Un sueño profundo me espera,
con una joven vestida de luto.
Ha sido una larga guerra,
que nunca intenté ganar.Una cama eterna,
donde debo descansar.
Me espera alguno de los dos caminos,
uno de bien y otro de mal.Detrás de esta madera,
veo mi madre llorar.
Y de ninguna manera,
quiero regresar.Coronas de flores y ramos también,
¿ahora para qué?
prepárate para lo peor.Un beso prohibido,
y de nada me arrepiento.
De la libertad me he cohibido,
nadie había oído mi lamento.Llantos desesperados,
no tanto como mis pensamientos antes de esto.
No volveré a llorar solo,
siento serenidad alejado del resto.Un último adiós,
mira como me hundo en problemas.
La salida nunca estuvo tan cerca,
y he decidido tomar un último riesgo.