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Muy bien.. Me hallo con todo tipo de materiales en mi bolso para hacer la única cosa que podrá hacerme caer dormida en mi cama con suma tranquilidad y paz conmigo misma. Hice todo por parejas: Eduard y Lucas, desordené ambas habitaciones; camisas regadas, pantalones por todas partes, boxers en la tina mojados junto con las medias, zapatos amarrados unos con otros debajo de la cama; pinté sus rostros de forma diferente haciendo cualquier tontería con marcador permanente y sin olvidar que en el shampoo de Eduard ligue tinte fucsia con manzanilla y en el de Lucas coloqué uno lila pero lo puse en el acondicionador.

River y Ryan.. Que jugoso sería esto: Tomé los boxers de Ryan y los guardé en mi mochila para hacer otra cosilla, las medias de ambos las junte en mi lavamanos para adornar su hermoso ventanal, la cara de Ryan quedó dibujada con marcador permanente en todos sus brazos y River una firma mía en su abdomen, las camisas de ambos las amarré con cinta adhesiva (pero lo hice en el patio ya que el ruido sería muy notorio) al terminar con esa enorme bola de ropa vi la hora y ya eran las 2 de la madrugada.

Mierda..

En la cama de Ryan esparcí Nuttela (esto me dolió más a mi que a él) y en la de River algodón de azúcar y por último pero no menos importante El tinte, en River utilicé un Naranja fluorescente y en Ryan un verde chillón.

Seguían Marck y.. Ethan, con ellos dos sería más cruel ya que fueron los de la idea de ‘Lanzarme a la piscina para alegrarme’ (aunque Ethan no halla estado allí, tuvo mucha influencia) bien: en el cuarto de Marck hice un chiquero absolutamente todo, el baño quedo resbaloso por el jabón, en la cama de él había salsa de tomate, tenía dibujos en la cara, sus zapatos tenían ajo y con las agujetas amarradas, el shampoo contenía tinte Amarillo pollito, sus camisas y pantalones quedaron atados con cinta adhesiva y por último su puerta.. Tenía un ligero pote de pintura acrílica color rosado. Seguía Ethan: En su cama coloqué jarabe de waffles, sus zapatos tenían ajo y cebolla, su baño quedó inundado en pasta dental con un tinte azul eléctrico en el acondicionador, las camisas y pantalones fueron puestas en la piscina con todo gusto, y su cara le dibujé palabras ofensivas (me había molestado mucho, no me culpen).

Los boxers de Ryan los colgué en las ramas de el árbol enorme que se hallaba en el patio y unos cuantos los colgué de una escoba implantada en el pasto como una bandera. Pero faltaba algo, una foto de recuerdo de cada uno y ya cuando faltaba Ethan me iba cayendo como estúpida por la miel en el piso que había puesto, por lo que solté un grito instantáneamente ahogado.

– ¡Mierda! – solté en susurro mientras me estabilizaba poco a poco

– Sam.. Perdoname por favor – habló sonámbulo y tomando mi brazo para quedar cara a cara.. En su voz había suplica y lágrimas caían de sus párpados cerrados

– Me alegro que sientas culpa hasta en tus sueños, imbécil – susurré pero de alguna forma u otra me dio una punzada en el pecho

Tomé mis cosas y volví a mi habitación sudada y sucia.

Definitivamente debo bañarme, apuesto a cebolla y ajo.

Me quité la ropa y me duché unos 15 minutos y al salir ya eran las 4 de la madrugada ¡Tengo que dormir!. Tomé una camisa de tirantes blanca y un poco transparentosa, unos shorts de algodón muy cortos para mi gusto; pero meh, fue lo primero que hallé. Una vez haber guardado todo y haber recogido, caí rendida en los brazos de morfeo.

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Estaba durmiendo tranquilamente cuando sentí unos cubos de hielo y agua encima de toda mi cama y por el contacto supe que me habían quitado la cobija.

– ¡YO NO FUI! – grité incorporándome de forma rápida y alterada

– ¡SAM! – Gritaron molestos al unísono pero cuando mi vista se aclaró y me acostumbré a la luz del sol visualice rostros dibujados con maquillaje, cuerpos sucios y algunos cabellos pintados

Viviendo con 6 playboys (pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora