AYAYA

Decisiones

Corro y corro
Pero las piernas me pesan
¿Quién me persigue?
Una sombra negra.

¿A dónde voy?
¿En dónde me escondo?
Sin importar a donde vaya
La sombra me atrapa.

Ella lo ve todo.
Ella lo sabe todo.
No hay salida.
No hay escapatoria.

Cada vez es más difícil.
Ya no puedo seguir.
Me detengo del cansancio,
Y me tumba con un ¿Zapato?

-Ese es el poema más horrible que he escuchado- dijo la sombra

-Si puedes hacerlo mejor, entonces haz uno- le respondió Kyuhyun.

Y en medio del desierto, con el cielo amarillo y las nubes bajas, la sombra comenzó a cantar una confusa canción.

-¿Qué estás haciendo?- Una vez que Kyuhyun preguntó, la tierra lo comenzó a elevar.

-Estás muriendo- respondió la sombra.

Y Kyuhyun despertó de golpe.

《¿Qué había sido ese sueño?》 se preguntó.

Se intentó levantar pero su cabeza dolía. Se tocó la nuca con los dedos y entonces recordó el golpe que había recibido.

《¿En dónde estoy?》Miró hacia todos lados y pudo ver a Heechul recostado a los pies de la cama.
En la mesita de al lado, había un posillo con agua y un paño. Recordó que él lo había cuidado durante la noche.

-Tengo que salir de aquí- susurró para sí mismo.

Abrió la cama para levantarse, pero oyó la manilla de la puerta girando. Rápidamente volvió a acostarse y cerró los ojos.

-¡Heechul!- dijo Shindong en cuanto lo vió.

Heechul despertó algo desorientado -¿Qué?

-¿Qué haces aquí?¿Estuviste aquí toda la noche?- preguntó Shindong.

Heechul se levantó y se frotó los ojos con las manos -Sí...

Desde la puerta se asomó Leeteuk.

-¿Heechul? ¿Qué haces aquí?- preguntó.

Kyuhyun los escuchaba hablar mientras ellos creían que el dormía 《¿Cuándo se irán? Necesito idear un plan.》

-...Aunque podríamos simplemente matar a Kyuhyun ahora y Siwon vendría de todas formas- escuchó decir a Shindong.

《¡Van a matarme!》《¿Y si corro ahora?》

-¡Señor Changmin!- exclamó Heechul.

Kyuhyun abrió un ojo para ver qué ocurría 《A este si que lo van a matar》.

Changmin salió corriendo después de arrojarles el posillo con agua. Ahora que los bandidos estaban distraídos persiguiéndolo, Kyuhyun tenía una oportunidad.

Se destapó, colocó sus pies en el suelo, se levantó y... se cayó. Aún no sanaba del gran golpe que le había dado Heechul, y eso lo desestabilizó. Sin embargo, debía intentar ignorarlo. Tenía que salir de esa casa. Prefería morir en el desierto que a manos de esos criminales.

Con todas las fuerzas que le quedaban, logró ponerse de pie. Tomó sus zapatos que estaban en la orilla de la cama y abrió la ventana. Por suerte, esta era baja, por lo tanto no le fue difícil atravesarla.