FLICKER ||THE PLAYBOY SAGA #2||

«catorce»

Un mes después...

Isabella mira con nostalgia a la habitación, recuerda cuando la vio por primera vez y no se quería quedar allí porque todo era rosa. Casi le da un ataque al ver tantas cosas rosas juntas en una sola habitación.

Su piso en la universidad no estará listo hasta que las clases comiencen en algunos meses, pero ella se irá a España a pasar las vacaciones de verano con su familia.

—Extrañarás esta habitación rosa, ¿no es así? —la voz de Emiliano la saca de sus pensamientos.

Trata de no actuar sorprendida porque él está allí, pero si lo está. Emiliano no ha entrado en su habitación en meses, 7 para ser específicos.

—Aunque no lo creas, si lo haré. —asienta con la cabeza, dándole una sonrisa.

—Ven aquí. —Emiliano la toma de la mano, llevándola a su cama. —acuéstate. —saca su teléfono de su chaqueta y le da un auricular. —lo haremos como en los viejos tiempos antes de que te vayas. —le da una sonrisa, acostándose al lado de ella.

we'll do it all
(lo haremos todo)

everything
(todo)

on our own
(por nuestra cuenta)

La voz del cantante suena en sus auriculares.

we don't need
(no necesitamos)

anything
(nada)

or anyone
(o a alguien)

if I lay here
(si me acuesto aquí)

if I just lay here
(si solo me acuesto aquí)

would you lay with me and just forget the world?
(te acostarías conmigo y te olvidarías del mundo?)

Emiliano susurra la letra de la canción, acariciando su mejilla delicadamente. Isabella cierra sus ojos, disfrutando de la caricia, inhalando el olor del castaño.

let's waste time
(vamos a perder el tiempo)

chasing cars
(siguiendo autos)

around our heads
(sobre nuestras cabezas)

El ruido de la alarma la despierta de golpe, dejándole saber que las cosas con Emiliano todavía siguen igual. Abraza la almohada que Emiliano usaba cuando solían acostarse en su cama y escuchar música todo el día cada fin de semana. Aun huele a él, aunque el olor ya se está desvaneciendo.

—¿Cómo terminamos así? —susurra contra su almohada.

Es una pregunta que se ha hecho un millón de veces en los últimos 7 meses. Entierra su rostro en la almohada, no queriendo salir de la cama en todo el día. Su teléfono vibra en la mesita de noche haciéndola gruñir. Sabe que es Josh y ahora no está de humor para fingir estar enamorada de él. Al principio si estaba genuinamente interesada en él, pero mientras iba pasando el tiempo se fue dando cuenta de cómo era el ojiverde en realidad, pero no rompió con él. Sabe que él es la única persona que la ayudará a superar el enamoramiento con su mejor amigo, casi hermano.

—No estoy de humor. —toma el teléfono para dejarlo en silencio.

Vuelve a ponerlo en la mesita y sale de la cama. Mira alrededor de la habitación con nostalgia, la mayoría de sus cosas ya están empacadas y listas para moverse a su piso de la universidad. Entra al baño para darse una ducha rápida antes de bajar al comedor y desayunar con los Vélez.