I WANT YOU IN MY PIZZA ( TWO SHOT LEMON JINKOOK)

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Abrió los ojos con tranquilidad, el aire del ventilador le daba en la cara, se removió incómodo en su lugar, tenía la cabeza echada hacia atrás y la espalda le dolía un poco. El televisor frente suyo seguía prendido dando el programa de las ocho de la noche, Jungkook levantó su cabeza lentamente sintiendo la incomodidad en su cuello, pasó su mano por la nuca y acarició dando un pequeño masaje. Se reincorporó y se levantó con sus manos en sus caderas, se estiró provocando que sus huesos tronaran, dio un suspiro y se dirigió al baño a lavarse la cara. El agua fría lo despertó un poco más, mantuvo sus manos en su cara y suspiró por segunda vez, levantó la cabeza hacia el espejo y se miró apoyándose en el lavamanos. Se quedó así durante unos minutos, sus pensamientos se desviaron hacia un chico de cabellos negros que lo tenía muy confundido, su sonrisa, sus toques, sus abrazos y en especial sus besos eran lo que lo tenía con la cabeza tan revuelta.

Kim SeokJin, un chico de veintidós años, cabellos negros, alto y de hombros anchos, con una cara con rasgos delicados y piel de porcelana, era difícil que sea pasado por alto. Iba a la misma universidad que el castaño, un chico simple de bonita sonrisa y ojos brillantes, no era alguien especialmente extrovertido, entonces, ¿por qué Kim chico popular Seokjin se había fijado en él de esa forma? es más, ¿qué eran realmente? el castaño no entendía muy bien el tipo de relación que llevaba con ese chico, ¿por qué lo besaba y trataba como si fueran novios? el pelinegro nunca le aclaró ello y Jungkook solo se confundía más con el paso del tiempo.

Su estómago empezó a exigir comida, se sobó un poco el abdomen y se echó en el mueble donde se había quedado dormido horas atrás, miró el suelo de su departamento, suspiró y lanzó un pequeño quejido, no quería cocinar hoy, así que solo alargó su brazo hacia la mesita de centro frente a él y cogió su celular para marcar a una pizzería cercana, se sentó con el celular en mano y esperó a ser atendido.

- Buenas noches, pizzería Sunny pizza, ¿qué desea pedir? - habló un chico por la línea, Jungkook lo pensó por unos segundos.

- Buenas noches, quiero una pizza hawaiana con queso y piña doble, por favor. - habló un poco cohibido.

- Muy bien, ¿desea algo de beber? 

- Una soda de fresa

- Está bien, ¿cuál es su dirección?

El castaño dictó la dirección de su departamento y colgó, el repartidor llegaría en media hora y si llegaba tarde tendría la pizza gratis, Jungkook empezó a contar los minutos con el cronómetro de su celular, lo dejó a un lado y fue a tomarse un baño. Al entrar a la ducha y abrir la llave del agua fría y la de caliente, la imagen de SeokJin volvió a su mente, chasqueó la lengua y sacudió su cabeza intentando dejar de lado a ese chico por una vez en el día. Cerró sus ojos mientras esparcía el shampoo por su cabello con sus manos, la imagen de ese chico molesto apareció de nuevo, parecía que lo perseguía, Kook lo dejó estar, ya no le importaba, prefería gozar de su baño y relajarse un poco. 

Pero como si su subconsciente le hubiera dado una cachetada, supo que no lo lograría, ya que se había imaginado a Seokjin tocándolo en lugares que ni él mismo se atrevía a tocar, provocando que un rojo intenso se colara por sus mejillas y orejas, y que al mismo tiempo, algo ahí abajo se despertara. Jungkook se asustó y abrió los ojos de inmediato olvidando que aún tenía shampoo en la cara, se quejó y alzó la cabeza para que el agua retirara los restos de shampoo, se limpió los ojos y terminó de enjuagarse el cabello para salir de ahí y cambiarse a un suéter holgado y un buzo gris, se sobó los ojos, le seguían ardiendo un poco.

Ahora que lo pensaba un poco más, ¿desde cuando ese chico lo hacía reaccionar de esa forma? bueno, la verdadera y más directa pregunta sería, ¿desde cuando tiene sentimientos por Kim?