Narra Caleb:
Con un muy sencillo movimiento de dedos logre dormirla ahora estoy modificado su memoria y la de su loba para que me recuerde a mi como su mate de echo para ellas oleré igual a su mate.
También la hipnotice para que no se quitara el collar nunca, me amara y se entregará a mi será Mía y yo seré Suyo como siempre debió haber sido.
Por suerte la inútil de mi secretaria no sabe donde conseguir el agua que le pedimos ya me ha hablado como 5 veces al celular para preguntarme donde conseguir el agua.
Yo le dije ese es tu trabajo no el mío y le colgué, sentí que Darice se removía en mis brazos y abrió sus hermosos ojos.
Darice- ¿que? ¿Qué pasó?- le sonreí.
Caleb- te desmayaste por que no habías desayunado mi Luna- ella me miro extrañada, se acercó a mi cuello para olerme.
Después se alejó de ahí para mirarme con ese brillo en los ojos que extrañaba tanto pero de repente cerró los ojos he hizo una mueca de dolor.
Darice- me duele mucho la cabeza-
Caleb- es por lo mismo mi amor, pediré que nos traigan el desayuno- ella asintió y recargo su cabeza en mi hombro, marqué el número de mi secretaria quien contesta al tercer tono.
Hilda- ¿qué pasó?- Darice gruño al oír su voz pero yo le di un beso en la frente para que se calmara.
Caleb- olvida lo de las aguas, necesito que nos traigas el desayuno, mi novia no se siente bien-
Hilda- ¡llevó hora y media buscando las malditas aguas y justo cuando las encontré!¡¿me dices que lo olvide!?-
Caleb- ¡si y no me grites o cuando llegues encontraras tus cosas afuera del edificio! ¡Mas te vale apúrate!- colgué y acaricie la mejilla de Darice.
Media hora después llegó Hilda que miro mal a Darice y nos dejo el desayuno en mi escritorio.
Hilda- en una hora será la reunión- simplemente asentí -¿se te ofrece algo más Caleb?-
Darice- no seas igualada, él es tu jefe y le tienes que hablar de usted- yo quise reír pero me contuve -ahora vete antes de que pierda la poca paciencia que tengo-
A si también le devolví su antigua personalidad aun que la mezcle un poco con su personalidad de ahora, Hilda se fue dejándonos solo, comenzamos a desayunar.
Caleb- ¿celosa?-
Darice- simplemente dire que quiero que la despidas hoy mismo-
Caleb- tus deseos son órdenes mi Luna bella- ella me sonrió y me dió un casto beso después de desayunar ella se sentó en uno de los sillones de mi oficina que quedaba cerca de la venta.
Tomo uno de los libros de mi estante y se puso a leer, yo firme algunos papeles pero de vez en cuando me le quedaba viendo, hacia caras muy graciosas mientras mas avanzaba en la historia.
No se que libro habría agarrado pero al parecer era uno de misterio ya que a veces se sorprendía y comenzaba a hablar entre dientes sobre una conspiración o algo así, seguí firmando mis papeles.
Darice- ¡lo sabía!- di un brinco en mi lugar y la mire, ella me sonrió inocente -lo siento mi amor- yo me reí y negué, vi me reloj vi que ya era hora de la junta.
Caleb- ¿mi amor te quedas aquí o me acompañas a la junta?- me levante y camine hasta donde estaba ella, lo pensó para después contestarme.
Darice- te acompaño mi amor- sonreí, se levantó del sillón, dejo el libro en su lugar y tomo mi mano.
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Una segunda oportunidad
WerewolfDicen que la diosa luna les da una segunda oportunidad de vivir a aquellos que en su primera vida sufrieron demasiado pero ¿será eso cierto? Después de 10 años de la muerte, Kendra re nace en otra manada, en otra familia y con un nombre diferente A...