pereza y la voy a abrir. Christopher está sonriente y eso me calma notablemente. Pensé que estaría con su humor de perros y habría alguna discución.
Le doy un pico en los labios y entra.
"Hola nena fina" le dice con una sonrisa. La pequeña solo mueve su cabeza en un gesto que se supone es de saludo y luego no dice nada.
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No hables,Callar es mejor //#2 Saga No Hables
Fiksi PenggemarVerlo y pensar > están tan equivocados. Él lastima el corazón de mujeres que lo quieren. Hoy no solo ha lastimado mi corazón sino el de muchas que han caido en su juego, como yo...