Capitulo 6

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Ambos estaban agitados y frustrados mirando el celular. Drac se había quedado frío, habían roto por segunda vez aquel momento tan intimo. Bajándola de nuevo al suelo, Erika dejó su celular en uno de los burós de la cama.

-No voy a contestarle, al fin se va cansar de llamar -mientras Drac se sentaba en la cama y sintiéndose como un adolescente a punto de ser descubierto.

El teléfono seguía vibrando y vibrando, de pronto cesó y cuando de pronto notaron que ahora intentaba marcarle por videollamada.

-Qué no sabe que es lo mismo que no te quieran contestar por llamada normal a por videollamada. No cambia el hecho -decía Erika un poco exasperada volteando sus ojos mientras apagaba su celular.

-Yo no lo sabía, que bueno que me dices -decía Drac francamente sorprendido.

-¿En que nos quedamos? -Decía Erika aproximándose felinamente hacia él. Mientras trataba de recuperar el ambiente entre ellos dos -Oh si, el conde Drácula me iba a poseer -mirándolo seductoramente mientras se quitaba su blusa dejando a un Drac todo impactado. -Acaso no estaba sintiendo tu amor.

Drac se quedó perplejo al mirar la impoluta piel de su amada, si bien era cierto que todavía estaba nervioso y hubiera preferido que contestara el teléfono. Aquellos senos que resaltaban con su pequeñísima cintura y abdomen plano lo estaban distrayendo de sus pensamientos. Aquel cuerpo trabajado por años, era como una pieza de mármol finísimamente trabajada.

Erika se estaba desvistiendo de la parte inferior, apenas quedaba un calzón con transparencias y encaje blanco. Él se estaba volviendo loco al ver todo eso. Ella sin duda jugaba a seducirlo y a provocarlo, cuando de pronto vio que la cara de lujuria de Drac cambiaba a una de pena mientras sacaba de su bolsillo su celular.

-Carriño, esteee si, ahorra es el mío, se me olvidó apagarlo. Que insistente… es tu bisabuelo… en videollamada -enseñándole el celular donde aparecía una foto de él.

-¡No es posible! Erika toda irritada caminando hacia un lado a otro diciendo improperios en voz casi inaudible -¿Y si no contestamos?

-Creo mi amor, que tendremos que esperrar - agachándose para tomar la blusa de Erika y pasársela -Que tal si es algo imporrtante -tomándola de los hombros y dándole un beso en la mejilla -Esto es algo que ambos lo deseamos y debemos hacerlo con calma. Tenemos muchas oporrtunidades amor- mientras Erika ponía una cara resignada y rápidamente se ponía la demás ropa.

Drac se dispuso a contestarle.

-Ah, mi buen Van Helsing como se encuentrra -decía Drac poniendo su mejor sonrisa, acomodándose rápidamente la capa y la camisa.

-Hasta que al fin alguien contesta, ¿Sabes por qué no me puedo comunicar con Erika?- decía irritado.

-Hola, buenas noches, cómo estás. Se te olvidan esas palabras de cortesía bisabuelo -decía Erika al lado de Drac.

-¡Jovencita! ¡Tú no me…!¿Dónde te has metido?He tratado de comunicarme contigo por todos los medios y no respondes.

Erika ponía su mejor cara de tolerancia mientras su novio le daba palmadas en espalda como sinónimo de apoyo moral.

-Olvide el celular en el cuarto mientras estaba en otro lado revisando los documentos que me enviaste. Solo necesito imprimirlos y firmarlos para volvértelos a mandar.

LA CONDESA DRACULADonde viven las historias. Descúbrelo ahora