Capítulo 23

3.5K 161 17
                                    

Capítulo 23:
Sintió como su cuerpo se suavizaba y perdía el conocimiento. Vio todo negro nuevamente. Se sentía agotada, necesita ayuda. Ansiaba con ganas que llegara Luhan y la ayudara con esto. Sabía que no podría soportar el peso del gran edificio. ¡¿Por qué demonios las personas no se movían para otro lado?! ¡Quería tirar el edificio para que se desplomara sobre el suelo!

-¡Min! – gritó alguien. No podía reconocer la voz. Solo veía todo completamente negro. Sabía que estaba aún despierta y que aún estaba sosteniendo el edificio ya que sentía ese peso en la cabeza.

-¡Min, Min! ¡Ya suéltalo! – gritó Luhan.

Min cayó sobre el suelo con los ojos cerrados. Estaba extremadamente cansada y estar en el suelo era de gran ayuda para poder descansar.

Kai corrió hacia ella y la ayudó a ponerse de pie. La abrazó fuertemente. Estaba asustado. No sabía que era lo que le había pasado, no entendía porque ella estaba tan cansada. Ambos desaparecieron dejando a los chicos encargarse con el problema que había en el centro de la cuidad.

Kai dejó a Min tumbada en la cama. Ella respiraba entrecortadamente, estaba sudada y aún tenía los ojos negros.

-Min… - susurraba tratando que ella volviera a la normalidad.

-Me duele mucho la cabeza. – dijo ella entre dientes.

-Lo sé, traeré a Lay para que te ayude. Por favor no te muevas, cierra tus ojos y espérame.

***
Abría y cerraba los ojos constantemente intentando que estos se adaptaran a la luz de la lamparita. Pudo ver que tras la ventana todo estaba oscuro, así que supuso que era de noche. Intentó incorporarse de la cama, pero el dolor en varias partes del cuerpo; le impedía lograr lo que quería.

Estaba conciente de que se había desmayado cuando vio que Kai desaparecía en la nube negra que se formaba cada vez que se teletrasportaba. Había dormido profundamente, sin dolor, sin remordimiento, sin rencor… sin ningún sentimiento. Pero, ahora que se había despertado, pareciese que el dolor nunca la iba a dejar tranquila.

Miró atentamente la habitación en la que estaba. Pero automáticamente se dio cuenta de que no era la suya, no estaba en la habitación en la cual se había quedado dormida. Se asustó. No sabía donde estaba… que había sucedido.

Con todas sus fuerzas, nuevamente intentó ponerse de pie, cosa que logró. Sacó los pies de la cama sin dejarse de apoyar en la cama. Primero colocó el pie derecho en el suelo, pero, cuando se dio cuenta de que no había suelo; lo regresó y bajó la mirada.

Negro. No había suelo, en lugar de eso estaba todo negro con pequeñas luces centelleantes esparcidas en todo lugar. Alzó nuevamente la mirada hacia las paredes de aquel lugar. Blancas. ¿Por qué paredes blancas y no había suelo?

Empezaba a respirar entrecortadamente. Todo lo que estaba pasando, o más bien el lugar en donde estaba era una locura. ¡Completamente fuera de sí!

-Me alegra que te hayas despertado. – susurraron cerca de su oído.

Volteó hacia la dirección de donde vino la voz, pero no vio a nadie. Aunque, aún podía sentir el roce del aliento de la persona que susurró en su oído.

Intentó tranquilizarse pensando que solo era un suelo. Si, eso pudo hacer. Creerse que todo era un sueño, un sueño en el que podía despertar. Pero, ¿Por qué no despertaba? Se acomodó en la cama mirando por todos lados, buscando una ventana o una puerta por donde poder salir. Lo único que quería era salir de esa habitación tan extraña en la que estaba. Sentía que la vigilaban. Que la estaban viendo constantemente.

WHAT IS YOUR POWER? 1ra & 2da TEMPORADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora