Hoy: (Anti) Tips para primeras, segundas y terceras citas

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La vaga no era descendiente del Dalai Lama, eso ya lo sabemos. Sin embargo, las insistentes preguntas de sus amigas: "cómo hiciste" refiriéndose al Igna la llevaron a redactar un instructivo, esos tips que perfectamente pueden aparecer en revistas como "Susana" o "Para ti". Ojo, el conocimiento de La vaga era empírico. Ese "quemarse con leche" más de una vez, de haber llorado dolorosamente, de haberse re-construído, la plantaban en el territorio de dignidad y seguridad que tanto le atrajo al Igna.

*En la primera cita no se habla de negocios. ¿Qué hay de interesante en decir que con esta licitación facturé millones? O que soy amigo de tal y juego al póker con Tinellovich. Seguramente hay mujeres que se sienten seducidas por esas charlas. Para La vaga, si un tipo cae en ese nicho es porque tiene un grave problema de autovaloración y eso no lo debe resolver con ella, sino con un terapeuta.

*Hay temas que no se tocan: ex, hijos, cuota alimentaria, juicio de divorcio. Tal vez después, cuando haya un poco más de confianza. A La vaga le hubiese olido a podrido si de arranque, el Igna hubiese hablado mal de la persona con la que estuvo y es madre de su hija Lola.

*El tachangou ha tenido mala prensa. La vida es un laboratorio. Y en los laboratorios se prueba. Eso pensó La vaga cuando aceptó la invitación del Igna.

*Poner el acento en lo que el otro me dará y no en lo que uno le puedo aportar, ha sido el paradigma que le habían inculcado a La vaga. Y como buena geminiana, lo cambió.

*La vaga veía que sus amigas creaban sus propias trampas. Por ejemplo: se hacían las buenas cocineras para encajar en un modelo y ser socialmente aceptadas. En vez de fluir y se consecuente con sus propias creatividades.

*La frase: "Hay que desborgeizar a Chesterton" por más que resulte intelectualmente exótica no es para una cita amorosa. La ostentación de lecturas también me resulta como una torta con mucho merengue.

*Si en la primera cita hubo química, sexo y fuego, en la segunda sus amigas querían presentárselos a sus padres, aunque tengan 40, 50 años (Ellas, no los padres) o los invitan al bautismo del sobrino nieto porque vino de Pehuajó la tía Adelaida que tiene las medias cáidas. No da. ¿Quién dijo que las relaciones amorosas deben estar contaminadas con el entorno familiar? ¿Por qué les costaba tanto ser sólo mujeres? ¿Por qué le sumaban a esa esencia maravillosa otros roles: madres, hijas, amigas, cuñadas, hermanas? ¿Por qué?

La vagaWhere stories live. Discover now