Un Sacrificio de Amor(Ichihime)

Capitulo 8. Amigos o Enemigos?

   La ojigris lucía sin temor alguno ante aquel hombre. Sin embargo, su cuerpo empezaba a recibir descargas ligeras que indicaban que trataba con todas sus fuerzas no temer.
   -¡Vaya! Tiene agallas la princesa-comentó el ojiverde-. No te preocupes princesa, no te haré nada-aseguró dirigiendo sus pasos hacia la joven.
    Mientras más se acercaba más evidente se hacía el nerviosismo de la chica.
    -¿Que es lo que quieres entonces?-alcanzó a pronunciar Orihime.
     -Información-comentó el joven moreno poniéndose al frente de la chica.
    -¿Información?-repitió Orihime.
    -Como acabas de escuchar .
    La pelinaranja lucia confundida.
    -Primero que nada... ¿Tu quién eres? ¿Que eres? ¿Por qué no tienes energía espiritual? ¿Y qué clase de información necesitas? ¿Sobre quién? ¿Y por qué yo?-esto último lo dijo sin temor y con mucha seguridad.
    El ojiverde le tomó ligeramente el mentón.
    La chica se apartó.
    -Vaya. Qué agresiva. Deberías darte cuenta que aquí yo soy tu amigo.
     -¡Claro! Un amigo que es secuestrador. Claro que sí. ¿Qué información necesitas? Yo no sé nada que te sea útil a ti .
    El joven dio la vuelta.
    -Aquí la información la tengo yo. Vine a hacerte un favor, pequeña. Hay alguien que espera tu regreso con ansias desde hace tiempo. Tal vez nos volvamos a encontrar, pero esta vez solo es para advertirte. Tus amigos te ocultan algo por lo cual te están cuidando de más. ¿O no? Cuídate de ellos.
    La ojigris estaba desconcertada,
    -¿Como dices? ¿A qué te refieres?
    Se giró hacia su acompañante.
     ¿Por qué no le preguntas a tus amigos cuál es el verdadero origen de tus poderes?
    La miro directamente a los ojos con toda la seriedad que no había tenido durante toda la charla.
     -Escuchaste bien, princesa. ¿No te has preguntado por qué tus supuestos amigos te cuidan en exceso? ¿Por qué un capitán de la elite vino exclusivamente a cuidarte?
    Entre más hablaba la pelinaranja más desconcertada lucía.
    -La sociedad de almas y todos saben un secreto que aún no han querido revelarte. Sin embargo, hubo alguien que te dio un adelanto. ¿No es así?
    No podía alejar su vista del mismo punto. Sintió un ligero golpe y mientras iba cayendo escuchó.
    -Debes cuidarte de tus verdaderos enemigos. Nos veremos después. Te lo prometo.
    La chica poco a poco perdió el sentido hasta caer en unos brazos desconocidos.
    -Que dramático eres, Fukai-decía un peliplata sosteniendo a la ojigris en brazos.
    -Yo sólo entre en personaje. Y deja de disfrutar tenerla en brazos. Estás empezando a verte pervertido, Koichi.
    Caminaba el joven hacia la puerta con la chica en brazos.
    -Que imbécil eres. Sabes bien que esta niña es muy importante para nuestro amo.
    Salió del lugar con la ojigris en brazos y su compañero tras de él.
     Mientras tanto, en una cama algo femenina se encontraba el pelinaranja despertando de su no amable sueño.
    -Maldita sea. Como duele.
    Se sobaba la cabeza mientras era observado por sus amigos.
    -Todo fue culpa tuya, Ichigo. Estabas fuera de sí-decía el ojiazul acomodando sus gafas. 
    -Maldición. ¿Dónde estoy? ¿Qué pasó con Inoue?
    La pequeña shinigami lo obligaba acostarse muy angustiada.
    -Ichigo, por favor no te pongas así nuevamente. Nosotros estamos esperando que reacciones para ir todos a buscar a Inoue.
    Se escucha la puerta del departamento y entra el capitán aún exaltado.
    -Han sabido algo de...


    En otro lugar está un peliplata poniendo a una aún inconsciente Orihime.
    -¿Que paso? ¿La dejaremos aquí sin supervisión, Koichi?-le preguntaba el ojiverde.
    -¡Qué fastidio! Todo debo explicarte. En cuanto la dejemos aquí y nos vayamos su reiatsu será visible para todos.
    -Ah, ya entiendo. Al decir "a todos" te refieres al capitán ese, ¿no?
    -Exactamente. Vamos ya-decía esto y se iba con rapidez.

    -Han sabido algo de...
    No terminó la frase cuando se fue usando shumpo.
    -Byakuya, ¿qué pasa?-decía Ichigo al ver al capitán irse.
    -Ichigo, cálmate. Jamás alcanzaremos al capitán. Es de los más rápidos usando shumpo en todo el seireitei-comentó el pelirrojo analizando la situación en su cabeza.
    El pelinaranja se tocaba la cabeza.
    -¿Quién carajos me pegó? Me duele la cabeza.
    La pequeña shinigami se acercó al chico en la cama y con el puño cerrado muy cerca de su cara le dijo.
   -Mira Ichigo, más te vale que te calmes. Conozco a nii-Sama. Él vendrá más pronto de lo que imaginas. En cuanto sepamos que descubrió, iremos por Inoue a donde sea. No podemos buscarla a ciegas, estúpido. ¿Entendido?
    Todos la miraban con una gotita en su cien entre miedo y asombro. Rukia era temible cuando se irritaba.

