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Es tan increíble como los payasos pueden verse tan inofensivos, entretener a los niños y a la vez causarle tanto temor a los adultos y divertirse con ellos-sonreí mientras pensaba en ello-eso es algo muy original, asombroso... 

Estaba perdida mirando alrededor, mi piel se veía más blanca que de costumbre, el color de las uñas de mis pies eran mas opacos y mis pensamientos menos inocentes.
Respire profundo eso realmente me preocupaba, observé alrededor y la mayoría dormía.

-Jill-preguntó Slender-acabo de ir a tu cuarto y la luz si enciende, no preguntaré por tu corset pero... porqué tu motosierra no esta a lado de tu cama como siempre?

La preocupación se apoderó de mí y me teletransporte a mi cuarto par empezar a buscar a mi querida amiga, la encontré debajo de la cama rodeada de dulces viejos y negros, la agarré y abracé como nunca dejando entrar el olor a sangre seca en mis fosas nasales.

Al día siguiente...

Las chicas estaban haciendo algo de comer ya que Slender aún no llegaba.

-qué le sucede? No hay nada en la nevera!-reclamaba Nina.

-últimamente ha estado muy distraído-opinó Liu.

-sí, igual que Jill-agrego Clock.

-sólo mira la hora y no a llegado-inició Jeff.

-pronto oscurecerá y los humanos estan de fiesta, podrían meterse al bosque y verlo-por primera vez Ben había apartado sus ojos de su videojuego.

-ya es un adulto ben.

2horas más tarde...

-Bien chicos! Empieza la noche de cacería!!-gritó Liu-ya saben que hacer! Nos vemos en el punto de siempre a la hora de siempre!

-porqué debemos vestirnos así?-preguntó Sally curiosa.

-porque debemos colarnos entre los fiesteros pequeña-respondió Jane.

-bien! Disfrutenlo chicos!-terminó Masky acto seguido todos se separaron.

Estaban muy emocionados a excepción de Jill, su pesadilla del día anterior había ocurrido en una noche de cacería. Para cambiar su apariencia tuvo que retirar su cono puntiagudo para verse más humana, maquillarse y vestir de una manera completamente diferente aunque ese no era parte de su plan.

Caminando por la acera se encontró con una chica que por alguna razón vestía muy elegante mientras esperaba afuera de un local ya vacío.

-hola abuela! A dónde se dirige tan tarde?-intente distraerla un poco.

-cómo que abuela!? Que falta de respeto, a caso no me reconoces? soy Lavrid Lavoe reina de las fiestas! Y yo...

-va a una?-el carácter ligeramente inocente provocaba que la mujer estuviese mas confundida.

-correcto, iré al hotel más grande de la ciudad, estoy esperando mi limusina-dijo con cierta altivez-y tú quién eres?-preguntó con cierto desprecio.

Se acercó lentamente-yo soy tú-acto seguido tomó posesión del cuerpo de la mujer-y hoy será tu último día de vida.

Luego de unos minutos la limusina se detuvo en frente de mí, observé al conductor quien se disculpaba por la tardanza-es que creí haber escuchado un ruido pero parece que no era nada pero se lo juro! Escuche un ruido muy fuerte! 

-no grites John-intenté dejarme dominar por la arrogante personalidad-no me interesa.

-me llamo Travis.

Negro Y Blanco. Jack y JillDonde viven las historias. Descúbrelo ahora