vientre de alquiler

Capitulo 23: Mas problemas

Capítulo 23:  Más problemas.

¿De donde sacaría más dinero sin llamar al Uchiha? Naruto estaba sumido en cuentas por el asunto de su boda, no tenia a nadie más con los recursos necesarios para aquello, Sabía de una persona que hacía préstamos, el mejor amigo de Kakuzu, Hidan. Seguramente aquello le saldría caro, pero necesitaba por lo menos 100,000$ para comenzar. En gastos de su madre tenia a 20,000$ de cajón, 60,000$ de cremación y 35,000$ de deudas al hospital, un total de 115000$, sabía que con 100,000$ se arreglaría solo quedaría 15,000$ a pagar en dos meses, era menos. Corrió hasta su casa y sacó la agenda de cuero negro de su madre, ahí tenía todos los contactos, tanto de ella como de kakuzu, tomó coraje y llamo. Al segundo timbrazo una voz sumamente calma la atendió.

-¿Diga?- la voz de aquel hombre era serena, irradiaba tranquilidad y armonía, pero si algo había aprendido de kakuzu era a no fiarse de la gente. Kakuzu había enamorado a su madre con la finalidad de sacarle una supuesta herencia de su difunto marido, tras aquella repentina baja Mebuki se sintió sumamente sola, por lo que la compañía de kakuzu la ayudó a superar muchos obstáculos, el siempre fue cariñoso y atento con ella, quien siempre fue una mujer bella por lo que nadie se extrañaba de que un hombre más joven que la hubiera mirado, se llamaban alrededor de 15 años, la rubia contaba con 39 años cuando enviudó y 40 cuando comenzó su amorío por el moreno, a el no le costó mucho enterarse que la herencia del Haruno no eran más que cacharros y cosas viejas, por lo que decidió terminar su relación , no contaba con la llegada de Moegi,que lo llenó de rabia y comenzó a hacer la vida imposible a aquellas mujeres, se sentía atado y aquello no le gustaba , ya no se media para embriagarse, no ocultaba su drogadicción, Moegi había nacido prematuramente por un golpe que desprendió la placenta, Sakura no estaba segura si había sido el primer puñetazo que le había dado a su madre o un empujón-¿si?- volvió a insistir el hombre, sacando a Sakura de sus pensamientos.

-Necesito un préstamo- dijo sin más.

-¿Nombre?- preguntó sin más.

-Sakura Haruno, la hijastra de Kakuzu. - podía sentir la sonrisa del hombre ensancharse tras esa aclaración, sabía que estaba jugando con fuego pero ¿Que más le quedaba? Debía cerrar el ciclo del fallecimiento de su madre brevemente, debí continuar con su vida, y sus 3 pequeños que necesitaban de ella.

-¿Cuánto necesitas pequeña? -aquella voz sonó tétrica, le erizó la piel, sabía que ninguno de sus progenitores estarían de acuerdo en hacer aquello, pero ya había cometido tantas cosas de las que no se enorgullecia que una más no hacía la diferencia, como dice el dicho "¿que le hace una mancha más al tigre?"

-Necesito 100,000$- dijo sin más.

-Apuestas bajo ¿tan poco quieres?esta bien, sabes cómo son las tasas mensuales me imagino, si lo haces en 12 meses te saldrá 16,000$ por mes,en 8 meses 18,000$,  si lo haces en 6 meses 20,000$, en 3 meses 38,000$  . Elige sabiamente, sabes que no debes estafarme o iré a buscarte, la fecha de paga es el 15 de cada mes, por cada día que te adelantes te descontará 500$, por cada día que te atrases serán 1000$, así que reina mía... está todo en tus bellas y delicadas manos. - Sakura sabía que no debía estar mucho en contacto con aquel hombre, le tentaba decirle  6 meses pero su sueldo actualmente, con el salario de Moegi y el embarazo era de 60.000$, y solo 16.000$ se le iban en el alquiler. Quería contratar una prepaga para que su famili estuviera resguardada. La mensualidad por 8 meses no estaba nada mal, se acoplaba a sus necesidades, 12 meses le parecía una exageración, no quería que aquel hombre viera a sus hijos, no quería siquiera que los oliera en su ropa, si elegía los 6 meses seguramente la viera parturienta y sospechara de su estado, solo le faltaban 5 meses.-solo necesito 3 meses-

-ganas bien pequeña, por lo que él se ve, ¿sabes mis condiciones y no tienes ningún prejuicio?-

-No.... ¿cuando y en donde  retiró el dinero?- la firmeza de Sakura no flaqueó, aunque ella era un flan internamente. 