    Se miraba al capitán con su cara seria estoica, pero una mirada descontrolada usando el shumpo como jamás antes lo había hecho. Llegó a un parque acuático ya cerrado y al lugar donde el sentía el reiatsu de esa persona que debía proteger.
    -Orihime.
    La ojigris empieza a despertar poco a poco.
    -Vaya. El día de hoy se han ensañado con los golpes para dejarme inconsciente-decía algo adolorida y sobando la parte afectada.
    -¿Te encuentras bien, Orihime?
    La chica sonrió para dejar de preocupar al capitán.
    -Si, estoy bien. No te preocupes.
    Se ponía de pie lentamente siendo ayudada por el guapo capitán.
    -¿Que te hicieron? ¿Por qué te secuestraron? ¿Quiénes son? ¿Los puedes identificar?
    -Calma, Byakuya. Son muchas preguntas. Aún me duele la cabeza.
    -Lo siento. Debemos irnos.
    El capitán sin pensarlo tomó de la mano a la ojigris y de una sola la subió a su espalda.
    -Eto' Byakuya.
    -No digas nada. Debemos llegar antes que enloquezca ese niño.
    -¿Eh? ¿De qué hablas?
    -Nada. Apresurémonos.
    Llegaron a la puerta del apartamento. La chica baja de la espalda bien formada del capitán.
    -Gracias Byakuya. Por haber ido por mí.
    -¿Me dirás lo que te pasó?-le preguntó el pelinegro.
    -Estoy bien. Ahora no quiero hablar.
    Sube la escalera y abre la puerta de su apartamento.
    Al entrar escucha a todos llamarla muy asustados y algunos preocupados.
    -Cálmense. Estoy bien. No me pasó nada-decía la pelinaranja con las manos en señal de que le bajarán a la preocupación.
    -Orihime, ¿qué te paso? ¿Cómo te encuentras? ¿No te lastimaron? ¿Qué te hicieron?-preguntaba sin cesar un preocupado pelinaranja.
    -Otro con mil preguntas-comentaba la joven con una cara de fastidio casi nunca usada en ella.
    -¿Inoue?-alcanzó a pronunciar la pequeña shinigami muy preocupada.
    -Contestare solo una para todos. "Estoy bien", no se preocupen más por mí. Lamento si están angustiados. Mañana les contaré todo. Solo por esta noche tan larga déjenme descansar .
    Se dirigió a su baño a ducharse y todos quedaron sin habla.
    La pelinegra tomó del brazo a Ichigo y dijo.
    -Vámonos ya, Ichigo. No quiero llevarte como siempre por la fuerza. Ya escuchaste. Démosle espacio. Ya la viste. Está bien. Así que todos debemos esperar hasta mañana.
    Nadie hablaba. Ni siquiera el pelinaranja. Todos empezaron a tomar sus caminos a casa. El pelinaranja salió sin hacer un solo sonido y con mil preguntas en su cabeza y un ardor en su corazón.
    Por su parte, el Capitan no dejaba de observar la puerta que daba con el baño como si tuviera vista de rayos x. Intentando entender o por lo menos imaginar que estaba pasando por la cabeza de esa ojigris.
    -¡Ash! Qué fastidio. Estoy tan confundida-estaba la pelinaranja diciendo para ella misma mientras jugaba con el agua que caía en su cuerpo.
    En su mente pasaba cada palabra que le había dicho como un eterno flashback.
    -¿Me están ocultando algo? ¿Es porque soy débil o porque no confían en mí?.
    Un gran suspiro salió de su boca.
    -Definitivamente tengo que enfrentar todas estas preguntas.
    Se terminó de bañar se vistió. Aún con su cabello húmedo salió del baño. Realmente lucia adorable con su cabello cayendo por sus hombros y espalda, sus labios mojados por el agua, y su pijama algo ajustada.
    El capitán se sorprendió al escuchar por fin la puerta abrirse.
    Lo que vio lo sorprendió más.
    -Necesitamos hablar-alcanzó a pronunciar volteando ligeramente su mirada.
    La ojigris lo miro a los ojos .
    -Byakuya, ¿por qué es que estás cuidándome? ¿De qué y por qué?
    -Orihime, ya te dije es por el hecho que tú puedes sentir su reiatsu. Solo eso-dijo eso último desviando la mirada de esos ojos grises.
    -Me iré a dormir, buenas noches.
    Se dirigió al pasillo que conducía a su habitación, se recostó en su cama deshecha y se cobijó hasta arriba de su nariz.
    -Huele a él. Kurosaki-kun, lamentó todo esto. Realmente me hiciste pasar un gran momento, uno de ensueños.
    Suspiró y se abrazó a sus cobijas.
    -¿Habrá sido todo un sueño?
    Cerró los ojos y en su subconsciente se escuchó:
    -¿Tus amigos te ocultan algo por lo cual te están cuidando de más o no? Debes cuidarte de tus verdaderos enemigos.
    Abrió los ojos de inmediato asustada por reconocer esa voz.
    -No puedo creer en sus palabras, no debo preocuparme. Ellos son mis amigos y siempre me han ayudado.
    Terminado su monólogo interno y después de mucho pensar, se quedó dormida. Aún en su mente estaba esa pregunta. ¿Amigos o enemigos?

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Hola disculpen por ser una aficionada inresponsable, se que es una locura que lo abandone así de tanto tiempo, pero este año mi propósito es terminarlo, disculpen por la espera quien aun lo espere y gracias por leerlo por dejarme sus comentarios gracias.
La parte nueve ya está en redacción.