Capítulo 9

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Sorrento fue llevado a prisión por violencia e intento de abuso sexual, todos los medios no tardaron en llegar al lugar y a cuestionar al padre de Shun e Ikki el cual no quiso dar muchas declaraciones, sin embargo, agradeció a al joven ojiazul por el acto heróico que hizo por su hija quien lo miraba con una sonrisa.

—Me alegro que todo haya terminado— Dita se acercó a donde los demás se encontraban.

—Así es... ese desgraciado permanecerá un buen tiempo en prisión— replicó Ikki. —Por cierto, muchas gracias por cuidar de mi hermanita Hyoga, no sabes cuan agradecido estoy contigo muchacho... ¡eres un chico genial!

—¡Qué va! solo evite que no le lastimara más — respondió Hyoga con su típica sonrisa y rascándose la cabeza.

—¿Hyoga?— Shunny habló con el rubio.

—Shun, ¿Estas bien?— no hubo respuesta por parte de ella, sino que lo abrazó con tanta fuerza a lo que él correspondió acariciando sus rizos cabellos. Ikki junto a Dita sonrieron y se marcharon del lugar dejándolos solos.

—¡Eso fue increíble! no sabes lo mucho que te agradezco por haber salvado mi vida, jamás alguien había hecho algo tan hermoso por mí — levanto la vista hacia Hyoga con sus mejillas sonrojadas y una tierna sonrisa.

—Sabes que yo siempre te voy a proteger y sabes porque... Porque yo... Yo te quiero con todo mi corazón — finalmente había declarado sus sentimientos a la fémina, ella estaba tan feliz de escucharlo.

—Hyoga... yo también te quiero, desde que te conocí, de todos los chicos que he conocido tú sobresales más que ellos, pues jamás había conocido a chico tan tierno, dulce, amable, caballeroso y sobre todo... El chico que siempre quise, y espero poderlo tener.

—Y aquí lo tienes Shunny, se que no puedo ofrecerte lo que tú quieras, ni mucho menos la luna ni las estrellas pero... para mi lo que más vale en esta vida es todo mi amor y cariño qué he tenido por ti desde que nos conocimos.

—Hyoga... a mi no importa si no tienes nada que darme... yo lo único que quiero... es que estes junto a mi, no me interesa lo material. Lo único que me importa, eres tú— termino por responder la peliverde la cual acariciaba las mejillas del rubio con sus manos suaves.

—Shun... me harías el honor de... ser tu novio— las mejillas del rubio estaban muy coloradas haciendo qué Shunny riera dulcemente y luego le respondiera.

—Claro que si Hyoga, ¡acepto ser tu novia!

—¡¡En serio!!— los ojos de Hyoga brillaron aun más, estaba muy alegre, su corazón latía más de lo normal ante la respuesta de Shunny quien lo tomó sus manos y le dio un pequeño beso en su boca.

—Claro que si Hyoga, o quise decir... Mi querido novio

—S...Shun, te quiero mucho

—¡Yo también!

Nuevamente la peliverde lo tomo de las mejillas, haciendo qué ambos se miraran a los ojos y terminaran dándose un tierno y cálido beso mostrando el amor que sentían el uno por el otro, las manos de la peliverde abrazaban su cuello mientras que el rubio abrazaba su esbelta y pequeña cadera. Pasaron un buen tiempo besándose hasta que el padre de la peliverde entro al lugar.

—Se ven tan lindos juntos

—¡Papá!... yo... yo...

—Tranquila princesa, veo que ya tienes alguien a quien tú mereces

—¡Asi es papá! — respondió su hija con mucha felicidad, el mayor se acerca a Hyoga.

—Muchacho.

—¿Si señor?

—Espero y cuides muy bien de mi niña, ella te eligió a ti porque sabe que tú la has querido mucho más que a otra persona. ¿Entendido?

—¡Así será señor!

—Y deja de decirme Señor... para ti soy Shaka

—Esta bien... señor Shaka— el joven respondió.

—Y tú suegro también— Shunny respondió en forma de burla haciendo al rubio sonrojarse mucho más de lo que estaba.

—Eso lo dirá el tiempo muchachita, soy tan joven para que ese tipo de cosas

—Jejeje, lo se papá...nos vamos mi hermoso niño— dirigió la palabra a su chico rubio y extendió su mano hacia él.

—Claro que si, mi princesa

Tomados de la mano, ambos junto al padre de la chica se marcharon del lugar.

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Unos días después

—¡Lo lograste amigo! estoy muy orgulloso de ti— Seiya lo felicitó con un fuerte abrazo.

—Crecen tan rápido— Shiryu se acercó al rubio y le da una palmada en su espalda.

—Gracias chicos, estoy muy feliz. ¡Ella me aceptó! ¡ella me quiere!

—Bien hecho hermanito, yo sabía que ella y tú iban a terminar juntos

—Gracias pequeño...gracias a ustedes por animarme y apoyarme en todo, me siento muy feliz por haberlos conocido

—Y sabes que siempre vas a contar con nosotros, porque somos una familia y siempre nos vamos a ayudar y apoyar unos a otros— Seiya respondió.

—Siempre.

—Siempre hermanito— Jacob abrazo a hermano mayor.

—Gracias chicos... son los mejores.

Los chicos se abrazaron entre ellos mientras celebraban al rubio quien logro conquistar el corazón de la chica. Hasta que un hombre de pelo turquesa, vestido con ropa elegante entró al lugar.

—¿Hyoga?

—¡Ehhh! ¿quién es usted?

¡Bailemos! (Resubido)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora