- ¡Está es la segunda vez que pierdes esa nota, Wendy! -exclamo la editora en jefe.
La chica pelinegra aún pedía miles de disculpas, era cierto que se le había escapado de nueva cuenta la noticia, y eso no podía pasar cuando se trataba de una revista como lo era Written INK. No señor, aquí las cosas tenían que hacerse a la perfección, sin error alguno aunque fuera mínimo.
La perfección era la clave del éxito, o eso es lo que siempre decía la editora.
- ¡Lo siento señorita! -de nuevo otra disculpa-. Pero creo que es algo complicado tratar de inventar algún chisme que sea sobre ellos.
- No es difícil, tú eres la que lo ve difícil -dio un suspiro-, sí esté trabajo tan sencillo se te está complicando, creo que llego la hora de pedirle a alguien más que me ayude a realizarlo, enviaré a mí mejor periodista.
- Pero..
- Sin peros Wendy -está vez la seriedad en su tono de voz fue muy sincera-. Necesito esa nota urgentemente, el próximo número está a punto de salir, y necesito el escándalo del siglo en estos momentos, y tú no te estás poniendo al tiro. Sal de mi oficina, y dile a Song Mingi que venga.
Sin reclamar nada más, Wendy salio de la oficina de la editora en jefe, Wendy sabía que ella era tan exigente como su hermana, pero no se esperaba que fuera tanto, había escuchado rumores sobre que la editora en jefe de Written INK, era de las más apreciadas debido al orden que llevaba las cosas en las oficinas de la revista.
Pero nunca se había esperado que esa mujer fuera tan exigente, a tal punto de casi despedirla por no tomar a la perfección una orden de café.
Wendy se dirigió a dónde se encontraba Song Mingi.
Mingi no era nuevo en aquel lugar, había estado allí por cuatro años, o eso es lo que le habían comentado a Wendy, Mingi era un loco por su trabajo, hacía las mejores notas, los mejores chismes frescos de la historia, había comentado la editora en jefe, ese chico era muy bueno en todo, inclusive en falsificar fotografías, podía modificarlas. Era excelente, el periodista estrella de Written INK.
- Song, la editora en jefe te espera en su oficina.
- ¿Acaso hiciste de nuevo mal tú trabajo Wen? -ella odiaba que la llamasen de esa manera, y más sobre todo por el tono que utilizaba aquel chico.
- ¡No es eso! Solo...
- Cada que ella me envía a llamar, es que quiere decir que alguno de ustedes hizo mal su trabajo, y esté es un gran ejemplo en estos momentos, tú -señalo a la chica-, acabas de hacer mal tú trabajo, y como el periodista que mejor trabaja en este lugar, debo remendar tus errores.
- ¡No tienes porque creerte tanto!
- ¡Claro que debo! -se levanto de su lugar y se coloco sus gafas-. Verás Wen, aquí el trabajo debe ser perfecto, y sí alguien como tú no puede hacer que sea perfecto, será mejor que abandones esté puesto y dejes espacio para las personas eficientes.
La chica iba a responder, pero Song Mingi se fue de inmediato, escuchando los gritos de frustración y las quejas de aquella chica de nombre Wendy.
A veces Song Mingi era un idiota, de eso estaba muy segura Wendy.
Mingi se quito las gafas y se despeino un poco los cabellos castaños oscuros, necesitaba muchas vacaciones de eso estaba seguro, pero la verdad era que para él sería muy aburrido pasar dos semanas enteras sin poder escribir algo atractivo para la revista.
Entro a la oficina de la editora en jefe, se encontraba detrás de su escritorio, estaba parada observando por los grandes ventanales que eran las paredes de aquel lugar que era su oficina.
- ¿Me hablabas Han Minsoo?
- Por supuesto que lo hice -la editora en jefe le sonrió-, tengo un nuevo trabajo para ti.
- Más bien querrás decir, que debo enmendar los errores de Wen, ¿no?
- Efectivamente -Minsoo camino directo hacía Song y le entrego una carpeta-, aquí se encuentra todo lo que necesitas. Asegúrate de tener el articulo a más tardar el viernes por la tarde.
- Entendido, lo tendrás inclusive antes, no debes preocuparte.
- Me preocupa porque esos dos casi quieren ser invisibles para la sociedad.
- Pues no lo son, aún se les ha visto en lugares públicos.
- Me gustaría que seas capaz de seguirlos, escuche que por la tarde Jimin haría una firma de autógrafos, ¿crees poder sacarle jugo a algo como eso?
- ¡Por supuesto Han!
- Me alegra escuchar eso, te veré después Song, y no me falles.
- No lo haré, tenlo por seguro.
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- ¿A qué hora paso por ti? -pregunto Yoongi al pelirrubio que aún se arreglaba sus cabellos desordenados.
- Me gustaría que estuvieras allí en la firma, ¿por qué no quieres?
- Jiminie, no me gusta que tus fans me queden viendo como sí quisieran matarme.
- Solo se preocupan por mí -Jimin se acerco a Yoongi-, ¿cómo me veo?
- Tan lindo como siempre -contesto Yoongi mientras le daba palmaditas a Jimin en la cabeza.
El pelinegro veía su celular, le había llegado una nueva noticia, al parecer había algunos problemas con respecto a Kim Taehyung y Jeon Jungkook, pues al parecer los habían visto paseando en la noche para después que se besaran, nadie creía esto, o eso es lo que pensaba Yoongi, pero al leer los comentarios, se dio cuenta de que muchos andaban debatiéndose de que posiblemente aquella noticia no era falsa.
- ¿Otra noticia falsa? -pregunto Jimin mirando el celular del pelinegro.
- Sí, parece que Jungkook y Taehyung tienen problemas -se escucho un suspiro departe de Jimin.
- Seguramente Written INK escribió eso.
- Esa revista, en verdad no puedo creer que sean capaces de publicar todo eso.
Yoongi era consciente de quien era la responsable que lideraba en aquella revista. Quien diría que la hermana de Han Hyesoo sería capaz de tener una revista como esa, y pensar que antes trabajaban juntas en HOT World's.
- ¿Extrañas trabajar allí?
- ¿En HOT World's? -Jimin asintió-. A veces, pero me siento más feliz estando contigo.
Aunque Jimin le sonreía, a veces se arrepentía de que Yoongi ya no quisiera regresar a trabajar en aquel lugar que tanto amaba.
- Hyesoo dijo que podías regresar cuando quisieras.
- Sé lo que dijo, pero... aún así, siento que allí ya ha pasado todo lo que tenía que pasar.
- ¿Sabes? Extraño todo lo que paso anteriormente.
- Yo no -respondió Yoongi-, a veces eras un chico demasiado molesto.
- Pero aún me dices que soy molesto -respondió Jimin abultando sus mejillas.
- Sí, aún lo eres, pero la diferencia es, que ahora amo al pequeño pelirrubio que se la pasa molestándome para que le compre un helado.
- Te amo Yoonie -Jimin se acerco más al pelinegro y paso sus brazos por el cuello de Yoongi para abrazarlo.
- Y yo a ti Jiminie.
No había mejor amor que el suyo.
Nadie podía hacer que se separaran, de eso estaban muy seguros.
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Written INK ||YoonMin||
FanficWritten INK es la revista más reconocida en el mundo del 'chisme' debido a que es una de las revistas que puede llegar a inventar noticias falsas sobre los más grandes artistas. Para la mala suerte de la pareja del momento que conformada por Min Yoo...