Era la última noche abordo del crucero y para casi todos de alguna manera habían sido unas vacaciones inolvidables. Después de que Abraham Van Helsing hubiera dado un reembolso total, el aire en el crucero se había restablecido y reinaba un ambiente de celebración.
-Erika ¿Estás segura de dar ese gran paso? – Preguntaba el muy envejecido Van Helsing con ojos de borrego al ver que su bisnieta/ hija partía a Transylvania para convertirse en una Drácula.
-Flashback-
Después de que el Kraken los había despedido y seguían su retorno al triángulo de las Bermudas donde tomarían su vuelo de regreso. El romance de Drac y Erika iba en viento en popa.
En uno de los restaurantes del crucero Erika y Van Helsing junto con la familia de Drácula: Vlad, Mavis, Johnny y Dennis y sospechosamente en una mesa cercana estaban Frank, Eunice, Griffin, Murray, Wanda y Wayne y sus cachorros escuchando atentamente.
-Bueno como sabrran Errika y yo estamos saliendo y querrímos formalizarlo con las personas que más querremos.
Erika y Drac se tomaban de las manos mientras no dejaban de verse, mientras a Johnny se le escapaba una lagrimita al ver que su papá postizo había tomado un gran paso después de más de 100 años de no salir con alguien. Dennis se quedaba en silencio con un Vlad que miraba con curiosidad a Van Helsing.
-Mavis, quiero saber que opinas, yo se que no iniciamos con el pie derecho pero de verdad yo quiero a tu papá.
-Si tarántulita hermosa, querremos oirrte has estado muy serria, tanto que casi no has comido tú pastel de rana glaseada.
-Lo que yo opino es que sus antepasados deben estar retorciéndose en sus tumbas, ahora que después de siglos una de los suyos terminó saliendo con un Drácula. ¿Verdad? Mi buen Van Helsing – decía Vlad mientras todos quedaban atónitos con el comentario del viejo patriarca.
-¡Abuelo! Decía Mavis mientras se atragantaba con su saliva
-Huy esto está que arde- decía Jonathan mientras le daba golpecitos a la espalda de Mavis.
-¡Papáaa! ¡Como se te ocurre decir eso! ¡Eso ya quedo en el pasado! No me hagas quedar mal con mi casi abuelito -volteando a ver con nerviosismo tanto a Van Helsing como a Erika
Erika veía la situación medio apenada mientras tomaba la mano de Drac con nerviosismo y sonreía a una Mavis incómoda .
-No hay problema – decía Van Helsing retomando la postura mientras tomaba con una de sus débil manos una copa de vino – solo espero que sean muy felices y espero que la distancia no sea un problema y la relación vaya bien. Lo bueno es que ahora se pueden cartear y la correspondencia no tarda meses en llegar como antes.
-¿Cómo? es que acaso no se lo dijiste, ¿papá?. -Decía Mavis mientras Jonathan todavía estaba impactado por la falta de conocimiento (por siglos) de las nuevas tecnología por parte de Van Helsing.
-Don Van ¿si le puedo decir así verdad? – decía Johnny mientras le daban un abrazo amistoso a Van Helsing. - Ahora ya uno puede textear mire así- mientras sacaba su teléfono y le enseñaba cómo usar WhatsApp- Eso de escribir cartas es de rucaidos, mire hasta Drac ya le maneja el gggrsapp. El instamonster y zinger – mientras miraba a un Drac muy acalorado.
