➳Salvando nuestro futuro.

Promesas.

Boruto miró el cielo oscurecerse. La voz de sus amigos y familiares se volvieron un bullicio. Divisó algo rosa interponerse en su visión oscura, poco a poco, su visión abstracta tomó sentido. Sakura tenía vendas en el cuello y la cabeza, pero estaba ahí, emanando chakra a su cuerpo. 

La sensación del chakra curativo era cálida, pero ese día no, en ese momento todo era frío como la lluvia que volvía más borrosa su vista.

--- ¡Boruto! --- una voz más de varias.

--- Está en estado de shock, hay que aplicarle un sedante ahora. ¡Dense prisa!

La luz del hospital lo cegó como esa explosión. Si tan sólo hubiese sido liberado un segundo antes, un segundo, sólo uno necesito para llegar hacia ella.

Aún sentía el dolor calar sus huesos y su piel arder, estando sólo a unos metros sentía su cuerpo débil, ¿Qué fue de ella entonces? Aún recordaba con claridad el estallido, como la tierra se levantó y el aire cortó todo a su al rededor.

Como todo se destruyó frente a sus ojos.

"--- Aún no entiendo por qué ChouChou me quería dar una paliza.

--- Fue porque no dijiste los votos matrimoniales.

--- Tú tampoco.

Sarada desvió la mirada sonrojada.

--- No se me da bien hablar así en público. Ya sabes, tienes un montón de amigos, temía que Konoha no sea suficiente para los invitados.

--- Eres una exagerada. --- Boruto rio --- de todos modos a mi tampoco se me da exponer a medio mundo shinobi mis sentimientos.

Sarada dejó lo que hacia y se volteó divertida y con arrogancia lo señaló. --- Tú, Uzumaki Boruto dices que no se te da el hablar.

Boruto rodó los ojos y se rascó la nuca. --- Cuando se trata de ti es diferente. --- él se sentó en la cama y Sarada lo acompañó. --- me pones nervioso dattebasa...

--- No parece, siempre fuiste tan... decidido y aventado.

--- Porque no sabía lo que tenía delante de mi. --- tomó sus manos y Sarada lo miró, pensó en apartar la mirada, pero era ridículo. Hace unas horas acaban de decir "acepto" y era su noche de bodas.

--- Yo... --- su voz tembló sintiéndose torpe. --- Uchiha Sarada, prometo amarte aunque seas un idiota...

--- Hubiese muerto de risa si lo decías en público. --- Boruto rio.

--- Cá... Cállate. --- ella también rio y suspiró. --- No soy muy expresiva, pero... buscaremos la manera de lograrlo... yo... No te prometo las veinticuatro horas del día, pero si prometo aprovecharte cada segundo, instante.

Lo miró y Boruto sonrió acariciando el dorso de su mano con el pulgar, después llevó la mano a su bolsillo y sacó un papel pulcramente doblado. Sarada lo miró curiosa y el sonrió apenado.

--- Lo siento, me dio vergüenza, creo... que era algo que sólo tú debías escuchar. --- extendió la hoja y la miró. --- Yo, Uzumaki Boruto... prometo amarte siempre y prestarte atención cuando esté jugando video-juegos, de lo contrario te enojarás. --- rio débilmente. --- Sólo tenme consideración cuando sea algún estreno, pero volviendo al inicio... No se me ocurre que prometerte, pero puedo decirte todo porque de algún modo lo haré. No te exigiré verte todo el día ni mucho menos pintaré en tu cara "Esposa idiota"