14 (Agosto 16, 1975)

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Brian POV

Roger no regresó y tampoco el tipo que nos dejó para "ir al baño". Me puse bastante preocupado y nervioso después de un tiempo, luego decidí echar un vistazo al exterior.

Ya debía de haber terminado de fumar su cigarrillo. No parecía sentirse bien antes de irse... debería haber ido con él.

Suspiré y me apresuré a salir, dejando solo al otro chico sin ninguna explicación.

Por lo general, ese no era mi estilo, pero Roger era más importante en este momento.

Estaba muy oscuro, la única fuente de luz era una única bombilla que colgaba del techo de la parte trasera del edificio.

Miré alrededor;

No estaba Roger.

Miré las esquinas de las paredes; no estaba Roger tampoco.

Ahora estaba realmente preocupado.

"Rog?" Empecé a gritar, aunque no demasiado fuerte. Había gente alrededor, después de todo.

Por un momento me quedé mirando el bosque negro. Solo pude ver los primeros árboles, bueno, sus siluetas, y después de eso solo había un agujero negro masivo, no pude ver nada.

¿Podría ser que Roger entró en el bosque?

Le estaba rogando a Dios que no entrara allí.
Encontrarlo en un bosque negro sería imposible.

Pero no había otra opción para él que ir al bosque, así que tragué saliva, salí del bar y me adentré en la oscuridad.

Tenía que encontrar a ese chico estúpido después de todo.

Tan pronto como estuve rodeado de árboles, comencé a gritar "¿Roger? ¡Roger! ¿Dónde estás?"

Sin respuesta.

En la distancia todavía podía escuchar la música del bar, así que sabía que aún no estaba muy lejos del local.

Mi mirada vagó hacia el aparcamiento en la distancia cercana.

Había un auto rojo brillante y la puerta trasera estaba abierta.

Pude identificar a un hombre dejando a alguien dentro del auto, probablemente una mujer. O un hombre. Esto era un bar gay después de todo.

Entrecerré los ojos para ver más, pero eso no ayudó mucho.

Me golpeó como una roca cuando escuché la voz bastante aguda de Roger: "¡No...!

"¿Qué estás haciendo?"

Sonaba bastante agotado pero bastante tranquilo también.

¡Y viene del coche!

Sin siquiera pensarlo, corrí hacia el coche.

Mientras corría por el bosque, tomé una rama grande del suelo y, cuando finalmente alcancé  el auto, arrojé la rama sobre la espalda del extraño, gritando.

La rama se rompió en tres pedazos cuando golpeó al hombre y reconocí su rostro: era el tipo de antes.

Gritó ruidosamente, tropezó hacia atrás y cayó al suelo, exponiendo a Roger, que estaba acostado en el asiento trasero del auto.

Es esto la vida real? O es pura fantasía? (Traducción) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora