FLICKER ||THE PLAYBOY SAGA #2||

«final»

Todos andan corriendo de un lado a otro. El día que Emiliano y Bella han esperado por muchos años al fin ha llegado. El día que se prometerán amor eterno ante Dios y sus familias.

Los medios han andado detrás de ellos, ya que los hijos de los 2 diseñadores más importantes e influentes en la industria de la moda de esta década se casarán. Han hecho lo imposible por mantener el lugar en dónde pasará la ceremonia en secreto. Pero ellos tienen muchas teorías de en dónde puede ser, una de ellas es España ya que Bella y su familia son de allí. Aunque también hay la posibilidad que se casen en Inglaterra en dónde el novio creció.

—¿Crees que sepan que será aquí? —Emiliano le pregunta a su madre, acomodando su cabeza en su hombro.

—No, mi amor. —ella acaricia su cabello. —este es el último lugar en dónde nos buscarán. —

—Nunca pensé que me casaría con ella. —él dice con una sonrisa en su rostro. —quién diría que me casaría con la niñita hermosa que conocí en uno de tus desfiles de modas. —

—Lo sé. —ella asiente con la cabeza. —Richard me volvió loca cuando nos dijeron que eran novios... —

—El tío Rich sabía. —dice entre carcajadas. —él siempre me decía que me terminaría enamorando de ella. —

—Es que se notó desde el primer día que la conociste. —su mamá sonríe ampliamente.

—Mum, can I go to the pool please? —su hija de 6 años pregunta en su recalcado acento británico, batiendo las pestañas para que su madre diga que sí.

—No sé qué me estás diciendo. —Haise la vuelve a ver seria.

—Por favor mami, ¿puedo ir a la pool? —hace el puchero que su padre le enseñó.

—Christopher me va a oír... —

—Hola cariño. —saluda su esposo. —escuché que me hablabas. —

—Deja de andar enseñando a hacer pucheros a la niña. —le da un golpecito en el bíceps. —y de seguro tú la alborotaste para ir a la piscina, así que tú la llevas. —

—Pero mum...—Emily la vuelve a ver confundida. —muchas mujeres vuelven a ver a daddy. —

—¿Ah sí? —ella pregunta con la ceja alzada.

—Si. —ella asienta, sin saber en el lio que está metiendo a su padre. —pasa cada vez que vamos al súper mercado. —

—¿Ah sí? —sigue cuestionando.

—Pero también dile como daddy las ignora. —Christopher es rápido en defenderse. —yo no les hago caso mi amor. —hace un puchero, igual que el que su hija estaba haciendo hace unos minutos.

—Hm-huh. —se levanta de la silla de tomar el sol. —vamos Em. —toma de la mano a su hija.

—¿Sabes que te ves bien mami en ese traje de baño? —le susurra al oído, mirándola de los pies a la cabeza. —me dan ganas...—

—Será mejor que yo lleve a Em a la piscina. —Emiliano se pone de pie de un respingo. —vamos Em. —la toma del brazo y caminan para la piscina.

—Christopher. —Haise lo vuelve a ver, poniendo sus brazos alrededor de su cuello. —No puedes decir eso enfrente de Em, ya hemos hablado de eso. —le recuerda. —pero dime, ¿de que tienes ganas? —

—¿Recuerdas las veces que lo hicimos en la piscina? —susurra contra sus labios, mandando un escalofrió por todo su cuerpo.

—Como olvidarlo. —se muerde su labio inferior seductoramente.