Navidad (Parte 2/3)

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Pov. Draco

Me encontraba haciendo una rabieta con mi madre porque al parecer la señora y el señor Malfoy iban a asistir a un gran baile y me querían dejar solo en casa, eso si que no, odiaba estar solo, pero por décima vez (mientras mi madre confeccionaba su vestido para la próxima noche),  me decía que esta clase de eventos era muy aburridos y que tenían que ir para empezar a limpiar el apellido Malfoy; de repente se me vino una voz a la cabeza repitiendo constantemente un absurdo apodo.

- Mamá... -  empece a decir, pero de inmediato mi madre me atajo.

- Por décima vez, Draco Malfoy, no vas a ir con nosotros - dijo mirándome de reojo.

- ¿ Qué ? No ya no quiero ir, me gustaría saber si me podrian dejar pasar los dos días en casa de una amiga - al decir "amiga" mi madre me miro con un brillo especial en sus ojos.

-  Claro mi niño, ¿ Quién es esa amiga ? - contesto con mucho entusiasmo.

- Pansi Parkinson - conteste con un tanto de disgusto, si iba con ella, me trataría como a un rey.

- No - la voz de mi madre se volvió apagada y volvió a su vestido, la mire con el ceño fruncido  - no me agrada nada esa familia y mucho menos su hija, me da ganas de convertirla en un guacamayo - contesto a mi pregunta mental.

- ¿ Porque de pronto te pusiste feliz y después así ? - 

- Porque pensé que hablabas de la chica Greanger, es una chica muy educada y se ve que es muy linda, de haber sido ella si te dejaría ir, sabría que estas en buenas manos, pero con los Parkinson ni lo sueñes cariño, además ellos también van a ir al baile y no me gusta dejarte en casa con esa niña loca solo, no se que seria capaz de hacer - termino diciendo.

Una sonrisa atravezo mi rostro rápidamente.

- Pues da la casualidad que tengo la dirección de Greanger, si quieres puedo pedirle que me deje quedarme dos días de navidad en lo que ustedes están fuera - dije divertido.

- Eso seria asombroso hijito, yo también escribiré una carta a sus padres explicándoles la razón y saber si no es tanta molestia - dejo su vestido y me miro sonriente - vamos ve a preparar tus cosas y escribe a esa linda chica en cuanto hayas terminado te daré mi carta para que se las envíen juntas, además no me se su dirección - me miro.   

- No te preocupes yo la tengo, te aviso - 

Juntos salimos de su despacho, yo corrí escaleras arriba a mi habitación mientras mamá se dirigió al despacho de papá, cerré la puerta, saque pergamino, mi pluma y el tintero, me dispuse a escribir con una sonrisa, dos días con Hermione era lo mejor, claro si quitamos el hecho de que estaré dos días en el mundo Muggle

POV. HERMIONE. 

Me encontraba en casa investigando acerca de Nicolas Flamel, no había encontrado nada en el mundo mágico y dudaba mucho encontrar algo en el Muggle, pero aún así continué con mi investigación; harta y cansada baje a la pequeña cocina donde se encontraban mis padres tomando una taza de té, me senté a lado de mi madre y la vi con una carta en manos, para ser exactos no era papel común más bien era pergamino, mi madre al notar mi presencia me sonrió y me tendió otra carta. 

- Acaban de llegar, esta es para ti -

Mire el remitente y me sorprendió ver que se trataba de Draco, sonreí y la abrí con una sonrisa:

Hola Hermione, espero y te estés pasando bien las vacaciones de navidad , hace tiempo que quería escribirte, pero ya sabes, los deberes y todo eso. La mayor razón era para preguntarte si no había inconveniente de que pasara dos días contigo y tus padres ya que los míos tienen que asistir a un baile, mi madre ya a informado a la tuya, pero la cuestión es que si a ti  no te molesta, espero tu respuesta y mi madre la de tus padres, espero verte pronto. 

Con cariño, Draco Malfoy 

Mire a mi mamá sonriente y me tendió un pedazo de pergamino, mire el contenido mi madre había aceptado que Draco se quedara, sonreí y la bese, subí corriendo a mi habitación y en la cama se encontraba un Búho mirándome atento, escribí una rápida respuesta, le di los dos pedazos de pergamino al búho y salio por la ventana, me recoste en mi cama sonriendo, en unas horas llegaría Draco ha pasar las Fiestas navideñas conmigo, me sentía curiosamente feliz.

Pasaron dos horas y me quedé dormida, pero me despertaron los insistentes golpes en la puerta de mi habitación.
- ¿ Quién toca? - dije adormilada aún boca abajo.
- Hija, querida creo que debes bajar ahora - decía del otro lado la voz de mi madre.
- ¿ Por qué ? - dije mientras me sentaba en cama y me limpiaba la baba don el dorso de mi mano.
- Tu amigo Draco a llegado -
Me levanté y abrí la puerta rápidamente, viendo que mi mamá tenía una sonrisa divertida en el rostro.
- ¿ Ya llegó - dije totalmente despierta y feliz.
- Si hace unos minutos, está abajo en la sala -
Salí corriendo escaleras abajo mientras mamá me seguía riendo, en el sillón ví a Draco sentado y tanto tenso.
- Draco - dije en su dirección, el se giró hacia mi y sonrió - Hola -
Se levantó y rodeó el sillón.
- Hola Hermione - dijo sonriendo también.
No pude evitarlo y lo abrace, me regreso el abrazo.

Pareja asignadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora