-¿Entonces?...- Preguntó Lotus.
Cross se arrodilló con la mirada baja.
-Yo, Cross, Le serviré fielmente, Y haré todo lo que me ordene sin cuestionar.-
Lotus sonrió y se acercó.
Lo levantó del suelo.
-No hay necesidad de formalidades... Ahora yo soy tu familia, Bienvenido a casa, Cross.-
-Vamos...- Trataba de abrir un carro.
-Creo que ese vehículo no es tuyo.-dijo Lotus mostrando sus llaves.
-¡Maldición!-iba a hechar a correr, pero Lotus lo tomó del brazo.
-Hey... Quiero hablar.-
El niño dejó de forzajear y Lotus lo soltó.
-¿Porqué haces esto?-
-Porque... si consigo el carro... Todos se pondran felices.-
-¿Todos?-
-Mis... Compañeros.-
Lotus miró al chico bien.
-¿Tús "Compañeros" son los que te dejan lleno de moretones?-
-...¡N-No! Ellos...-
-¿Y tus padres?-
-...ya no estan... solo... pude ir con los demas.-
-Los demas que estan en la calle.-
El chico asintió.
-¿No estas cansado de esto? Esto que haces esta mal.-
-¡Lo sé! Pero... Yo... No tengo nada... ¡Gente como tu lo tiene todo!- dijo con los ojos llorosos.
Lotus sonrió.
-Hey, Tranquilo...¿Sabes qué? Haré que en un futuro lo tengas todo, Así como... yo, ¿Qué te parece?-
-¿Como?-
-Trabaja para mi, no es dificil, y en un futuro estoy seguro de que serás exitoso.-
-Pero...-
-¿No quieres escapar de esa vida? Te maltratan, y eso esta mal.-
-...-
-¿Cual es tu nombre?-
-...Mafia.-
-Bueno, yo soy Lotus, el que ayudará a todos, Incluyendote a tí. ¿Me crees?-
Dijo extendiendole la mano.
-Sí.-dijo para estrechar su mano.
-Por aquí, Joven Comyet.- dijo un guardia guiandolo.
-Bien...-
-Este es.- dijo el guardia.
Estaban en una pequeña prisión de un departamento de policia.
-¿Es eĺ?-pregunto Lotus.
-Lo es, le sugiero no se acerque mucho, recuerde que es algo... agresivo.-dijo para luego retirarse.
Lotus miraba al chico tras las rejas.