(Kiara)

- ¿Sabías que la cerveza engorda? - habló Morena.

No podía parar de pensar en la pelea de Agustín. ¿Estaba celoso?

Si nena, ¿todavía no te das cuenta que esta muerto con Sofia?

Cállate.

El amor no correspondido es una mierda.

-¿Kiara? - volvió a insistir mi amiga.

-¿Ah? - contesté volviendo en si - Perdón, ¿qué me dijiste?

- ¿Sabías que la cerveza engorda? - repitió

- Si, pero no me importa - había tomado mucho, mucha cerveza en realidad.

- A mi tampoco, debería importarme si no quiero rodar, pero hoy me quiero divertir.

La miré por un momento, estaba pálida. Su enfermedad empeoraba cada vez mas. Tenía puesto un top, por lo tanto se le podían ver las costillas, estaba totalmente flaca.

Y borracha. Sí, señoras y señores. Mi amiga, la cuál nunca en sus 17 años había tomado alcohol está totalmente ebria.

- De verdad amo a Mateo - balbuceo - Pero me hace perder la poca autoestima que tengo.

Oh, está muy mal. No había sido capaz de admitir que Mateo es una mierda de persona que sólo la hace sentirse inferior a cualquiera.

- Creo que es mejor que duermas - dije levantándola.

Cuando lo hice casi me caigo, al igual que ella.

Muy bien, tratando de ayudar a tu amiga borracha cuando vos estás igual, o peor.

- No quiero dormir. Mejor bailemos - dijo eufórica.

-Morena, no. Vení acá - intenté agarrar su brazo pero ya estaba de camino al living.

Se subió a la mesa dónde habia estado bailando Santiago hace unos momentos y empezó a bailar. Se llevó la mirada de varios babosos.

Mejor sacarla de ahí antes de que hiciera otra estupidez.

Un repentino mareo hizo que pierda el equilibro, cierro los ojos esperando chocar con el suelo pero unas grandes manos me atrapan antes de que esto pase.

Cliché.

- ¿Estás bien? - pregunta un lindo chico moreno con ojos azules. No podía hablar, era como si sus ojos me hubieran hipnotizado.

Sacudió su mano delante de mi cara  y ahí reaccioné

-S-si, estoy bien - contesté arrastrando las palabras

Me sonríe, oh god que linda sonrisa.

- Soy Theo - me dice dejándome más atontada de lo que ya estoy.

- Kiara - digo poniéndome derecha.

Todo lo anterior ha sucedido mientra yo estaba en sus brazos.

- ¿Segura que estás bien? - vuelve a preguntar.

- Sí, sólo necesito ayuda con mi amiga de allá - señalo al lugar donde se encuentra Morena.

O dónde se encontraba.

- ¿Cuál?

Mierda, la perdí de vista.

Esto es malo, mierda mierda mierda.

- La perdí - digo más para mi pero de todas formas el lindo chico me escucha.

- Vamos, te ayudo a buscarla

Adolescencia Con Todas Las LetrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora