Capítulo 4: Alex desaparece.

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(Punto de vista de Jack)

Manejé a mi casa con Jane, quien por primera vez desde que empezamos el viaje se había quedado callada. Ahora que lo pienso, creo que fui un poco lejos al atarla con el cinturón de seguridad, pero la conozco tan bien que estoy seguro de que si no lo hubiera echo ella ya habría salido aún con el carro en movimiento.

- Sabes . . . . Lamento haber tenido que atarte al auto.

Le dije como para romper el silencio. Ella me volteó a ver con cara de pocos amigos y me obligó a voltear al camino. Suspiró ligeramente y me volvió a ver.

- Lamento haber dicho todas esas cosas de ti, ya sabes, aquél día.

Me dijo con algo de rubor en sus mejillas. Una pequeña esperanza se asentó en mi corazón.

- ¿Quiere decir que ya no me odias?

- No, te sigo odiando, solo que te he perdonado por haberme encerrado dos años en Clearwater y haberme atado a tu auto.

Bueno, algo es algo. Ella sonrió ligeramente y le devolví la sonrisa. Pronto llegamos a mi casa, así que la desaté y la invité a pasar.

- ¡Alex! Ya llegamos.

Grité para avisarle a mi hermano, pero no recibí respuesta. Seguramente está jugando videojuegos en su cuarto, por eso se escuchaban sonidos y música arriba. Volví a la sala y vi a Jane sentada en el sillón mirando atenta la tele.

- ¿Te gustan las novelas?

Me preguntó al ver el canal en el que había dejado la tele. Me ruboricé un poco.

- No, ¿Por qué preguntas?

Ella me miró como "es obvio" y suspiré lentamente. Me senté a su lado y me dispuse a ver la novela. Después de un rato, ella rompió el silencio.

- Sabes . . . . Me acabo de acordar de una cosa. Cuando los doctores me sedaron por que quería matarte, yo te dije "te odio" y tú dijiste algo. ¿Qué fue lo que dijiste?

Me preguntó algo seria pero sin darle mucha importancia a la pregunta. Comencé a sudar y a tartamudear. ¿Qué demonios le digo? ¿Que la amo?

- Yo . . . Yo . . . Yo dije que . . . Te amo.

Dije de una, como si lo hubiera querido decir desde hace tiempo. Ella me miraba asombrada, pero también se ruborizó.

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(Punto de vista de Jane)

OMG!!!! Le gusto . . . . Pero yo lo odio, lo odio hasta los huesos . . . . . Pero es tan apuesto, y se disculpó por todo lo que me hizo . . . . Pero me encerró en un manicomio dos años! . . . . Pero se disculpó, y tuvo el valor de decirme.

El amor estaba ganando la batalla dentro de mí, hasta que se me ocurre un plan. Es muy sucio, pero es mi única oportunidad de escapar y alejarme de donde me he metido.

- A mi también me gustas.

Dije. En parte era cierto, y en parte era mi plan. En cuanto se distraiga saldré corriendo. Mi corazón se aceleró cuando él tomo mi rostro entre sus manos y cerró los ojos, mientras se acercaba a mí lentamente para besarme. Rozó ligeramente sus labios con los míos y después me besó delicadamente. Correspondí el beso y, cuando nos separamos por falta de aire, salí corriendo a máxima velocidad en dirección a la puerta. Me sentía sucia por haber usado sus sentimientos para escapar, por que aunque lo odio, en el fondo siento como si lo amara . . . .

De pronto algo se enredó en mis piernas y caí a centímetros de la puerta, que estaba cerrada. Miré arriba y vi la cara de desaprobación y tristeza de Jack. Solo pude sonreír ligeramente. Escuché que recogió algo de la mesa de la sala y esposó mis manos detrás de mi espalda.

Un amor de pandillaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora