Los nuevos capitulo 4

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Abrí mis ojos lentamente, todo mi cuerpo dolía, por los golpes que me dio mi padre, aún sigo tirada en el piso, me levante con cuidado, me queje, camine hasta el baño saque el botiquín, me miro en el espejo, estaba pálida tenia moretones en los brazos.

Me quite la blusa así vería mejor, todo mi cuerpo estaba cubierto de moretones, esto sería más complicado de ocultar, en el rostro solo tenía la bofetada este sería más fácil, me quito todo y entro a la ducha, me ardo horrible, algunas lágrimas se escapan por el dolor, muerdo mi labio para evitar soltar un sollozo

Salgo me envuelvo en una toalla, me pongo una pijama, me cambio desenredo mi cabello, miro la hora y son las diez de la noche, me acuesto en mi cama, no aguanto mas y empiezo a llorar, hasta que me quedo dormida.

(....)

Desperté por la alarma, me levante aun con el dolor, me cambie y baje, como siempre mi padre sentado en el sofá viendo la tele, camino hasta la cocina y miro a mi madre, me da un beso en la frente y sale, me duele que sean así, después de que me golpean actúan como si nada pasara y es muy doloroso, desayuno y lavo los platos.

Tomo mis cosas y salgo mi padre ya está en el auto, arranca y el empieza hablar de lo de siempre y yo miro el paisaje, cuando llegamos me despido, salgo del auto, él se va, camino hasta donde esta Daniel.

--Hola--Le digo, me mira y parece preocupado.

--¿Estás bien?-- Se acerca mira mi mejilla. --Te golpearon de nuevo—dice con la mandíbula apretada

--No, es solo que me tropecé—me mira incrédulo

--Mía, por favor confía en mi--le sonrió, no aguanto mas sollozo se me escapa, mis lágrimas caen, me abrazo rompí en llanto. --Tranquila todo estará bien-- Dice, acaricia mi cabello. --siéntate, cuéntame que fue lo que paso-- Me senté, lo mire no sabía si contarle.

Suspire, le conté todo, desde que le rompieron la pierna hasta que fui a mi casa, como me golpeaban era horrible, él sabe que ellos se desquitan conmigo, cuando están enojados.

Así paso una hora hablando, me pidió que fuera a su casa, así que acepte, aparte mis padres no estarán, ellos se irán mañana de viaje y bueno no me harán caso, como siempre, después de un rato nos quedamos en silencio, cada uno metido en sus pensamientos.

--Buenos días--dice la directora.

--Buenos días--Decimos.

--Mía me harías un favor-- La miro. --hoy llegan alumnos nuevos, y quería saber si puedes darles el recorrido—fruncí mi ceño.

--¿Pero de eso se encarga, Vanesa?--

--Sí, pero está suspendida, así que por favor puedes acerté cargo-- Lo pienso.

--Claro—digo forzando una sonrisa

--Gracias, ya sabes que ellos estarán en dirección.

Abre la escuela, me despido de Daniel, sigo a la directora, entramos, se ve un poco triste, quiero preguntar, pero no sé si le molesta, me quedo uno segundos, hasta que decido preguntar

--¿Cómo fue tu cita?--me mira, parece triste.

--No pude asistir—dice algo triste

--Lo siento, porque no hacen otra--niega

--Es un hombre ocupado—hace una mueca

--Puedo mandarle un mensaje, para ver si lo convenzo--propongo

Me da su celular, lo busco ahí esta, empiezo escribir, pidiéndole otra cita ya que tuvo problemas en el trabajo, y que esperara que lo entendiera, paso un minuto cuando este respondió, con que aceptaba, pero tendría que ser en su departamento, ya que tiene problemas y no quiere que a ella la involucren, así que la directora acepta, le mando el mensaje, y él manda la dirección, se verán el sábado.

La directora se pone feliz, de que aceptara grita y brinca de la felicidad, me mira y le sonrió, me abraza, suelto un quejido, se separa me mira, le sonrió, me mira un segundo parece preocupada, parece que dirá algo, pero llaman a su teléfono, y se va.

Salgo y voy a mi casillero, dejo algunas cosas, tomo una pastilla para el dolor es horrible, por ahora estoy aguantando el dolor, paso unos minutos cuando llegan los estudiantes, miro la hora, es la hora de ir a dar el recorrido.

Camino hasta la dirección y ahí me encuentro son varios chicos, al entrar me miran sonríen, les devuelvo la sonrisa, camino hasta la puerta de la directora toco, y ella sale, mira a los chicos, se pone enfrente de ellos.

--Bueno, bienvenidos a la universidad, espero que sea de su agrado, la señorita Mía les dará el recorrido, así que por favor Mía pasa--Camino hasta donde esta ella.

--Hola chicos, soy Mía, y espero ser de mucha ayuda en este recorrido--La directora se va, dejándome sola con los chicos. --vamos a empezar, síganme--salimos de la dirección, caminamos por los pasillos, les indico que hay en cada puerta que está en los pasillos.

--Disculpe--Volteo y veo a una chica asiática. --¿me podría decir donde están los salones de idiomas?--sonrio

--Hablas coriano--asiente

--Si--

-- 나는 또한 그들이 어디 있는지 말해 줄 것을 분명히했다-- (Yo también, claro que te los mostrare) Le digo.

--Gracias--dice

Seguimos el recorrido, cuando nos topamos, a mi tonto favorito, me mira y sonríe, se acerca hasta mí, trata de abrazarme pero retrocedo, el frunce el ceño, pero comprende lo que pasa.

--No otra vez-- Dice, bajo la mirada. --¡Los voy matar!--grita

--No por favor, ya no duele--Digo

--Claro--Toma mi brazo, chillo por el dolor. --Quítate el suéter, tengo que ver que tan grave es--niego

--Por favor, no lo hagas--me quita el suéter, y en mis brazos se puede ver mis moretes, cierro los ojos, algunas lágrimas caen.

--¡POR QUE SIGUES PERMITIENDO QUE TE GOLPIEN!--grita, miro a los chicos, ellos solo me miran con lastima, no puedo más, me arrodillo y empiezo a llorar—Mía--dice, siento sus brazos.

--Lo siento, es solo que no puedo, son más fuerte que yo, no sabes cuantas veces he intentado defenderme pero son más fuerte--sollozo.

--Tranquila, vamos al hospital, tiene que curarte-- Me levanto, pero me mareo, no puedo respirar bien. --¡Mía!--Solo escucho sus gritos antes de que todo se vuelva negro.

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