Peligro MC (Libro 1)

Capitulo dos

Tomando una bocanada de aire Vanessa tomo un trago de vodka mientras seguía observando a Grace bailar, la pequeña chica se sentía culpable por todo lo que su amiga tenía que enfrentar, habían tenido una discusión acerca de la llamada telefónica que Grace había recibido y que no se había dignado a contestar, no había intentado presionarla con preguntas personales
y mucho menos exigirle explicaciones, pero le dolía de una forma tan grande que Grace no confiara en ella, eran amigas , más que eso, la sentía como una hermana.
Su indiferencia la mataba, vane no pedía mucho únicamente que le contara algo de su familia, tal vez para ella era mucho pedir, de ahora en adelante ntentaría no entrometerse tanto en la vida de Grace.
Devuelve la vista a la pista de baile, su amiga
regresa a ella después de terminar la canción

Era momento de regresar , mañana tenía que madrugar.
-¿estas listas para irnos?-pregunta mientras se pone de pie en la barra.

-¿sigues enojada por lo de hace un rato?-intenta sonar
calmada, pero la verdad odiaba cuando Vanessa se ponía en un modo molesto.
-No al contrario, entiendo que no quieras contarme sobre tu familia, yo también me pondría a la defensiva,
si, insistieran tanto.-le dice
Salen del local y comienzan a caminar a casa, el puerto de Veracruz se encuentra solitario las doce de la noche
para ser exacto, ¿pero quién en su sano juicio saldría a esas horas? Solo a ellas se les podría haber ocurrido,
estaba agotada, frustrada y dolida

Todo al mismo tiempo. Caminaron en silencio por un rato ninguna de las dos decía palabra, Vanessa comenzó a sentir que las observaban desdé la distancia.

-camina más rápido Grace-le susurro

-Estoy caminando lo más rápido que puedo-Respondió
esta, mientras apresuraba el paso.- ¿Por qué tanta prisa?

-porque estoy agotada ¡muévete!-grito enfurecida, había perdido la paciencia por completo, tomo su mano
mientras Grace protestaba, ambas no eran conscientes del peligro que corrían en medio de la noche y en la oscuridad.

Del otro lado de la calle un todo terreno las observaba mientras hacían su rabieta, aquellas personas
esperaban el momento idóneo para poder atacarlas, su objetivo, la rubia gritona, esa que les daría el pase perfecto para quitarle la cabeza a Alexander
Los hombres dentro de vehículo observaron como la morena bajita caminaba apresuradamente dejando a la otra chica por detrás, momento perfecto para
abordarlas por el otro lado de la acera, bajaron de la camioneta y las siguieron en silencio. Tito uno de los
hombres que las seguían atrapo a Grace por la espalda y le cerro la boca, la pobre chica no podía moverse en
lo absoluto, con todas sus fuerzas intentaba quitarse al tipo de encima pero le era totalmente inútil, Vanessa
ignorante de todo caminaba aun furiosa, el otro tipo que la seguía de cerca la tomo por el hombro le dio vuelta de un giro, inesperadamente la golpeo en la cara
dejándola inconsciente.

Grace pego un grito de terror el cual fue amortiguado por la mano en su boca, ver caer a vane al suelo de un
golpe seco. El terror se había apoderado de ella.
-larguémonos de aquí, antes de que alguien nos vea llevarnos a la mona.-susurro tito.

Caminaron de
regreso a la camioneta mientras la chica forcejeaba. -suminístrale el sedante, nos evitamos de problemas – lo regaño gordo, un apodo ridículo debido a la
complexión delgada de este sujeto.
Haciendo exactamente lo que su jefe le dijo, inyecto a la chica.
Grace se quedó totalmente dormida en los brazos del sujeto. Y ambos desaparecieron.

(Un año después...)

Habían podido liberar a las chicas que se encontraban bajo el poder de tusa ,un proxeneta que prostituía a
jovencitas de entre dieciséis a veinte años ,niñas que tenían familia esperando a saber de ellas, desde un año
atrás estuvieron siguiendo los pasos de ese hombre tan vil y cruel. Pero no podían dar con él. Vanessa estaba un poco triste de seguir los pasos de esos hombres, había tenido esperanzas de encontrar a Grace por fin.
Días sin saber de ella, de pensar en lo que pudiera estar pasando o lo que le pudieran estar haciendo.

-¿Vanessa?-la triste voz de comandante Ray la llama mientras se sienta a lado de ella.-lo lamento tanto vane.se que tenías esperanzas de que ella pudiera estar ahí
—Se me está muriendo la esperanza Ray, solo ruego a Dios que ella este viva –la voz de vane comienza a quebrarse, lagrimas comienzan a salir de esos ojos cafés

-No llores, vamos a interrogar e ese hijo de puta para que nos dé más pistas de donde podemos encontrarla, pondremos todo lo que esté a nuestro alcance para dar
con ella.-el hombre le da un suave apretón antes de dejarla sola en su escritorio.

Esperaba que alguno de aquellos sujetos digieran algo relacionado con ella, tenían que encontrarla como diera lugar. Escucho los pasos de alguien acercarse, era uno
de los policías que seguían a Ray a todas partes, se detuvo frente de sí.
-el jefe quiere que estés en el interrogatorio, te espera en la sala-le afirmo mientras se alejaba Vanessa tomo aire y lo siguió en silencio.