Escapando de Londres

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Narra Derek

Mi plan fue perfecto incluso con los altibajos que tuvo.

No hubiese llegado a ningún lugar sin la ayuda de Jane Asher, con quien tuve acceso luego de buscarla ante los relatos del ebrio de Stuart.

Mi primo era sumamente descuidado, supe que debía intervenir en cuanto me contó noches después de que Holly desapareciera que estaba en la casa de aquellos bastardos mal peinados bastante coqueta con uno de ellos.

Sigilosamente cuide cada una de mis palabras y no actué hasta no tener en claro los movimientos de cada uno.

Admitiría a mis adentros que estuve bastante cerca de ser descubierto aquella vez donde, al intentar persuadir a Brian quien no contestaba mis llamadas, me atendió el chico Starkey, supuesto baterista de The Beatles.

Bajo un tonto impulso decidí decirle que buscaba a McCartney, solo para visualizarlo cara a cara. 

Sentí el coraje correr mis venas cuando negó conocerla, sentí que aquél niño estaba tomándome el pelo.
Pero me tomé el atrevimiento de llamar a Holly "mi mujer", mientras me oía.

Gracias a Brian Epstein obtuve cada movimiento, cada viaje, horario y lugar. Era innecesario que yo figuré en esa historia de hoteles, por ello fué más útil  Jane.

Poco a poco lograríamos recopilar bastantes "pruebas" de que McCartney estuvo en los mismos hoteles que ella, para pasar por encima a las casualidades.

 Aunque la misma Jane casi mando todos nuestros planes al carajo cuando me relató el encuentro que tuvo con el mismo Paul y otros dos de los imbéciles de sus amigos, ella no toleró el anunció de Mccartney sobre su relación con Holly, por lo que quiso enfrentarlo.

Agradecí a Dios por mas ateo que fuese que aquél incidente pase desapercibido entre ellos.

Así como agradecí que Holly no sé cuestionó mi supuesta amistad con "Peter Asher", primo de Jane, quien en realidad era amigo creativo de McCartney.

Jamás fui su amigo.

Pero debí explicarle a la ingenua chica de donde había obtenido aquellos papeles sin que sospeche de Jane.

Quizás metí un poco la mano de más al seguir tanto a Holly luego de la universidad, pero debía mantenerla vigilada.

No necesitaba que otro tipo se meta mientras el imprudente de McCartney no estaba.

Hallé el hogar de Holly gracias al mismo Paul, a quien tuve que seguir en mi auto de trabajo una tarde.

Fue así como conseguí facilitarle la información a Peter, padrastro de Holly, tuve que cambiar hasta la patente del coche que sacrifique por ello.

Aquel plan había salido bastante mal, dado que el trato que tenía con aquel viejo era distinto, simplemente se salió de control.
El hombre estaba tan loco como alguna vez relato Holly, su esposa lo terminó abandonando.

Me había costado un poco robarle la identificación a mi tía Eleanor, ya que es una mujer algo longeva y también algo loca como Peter, vive a las afueras de una iglesia liverpoolense, recogiendo el arroz de las bodas que pasaban día tras día.

Un lugar constantemente transitado. 

Era yo quien debía aparecer casualmente al lado de Holly en aquella situación, pero como siempre aquella mujer tomaba coraje para hacer las cosas por su cuenta, sin esperar alguna voz de ayuda a su alrededor.

Para cuando llegué a las afueras de su hogar, nadie atendió el timbre.

Esperaba decirle que casualmente la había visto entrar al lugar (cosa que iba a ser mentira), pero me daría el pie a la conversación de la falsa carta.