One-Shots [Poth]

Conociéndote

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En donde Goth conocé a Palette

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P.O.V Goth

Me encontraba en outertale como siempre, ya que después de tener mis entrenamientos, me gustaba ir para ver las estrellas y leer un libro en un lugar alejado de donde se encontraban las personas... calculaba que era las tres de la tarde.

Desde pequeño me gustaba la soledad y la tranquilidad, a mis padres se les hacía raro, pero al fin y al cabo no se quejaron. No es que en mi infancia no jugara con niños de mi edad, de hecho, si lo hacía... solo los fines de semana.

Todo iba bien hasta que sentí una presencia en mi espalda, me agarró el pánico pensando que era un ladrón o un violador y me paré lo más rápido para darme la vuelta y enfrentarlo con mi guadaña como mi jefe me enseñó porque así son los machos que se respetan. Pero al darme la vuelta vi que era un niño de una estatura menor que la mía y con unas pupilas de forma de estrellas, sus iris de color... ¿amarillo y verde? Su apariencia era muy llamativa...

- ¡Hola, mi nombre es Palette! -Me dijo para después extenderme su mano. Supongo que sigue aquí gracias a que no invoqué mi guadaña-. Eto... se supone que tienes que decirme tu nombre -Hizo un puchero y yo hice una mueca.

- ¿Para qué quieres saber mi nombre? -dije con desconfianza.

Mis padres me enseñaron a no hablar con extraños sin importar si son niños o viejos.

Ups...

- ¡Para ser tu amigo! -Dijo con una sonrisa y una positividad que casi me hace sonreír. Pero eso no va a pasar porque yo soy el macho aquí.

- ¿Y tus padres? -Le pregunté.

- ¿Y tus modales? -¿Qué se cree este pendejo? Aunque admito que su puchero es muy tierno. Simplemente me crucé de brazos y el pequeño volvió a sonreír. Este niño estaba interrumpiendo mi descanso.

- Me llamo Goth -dije claramente audible.

- ¿Goth? -asentí y suspiré cuando vi como aquel rubio agarró mi libro y comenzó a leer la portada.

- ¿La chica pájaro? -preguntó con confusión-. ¿Es una chica qué se parece a un pájaro?

- ¡Para nada! -él simplemente se sorprendió por mi cambio de actitud, pero no podía evitarlo, ¡amo hablar sobre los libros que leo!-. Déjame que te cuento -Me senté en el lugar que me había sentado antes y el automáticamente se sentó a mi lado escuchándome atentamente todo lo que le decía.

- Sí sabías todo esto, ¿por qué lo estás leyendo de vuelta? -ladeó su cabeza bastante curioso.

- Bueno... como mis padres no me querían comprar un libro hice ta, te, ti entre mis libros y.... bueno, tocó éste -dije mientras me encogía de hombros.

- ¿Te gustan este tipo de historias? -Pareció tener mucho interés porque le contestara...

- Eh... no sabría decirte. Me gusta un poco de todo -él simplemente me sonrió en grande.

- ¡¿Vendrás mañana?! -gritó emocionado y acercándose repentinamente a mí.

- ¡Cálmate culiao! -dije mientras lo aparté delicadamente. No iba empujar a alguien menor que yo, o eso me hacía pensar por su apariencia.

- Lo siento. Me emocioné -sonrió apenado-. Es que conozco a alguien que es dueño de muchos libros y podríamos ir a lo de él, mañana.

- ¿Por qué no traes tú algunos libros aquí? -le miré con los ojos entrecerrados.