Capítulo 32

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"Aveces es mejor saber poco a saber mucho"

Al llegar a la casa bajé del auto, me despedí de ellos y seguí hacía la cada.

No veía por ningún lado el auto de mi padre, y supuse que el había salido o aún no habían llegado.

Ingresé a la casa y el silencio sepulcral me inundó, no había ninguna sola luz prendida a excepción de la luz del pasillo que llevaba a la lavandería.

Subí las escaleras sin hacer mucho ruido. Al llegar al pasillo pude escuchar  unos leves lloriqueos que provenía del cuarto de mi madre. Pude deducir que era ella y solo decidí dejarla. Porque yo tampoco estaba en condiciones para consolar.

Seguí caminando y me detuve frente a la puerta de mi habitación, pero dirigí mi mirada a la puerta de la habitación de Sthefany. Respire hondo y seguí hasta ahí.

Me detuve frente a la puerta, traje saliva y gire el picaportes. A ingresar me inundó el típico olor a ella.

Las lágrimas se acumularon pero no las dejé escapar, caminé un poco más y me metí a su cama, que aún conserva su olor.

Me cubrí con la manta y me sumi en lo único que me quedaba de ella...

Recuerdos

°

*Esa madrugada*

Me despertó el portazo proveniente de la puerta principal de abajo, salí de la cama y me dirigí fuera de la habitación de Sthefany y camine por el pasillo hasta las escaleras.

Miré hacia abajo y logré visualizar a Gregory entrando a la casa tambaleante, deduje que estaba borracho.

Me dirigí deprisa a mi habitación, cerré la puerta y me metí en la cama pero lo había olvidado...

No le pude pestillo

Ya no pude hacer nada cuando el entró a la habitación, pronunciaba mi nombre con perversión y lujuria, era un total estúpido y asqueroso

—Gregory— se me corto la voz— porfavor no, haz-hazlo por Sthefany, porfavor, la acabamos de enterar
— Calla— comenzó a quitarse el cinturón— muerta o no yo aré lo que quiera contigo
— Porfavor, papá— las lágrimas empezaron a salir, se acerco a mi y de el manaba el olor a alcohol.

Comenzó a tocarme, de nuevo, no hacía caso a mis súplicas, sus asquerosos labios comenzaron a recorrer mi cuerpo, comenzó a rasgar mi vestido sin piedad alguna, no le importó nada ni nadie.

— mira—dijo mientras me tocaba— tu hermana muerta o no, yo seguiré haciendo lo que se me plasca contigo, y si dices una sola palabra— llevo sus manos más arriba de mis muslos— te irá peor.

Y entonces lo volvió a hacer...
Volvió a abusar de mí sin importar que unas de sus hijas acababa de fallecer.

°

Se largó de  mi cuarto como a las 03:00 de la mañana, mis ojos estaban rojos, las lágrimas secas por mis mejillas y mi cuerpo todo a dolorido.

Me senté en la cama con mucho esfuerzo, y eche una mirada a mi cuarto y me detuve en la mesa de manualidades, ahí estaba el scuter que usaba para cortar cartones.

Me levanté con esfuerzo y me dirigí a cogerlo, ya al tenerlos en mi mano lo hice...

Comencé a clavarlo lenta y profundamente en mi muñeca derecha, lo hice una y otra vez hasta  que sentía que  el dolor interno desaparecía.

Al terminar, abrí el cajón de mi mesa de noche para guardar tal elemento, pero al abrirlo visualze una hoja blanca, la saque y la abrí, la reconocí como una carta, y las letras las reconocí perfectamente, era de Sthefany.

La comencé a leer y las lágrimas volvieron a salir sin tregua alguna.
Al terminar de leer dicha carta susurré un leve

De nada princesa...

Dicho eso fui al baño a limpiarme un poco la muñeca y luego a volver a la cama para opacar todo este dolor.

Algún alguien, en algún lugar...

Esa niña, esa tal Sthefany, esa niña..

Ufff.. ella sabía más de lo que debería

Ella sabía más de lo que Pely Klassem pensaba...

Nota de la autora

"Ajá"

—se retira lentamente—

~M.F~

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