Duele. Siento un vacío. Estoy arrodillada en el suelo. No me puedo levantar, mi mano sigue agarrada de la baranda.
-Ami-. Oigo la voz de Ryan, pero no puedo mirarlo, duele.
Brazos me rodean y me ayudan a levantarme. Se que es él. Me carga entre sus brazos. Mis ojos se quieren cerrar, pero no los dejo.
-Ry...an-. Su nombre me es difícil de pronunciar
-Ethan, así me llamo, Ethan-. Cierro los ojos.
...
La luz ilumina mi habitación. Abro los ojos y veo a la persona que se hace llamar Ryan, pero su verdadero nombre es Ethan.
-Por fin despiertas. No te preocupes, aún es veinticuatro-. Sonrie.
Mi cuerpo pesa. Tengo miedo, siento que puedo morir en cualquier momento. Empiezo a llorar como si fuera la última vez que volvería a llorar. No quiero eso quiero vivir y ver a Andi, quiero casarme con Ryan.
-Tengo miedo. Siento que voy a morir en cualquier instante-. Se acercó y me acarició la cabeza
-No te gastes-. Me dio un beso en la frente- Tu eres fuerte. Por eso nunca debiste haberte enamorado de mi. Perdón-. Esas palabras fueron palabras dolorosas. Voy a morir de todas formas.
Nunca debí haber sido terca, si apreciaba mi vida debí haberme alejado de él. Eso quisiera haber hecho, pero no. Lo amo y lo voy a seguir amando. Muerta o viva, aún así, yo lo amo.
-¿Me perdonarías? ¿perdonarías a una masoquista que, sabiendo que no querías que me pase nada, está a punto de morir?-. Lágrimas se asomaron por sus ojos
-Como podría. Tu querías que yo te ame... pues... lo conseguiste-. Rompió en llanto- Lo conseguiste, Ami, te... te amo-. Lo abracé
Lo conseguí, ya no puedo soportarlo más. Lo amo y el me ama, eso me hace feliz
...
-Lo conseguí-. Me abrazó fuertemente.
Nuestros llantos se hicieron uno. Sequé sus lágrimas y la besé como nunca antes la había besado. Sentí su calor y sus latidos...se detienen. Una sonrisa se asomo por sus labios
-Ryan... no...Ethan-. Su mano cayó y sus ojos se cerraron.
Lloré, lloré y lloré. Un vacío se formó en mi corazón
...
Seis días después
Ahora me encuentro en el entierro de quien era Ami Wilson, una chica fuerte y alegre, una chica que no se daba por vencida, que nunca se dió por vencida, hasta su último día.
Me acerqué a su ataúd y se puse un anillo de casados
-Aquí, tu y yo juntamos nuestras almas y corazones. Te prometo amor eterno. Desde ahora no somos amigos, somos esposa y esposo. Gracias por aceptarme como soy-. Susurré y sellé el matrimonio con un beso.
-Amigo ¿ya?-. Asentí y me alejé.
Enterraron a Ami y todos se fueron. Me quedé ahí. No puedo dejarla sola ya que por mi culpa murió, resistió hasta las últimas.
-Ami, querida esposa. No creas que esto se va a quedar así, pronto nos veremos en el más allá, seremos una feliz pareja, no miraré nunca a una mujer como a ti te miraba-. Suspiré- Espérame, terminaré con esta maldición-. Me despedí.
Fui a una tienda de artículos "mágicos".
-Señor, estoy buscando como terminar mi maldición, como matar al demonio dentro de mi-. Me miró de pies a cabeza.
-Solo matándote podrás...-. Me fui, si eso es lo que debo hacer, lo haré.
"Fue un gusto conocerlos"
Le envié el mensaje al grupo que había formado.
Respiré el aire de la ciudad.
-Ami, recibeme, ¿si?-. Miré la altura de la que estaba. Tengo miedo
Me paré haciendo equilibrio y miré hacia abajo.
Soy Ethan Jensy, apodo Ryan, 20 años. Viví mi vida con una maldición que me decía que iba a matar a todas las mujeres de las que me enamore. Me enamoré perdidamente de Ami Wilson, murió y ahora yo también debo morir, es la única manera de que esta maldición termine y no se siga esparciendo por la familia.
Amo a Ami, y por ella muero.
-Eth...an-.
-Ryan...no...Ethan-.
Por ellas dos. Vuelvo a mirar al suelo
-No lo hagas, tu quieres vivir, no morir-. Escucho la asustada voz de Koky
-Si muero, tu mueres-.
-Pero no ganarás nada, si tu...-. Interrumpí
-Matáste a Ami, matáste a Liz, me matáste a mi, te matáste a ti-. Puse un pie en el aire y me dejé caer.
Era Ami Wilson, apodo Meck, 20 años. Me enamoré de quien no debía enamorarme, Ryan Jensy...Ethan Jensy. Me hizo el año casi imposible, desde que rompió mi carta. Él se había enamorado de mí cuando era mucho más pequeña. Una maldición lo atrapó al escuchar que yo odiaba a los hombres.
Hice amigos, los que no tenía. Mi primera amiga fue Tomoy, el viento, la brisa. Me encontré con un chico que decía ser mi amigo, ya que ahora lo es. Marck era mi psicólogo de tragos. Dereck, Treck y Damian eran amigos de Ryan y se volvieron amigos míos.
Conseguí trabajo. Mi vida empezó a mejorar, Ryan me empezó a amar. Ahora vivo feliz con él, mi querido esposo. En el paraíso de los muertos.
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STILL, I LIKE YOU
RomanceCielos, del chico que me enamoré. Aquí estoy, llorando por un amor no correspondido. Duele que la persona que te gusta te dañe, te restriegue por el suelo como trapo...no, no me rendiré, soportaré todo lo que tenga que soportar, pero conseguiré su c...