-al grano bien, te espero en la catedral de la plaza principal, hoy a las 16:30 hs- Sakura hiperventilaba, la ponía muy nerviosa ese hombre.

-ok, nos vemos- cortó la comunicación, miró su reloj, el medio día, tendría tiempo para báñese y conseguir alguna prenda que ocultaba su embarazo.  No quería ir a su casa, tenía muchos recuerdos ahí, prefería ir a lo de su buena amiga Ino, al llegar la recibieron con los brazos abiertos, le permitieron ducharse y aunque Sakura no se lo pidiera, Sai le prestó una camisa ancha gris que llegaba a medio muslo, se puso un mameluco que él usaba cuando hacía artes plásticas, su panza se ocultó perfectamente en aquella ropa plagada. Sai se estaba acostumbrando a ser un dispensador de ropa para embarazadas.
16:15 Sakura salió a la busca de Hidan, no confiaba en él por lo que llevo un bisturí preparado ante cualquier cosa, su vida realmente no le importaba, pero aquellos pequeños corazones latientes en su interior le impedían dejarse vencer, sumado a su hermana, buscaría la forma de salir adelante.
Hidan vestía unos vaqueros gastados, una camisa de leñador roja arremangada hasta medio antebrazo, sus brazos se cruzaban en un morral de tela fina en el que suponía, tenía el dinero. El hizo una seña con la manopla que se acercará, Sakura con la mano dentro del bolsillo apretó el bisturí levemente, un solo movimiento y estaría descubiertos y ,gracias a sus conocimientos en anatomía, Sabía dónde apuntar.
El se acercó y la abrazó, cosa que la desconcertó.

-¿Cómo estás sobrina? ¿La cabeza de zanahoria donde anda?- sonrío burlón, siempre le molestaba a Moegi aquella comparación, frunció el Ceño.

-Basta de parloteo , me tengo que ir. Apuremos el trámite- Hidan la miró, sus facciones eran más maduras, aquella era la chica que lloraba y se escondía en el armario con su hermana bebé, cuando Kakuzu no conseguía drogas y se desahogaba golpeando a su madre. Estaba tan cambiada,el  nunca había golpeado a una mujer, pero tampoco impedía que otros lo hicieran. Cada uno era dueño de su vida y se abstenía a las consecuencias. Hidan le tiró la mochila en el pecho a Sakura, dolió, el golpe seco hizo que los mellizos se pusieran rígidos.

-El 15 es la fecha límite nos veremos aquí y me darás mi dinero por 3 meses, si es antes debes llamarme, si es después te llamaré una vez al día y espero que me atiendas, mi celular de cobranzas termina el 911,¿Irónico no?-rio entre dientes, miro nuevamente su figura-  estás bastante ancha de lo que te recordaba, deberías hacer dieta sino nadie te mirara- amenazo con el dedo- nos vemos niña. Y acuérdate de nuestro trato- camino hacia el interior de la catedral y se perdió en la multitud.

Ya con el dinero en mano Sakura pudo volver a respirar, no podía volver a casa de su amiga, sería muy sospechoso, por lo que octi por ir a su departamento muy a su pesar.
Al llegar a su departamento se encontró con Karin, quien estaba dentro del mismo mirando la tv, cuando sintió que la puerta se abría apagó bruscamente la misma para girarse y abrazar a su amiga.

-Lo siento tanto Saku - Si abrazo fue  correspondido- se que no lo vas a aceptar, tampoco aceptarás dinero del donante de esperma, así que me tomé la libertad de pagar parte de tu deuda en la clínica- la boca de Sakura era una O, no podía creer lo que escuchaba.

-pero no tienes porqué gastar tu dinero en mi Iron, lo aprecio realmente, pero es demasiado-

-tranquila que tampoco era mi dinero, es de mi tonto prometido - dinero Uchiha metido nuevamente en su vida. No sabía bien cómo reaccionar.

-¿Novedad de Suigetsu?-  quiso cambiar el tema.

-creo que está muerto, no me quedará de otra que remontar mi carrera o quedarme con Sasu..- suspiro, el corazón de la pelirosa estaba muy acelerado, ¿Sasu era un nombre? ¿Diminutivo de Sasuke? -Shisui es amigo de él y me ayuda a buscarlo. Realmente estoy enamorada de él-

Capítulo 23: la cena de ensayo