© DEMONS [#1 de la serie Spideychelle]

005 | DEMONS

— Maldito autobús — maldijo Peter en voz baja, resulta que el medio de transporte había pasado por un pequeño charco de agua muy rápido haciendo que Peter se mojará, sus zapatos estaban empapados — ugh.

Siguió caminando hasta que se detuvo en un food truck de salchichas, no había comido en horas y no quería molestar a May con eso, sacó cinco dólares y se los entregó a el señor, el señor los tomo con flojera y prosiguió a prepararle una salchicha, Peter la miraba con deseo, lo único que haría que ese día de mierda se convirtiera en algo bueno era la comida, el señor le entrega la salchicha.

— Disfrútala — dice con molestia.

Peter la muerde y al instante la escupe.

— Perdón ¿que tiene? — pregunta mientras se quita la mostaza que quedó alrededor de su boca.

— No preguntes niño, si no te gusta ve a ese restaurante — Peter voltea a ver a el lugar al que señaló, y nota que es una cafetería.

— Gracias — dice mientras se aleja, Peter creía que lo que necesitaba era un tiempo a solas de las raras calles de Queens, por lo que se acerca a la cafetería y se empieza a dar cuenta de que no había muchas personas, la mayoría nada más estaba tomando un café y charlando, abrió la puerta de esta y prosiguió a dirigirse a una mesa, a pesar de no tener a muchos clientes el lugar era muy grande.

Toma una mesa y distingue a una mesera a unos metros de él, antes de llamarle ella se hace a un lado, dejando ver a la persona a la cual le está tomando la orden, Michelle Jones, rápidamente se esconde en su asiento y visualiza los movimientos de la chica, parece estar esperando a alguien, Peter quería tener mucho cuidado con ella, con cada paso que tomaba se sentía vigilado por la morena, cuando su mirada se dirige a un pasillo y esta se torna vulnerable, Peter pone suma atención a la persona que sale de el pasillo, el cual resulta ser un chico, tiene cabello rubio y ojos claros.

Peter evade a las meseras, dándoles señales con la mano e intenta observar las expresiones de Michelle y el chico, ella no se veía feliz, aunque, bueno, nunca se veía feliz, en cambio el rubio se veía divertido, después de unos minutos el chico toma su mochila y sale.

Había algo en ese chico, Peter lo conocía de algún lado, no estaba seguro de donde, pero estaba seguro de que no era alguien amigable con quien tomar un café, lo cual deja a pregunta ¿por qué Michelle estaba con él?

La curiosidad lo inunda, por lo que sale cautelosamente de la cafetería y lo sigue, las banquetas de Queens iban llenas de turistas y ciudadanos curiosos, por lo que intentar seguirle el paso a el rubio era un poco difícil, el chico entra a un callejón, a pesar de parecer intimidante Peter se convence internamente de que él podría derribarlo aún con los ojos cerrados, el chico para, se recarga en una pared y toma su celular, Peter se esconde e intenta escuchar atentamente la conversación de el rubio mientras se pone su traje