Capitulo 10: La filosofía de un tonto

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Wow...

Son las 3:00 a.m. y aunque tengo sueño (de hecho estaba tratando de dormir, pero parece que al fin le gané a mi pereza) no me dormí. Me he puesto a pensar últimamente en lo que he hecho, las cosas por las que de cierta forma me esforcé y ahora estoy desaprovechando, estoy viendo lo que he hecho y solo veo como todo se echa a perder sentado desde lejos...

Imagina simpatizar con por lo menos 2 de cada 5 personas a las que te has animado a hablarles, imagina que de alguna forma milagrosa le gustaste a esas 2 personas o por lo menos a una, ahora recuerda que tú y esa o esas personas apenas se están conociendo así que ella o él no sabe absolutamente nada de ti y ahora supongamos que tú no quieres que sepan mucho de ti por equis o ye motivo, en fin, de esa pequeña platica no sabes que es lo que saldrá después, una amistad duradera, una persona a la que jamás le volverás a hablar en tu vida, o tal vez el amor de tu vida. Uno nunca sabe con qué se encontrará.

En fin, conociste a una persona y de pronto tu comienzas a descuidarla, luego ella o el a ti, y así hasta que esa otra persona encuentra a alguien, es entonces cuando tú no quieres que ocurran las cosas y te arrepientes por no haber aprovechado a esa persona. Creo que esto no es más que obra de la filosofía de un tonto, mi filosofía...

¿Por qué?, por descuidado y perezoso, por dejar todo al final, por cansarse antes de tan siquiera hacer las cosas, por tener miedo a lo desconocido pero tener tanta ambición por descubrir, por estar solo y no saber qué hacer en estas situaciones, y que aunque lo sepas no lo haces, porque te riges por la filosofía de un tonto:

"Quiero hacerlo, ¿pero y si sale mal?, mejor espero a que esa persona lo haga, y si no lo hace nada pierdo, después de todo somos desconocidos, y el ciclo se volverá a repetir..."

Una persona tiene tantas ganas de que todo salga bien y la misma cantidad de miedo de que todo salga mal, por lo cual al final todo queda flotando en el aire y  no sucede nada. Esa persona se queda solo con las ganas de una rosa blanca, pero por miedo a una simple espina, o simplemente por decisión deja abandonada la rosa y sigue su camino largo y casi interminable, donde solo hay tierra, rocas y una que otra hoja de pasto...

La historia detrás de míWhere stories live. Discover now