「 messages 」; changjin (TERMINADA)

•28•

ChangBin se encontraba frente a su espejo, arreglando su desordenado cabello negro. Eran las 12:00 y se estaba preparando para salir con HyunJin, como ya habían planeado. Estaba nervioso, pero ansioso por volverle a ver. Tenía ganas, pero a la vez no. ¿Y si no era lo suficientemente lindo para HyunJin? Tonterías, su mente le engañaba a él mismo.

Rápidamente, entre cremas, peines y secador, terminó de arreglar su cabello. Recibió un mensaje por parte de su menor diciendo que ya estaba fuera, esperándole. El pelinegro, listo para salir, cogió las llaves y salió por la puerta, encontrándose con la sorpresa de que el vehículo con el que le esperaba HyunJin no era más que una pequeña y cutre moto.

HyunJin, al ver la expresión de su mayor, se encogió de hombros con una pequeña pero tímida sonrisa, elevando las cejas.

HyunJin : Parece que no, pero esto es un bólido. - dijo retirándose el casco, el único que tenía.

ChangBin : Ajá.- asintió ChangBin riendo ligeramente aún sin perder de vista la moto.

HyunJin : Bueno qué, ¿nos vamos? - dijo tendiéndole el casco al pelinegro y volviendo a la moto con una pequeña sonrisa.

ChangBin asintió algo extrañado, puesto que el único casco que había traído HyunJin consigo era el que le había brindado a él.

ChangBin : ¿No tienes otro casco? - Preguntó preocupándose por el menor.

HyunJin : No se preocupe, Hyung. - negó con las manos, quitándole importancia.

Finalmente, ambos acabaron subidos en la moto rumbo a algún lado. HyunJin lo que tenía planeado era llevarle a un italiano, uno de los caros, y así fue. Comieron, hablaron y rieron, todo bien hasta que llegó la hora de pedir la cuenta. HyunJin se había dejado la cartera en casa, y no, no había sido adrede. Entre que el día de hoy iba a ver a ChangBin, y que tenía mucha presión encima, realmente acabó por despistarse y dejarse el dinero en casa.

HyunJin : Mierda... - Murmuró el menor volviendo a chequear sus bolsillos con desesperación.

ChangBin : ¿Ocurre algo?

HyunJin : Me he dejado la cartera... - dijo llevándose las manos a la cabeza, arrastrando hacia atrás su cabello con una expresión de preocupación.

ChangBin : Tranquilo, yo tengo dinero. - pronunció el mayor sacando su cartera y contando el dinero para colocarlo posteriormente junto a la factura.

Finalmente, un ChangBin pobre, y un HyunJin completamente avergonzado, salieron del local.

HyunJin : Bin Hyung, le juro que no me di cuenta.

ChangBin : Ya está, tranquilo. - Dijo el mayor tratando de mantener la paciencia, puesto que 50 euros no eran fáciles de ganar. - No te preocupes, ¿vale? - añadió agarrando repentinamente la cara de su menor y espachurrando sus mofletes, sonriendo ligeramente y dejando a un HyunJin completamente confundido. De repente, cuando menos se lo esperaba, el mayor acudió a callar sus disculpas con un pequeño y tierno beso en sus labios. Acto seguido, se separó con una pequeña sonrisa, soltando la cara de HyunJin y volviendo hacia la moto, dejando a su menor con una expresión de idiota enamoradizo, quien iba tras él.

Con la tontería, ya se habían hecho las 16:00. El resto de la tarde se la pasaron paseando por parques, visitando centros comerciales, e incluso pasaron por una tienda de mascotas a ver la infinidad de animales que se encontraban en ella.

Finalmente, se hicieron las 19:15, y comenzaba a anochecer. HyunJin decidió darle una sorpresa a su mayor, y tornar el rumbo de la moto, cuya gasolina comenzaba a escasear, hacia una playa.

Frenó y bajó de la moto junto al pelinegro.Lo que ChangBin no sabía, era que dicha playa no era una cualquiera, sino que tenía un significado muy especial para HyunJin y para JeongIn, su antigua pareja. Y que HyunJin le había llevado ahí para comenzar una nueva historia, borrando cualquier error del pasado.

ChangBin : ¡Ala, que bonito! - Exclamó al ver como el Sol se desvanecía poco a poco, dejando un vacío en el horizonte, el cual sería ocupado posteriormente por la Luna. Al igual que el herido corazón de HyunJin era el horizonte, el Sol, era JeongIn, y la Luna, ChangBin, quien había aparecido en su vida para rellenar ese pequeño hueco en su corazón, y reparar, poco a poco, todas las heridas que le había provocado el Sol al abandonarle.

HyunJin : No más que usted. - dijo el menor caminando hacia ChangBin, acabando por pasar su brazo tras sus hombros, y mirarle con una pequeña sonrisa en sus labios, los cuales acabarían por depositar un beso en la frente del pelinegro.

Finalmente, HyunJin acabó por sentarse en la fría arena de la playa a observar la puesta de sol. ChangBin le siguió la acción, sentándose a su lado.

ChangBin : HyunJin. - dijo el pelinegro tratando de llamar su atención, a lo que HyunJin le miró. - Te quiero.

HyunJin, en cambio, solo se limitó a regalarle una sonrisa.

HyunJin : Oiga, siento lo de hoy en el restaurante.

ChangBin : Oh, no te preocupes. - dijo ChangBin negando con la cabeza, mirando cabizbajo sus manos.

HyunJin : ¿Puedo compensarle de alguna forma?

ChangBin : ¿A qué te refieres? - le miró. - ¿qué forma?

HyunJin : ¿Qué le parece si...soy su pareja por un tiempo ilimitado? - volvió su mirada al mayor con una pequeña, pero picarona sonrisa. - ¿cubriría eso con sus 50 euros?

ChangBin : Que tonto eres. - Rió tímidamente.

HyunJin : ¿Entonces? - repitió en busca de una respuesta. - le aseguro que puedo ser muy buen novio.

ChangBin, por el contrario, no respondió. Chasqueó su lengua, y acto seguido, buscó desesperadamente los labios de HyunJin, depositando un beso en la boca del chico al que sin saberlo, le había robado el corazón con tan solo mensajes.

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Y hasta aquí llegó esta maravillosa historia que tanto tanto tanto me ha gustado escribir. Se que probablemente no haya sido la mejor novela que hayáis leído, pero espero que os haya gustado al menos un poco. Con esto y poco más, me despido. Os quiero mucho.