Caminos Distintos

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Pasaron varias semanas. Para ser exacta, cinco semanas. Decidimos quedarnos más de lo planeado porque sinceramente la estábamos pasando súper. Lo que sí he de admitir es que últimamente estoy notando a Luis y a Marlene muy... cercanos. Intento no prestarle atención, elijo creer que todo es producto de mi imaginación, pero... es más fuerte que yo. Hasta en algún momento se me cruzó la idea de que Luis podía sentir cosas por Marlene, se lo pregunté, y me lo negó. Así que elijo creerle, aunque a veces dude.
Era viernes por la noche. Yo decidí ir a caminar por la playa, ver la luna, escuchar el sonido del mar, sentir el viento en mi cara... Necesitaba pensar. Reflexionar sobre todo lo que pasó este último tiempo. Estaba tranquila, sentada en una piedra, cuando siento que me tocan el hombro...

Yo- -me doy vuelta-. Luis...

Luis- Qué haces?

Yo- Necesitaba pensar un poco. Estar sola. Y aproveché que te quedaste con Jas.

Luis- Si quieres me voy.

Yo- No, tranquilo. No hay problema.

Hubo un largo silencio de varios segundos.

Luis- Y... en qué piensas?

Yo- En todo lo que pasó este último tiempo. O, mejor dicho, éstos últimos años.

Luis- Sí, no? Ha pasado de todo.

Yo- A vos te pasa algo, te conozco. Hace días que estás como... raro.

Luis- -suspira-. Ya no te lo puedo ocultarlo más.

Yo- Ocultar... qué?

Luis- Es que, luego de que te diga esto, no sé si seguirás conmigo.

Yo- No creo que sea tan grave.

Luis- No lo sé.

Yo- -lo tomo de las manos-. Tranquilo.

Luis- -suspira-. Bueno. Te acuerdas que tú me preguntaste si sentía algo por Marlene?

Yo- Sí.

Luis- Y yo te dije que no.

Yo- -asentí con la cabeza-.

Luis- Pues... te mentí. - se tapa la cara con las manos-. Siento cosas por Marlene! Cosas... muy fuertes. Y, el otro día, nos... besamos.

Yo- -sólo lo miraba asombrada sin emitir palabra-.

Luis- Pero quiero que sepas que aunque ella me guste, sólo quiero estar contigo. Y ese beso... no significó nada. Sólo te lo cuento para que lo sepas, porque no me gusta mentirte. Pero las cosas pueden seguir igual, no?

Yo- -me levanto-. No. Luis, decime que todo esto es un chiste y que Jas es tu cómplice y está escondida por ahí.

Luis- No, es neta.

Yo- Cómo pudiste mentirme en la cara?! Me miraste a los ojos y me mentiste!

Luis- No fue para tanto...

Yo- Es un chiste? Sí es para tanto! No aprendiste nada de todo lo que pasó? Esta relación es de a dos. Yo no puedo compartirte. No puedo ni quiero.

Luis- Amor... -me toma de las manos-.

Yo- Soltame! Yo confié en vos, me enamoré de vos, creí ciegamente en vos. Siempre, escuchame bien, siempre te fui sincera. Yo te puedo perdonar lo que sea... pero esto no. -se me cae una lágrima, pero procedo a borrarla con mi mano-.

Luis- Gal, no tienes que llorar.

Yo- Sabes qué es lo que me da más lástima de todo? Jas. Meterla en el medio de todo. Cómo vas a poder mirar a tu hermanita a los ojos y decirle la mierda de persona que sos?! No me gustaría estar en su lugar... -me alejo de él-.

Luis- A dónde vas?

Yo- Lejos tuyo. -salgo corriendo hacia la cabaña, cuando me cruzo con Marlene-.

Marlene- Qué pasó? Oí los gritos.

Yo- -miro de lejos a Luis, y luego a Marlene-. Te lo regalo. Te va a servir más que a mí.

Entro a la cabaña. Me puse a armar mis maletas, ya que quería irme lo más lejos posible de ese lugar. En eso, Jas se despierta, y me ve.

Jas- A dónde vas, Gala?

Yo- ...

Jas- Dime!

Yo- -me arrodillo-. Jas, a veces creemos que todo es perfecto y nada puede salir mal, pero de la nada pasan cosas, muy malas, que no están en nuestras manos. Cosas ajenas a nosotros.

Jas- No logro entenderte.

Yo- Tu hermano, hizo algo... muy malo. Algo horrible.

Jas- Qué hizo?

Yo- No lo entenderías.

Jas- Vamos, Gala! Tengo once años. Ya no soy la niña de ocho que conociste. Es Marlene, no?

Yo- -suelto un suspiro-. Sí.

Jas- Es una estúpida.

Yo- Sí, igual eso ya no importa.

Jas- Vas a irte?

Yo- Necesito hacerlo.

Jas- Ok, pero a dónde irás?

Yo- No lo sé...

En una fracción de segundos lo decidí. Tomé un vuelo a un lugar que jamás pensé que iba a volver: Buenos Aires.
Una vez allá, tocaba volver a empezar.





Un Golpe De SuerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora