Capítulo 16.

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Pónganse atentas que casi termina el fic, ademáaas, hay más actualizaciones. n_n

Se encontraban fuera de aquel salón que presencio el momento más dramático de la corta vida de Harry. La profesora O’Donnell les terminaba de hablar de cómo sería la estancia de Harry en el Colegio, asegurándoles que todo estaría bien y se integraría rápidamente a sus compañeros y más, si ya tiene a tres. También les menciono que no era recomendable del 100% que los alumnos más pequeños se relacionaran con los más grandes por motivos diferentes, algunos evidentes y otros no tanto. 


Bobby se encargo de poner en claro que Harry ya tenía amigos más grandes. Liam Payne de trece años y Zayn Malik de quince; la profesora había sonreído al escuchar el nombre de Liam, su nombre era más que conocido entre los profesores, el castaño era reconocido por ser el primero de su clase siempre y todos apostaban que algún día sería un hombre muy exitoso; su sonrisa se había borrado al escuchar el nombre del otro chico: Zayn Malik. El moreno también tenía una reputación y no muy buena, problemático, faltista y holgazán pero muy en el fondo todos sabían que también era listo y Harry termino de dejar en claro ese punto.

“El me ayudo mucho a estudiar. Es muy inteligente y sabe muchas cosas”



El rizado lo había defendido y todos se sintieron orgullosos, incluso la maestra que no paraba de sorprenderse por la actitud tan tímida pero fuerte que tenía Harry. 

No tuvieron que mencionar a Niall, ella se imaginaba de sobra que ambos chicos eran amigos y más cuando los padres del rubio habían dejado en claro que Harry quedaba sus cuidados y se harían responsables de todo lo que tuviera que ver con él. 

Pasando el tema de las amistades, Louis no pudo evitar querer preguntar acerca del acoso escolar, sabía que en todas las escuelas ese caso se presentaba, pero quería asegurarse que Harry no fuera presa fácil, que él no estuviera expuesto a que alguien pudiera dañarlo. Quería saber si había casos de homosexualidad en los jóvenes más grandes, pero, todo eso le daba vergüenza preguntar.

Una vez que las dudas de Maura fueron respondidas por la maestra de inglés, ella se despidió, yendo a lados totalmente opuesto. Louis no podía con esa duda, no quería quedarse con el pendiente después. Aviso a los Horan que había olvidado preguntar algo y dicho esto e ignorando la idea de Maura de acompañarlo, corrió en dirección contrario en busca de la maestra que sabía que podría responderle sus dudas. 

La encontró justo antes de que ella entrara el baño de niñas. Y a ella le sorprendió verlo de nuevo. Regalándole una sonrisa, Louis le aviso que aun tenía dudas, bueno, solo una. Ella lo invitó a sentarse en una larga y blanca banca, él asintió y tomo asiento preparándose para hablar. 

—Dime, ¿Cuáles son tus dudas? —Comenzó ella rompiendo todo silencio. Louis suspiro y se atrevió a mirarla a los ojos. 

—Supongo que será raro, pero tenía que preguntar. —La mujer sonrió y le invito a seguir hablando. — ¿Aquí hay profesores o alumnos homofóbicos? 


La pregunta no estaba tan fuera de lugar, de hecho, originalmente iba por ahí pero para no sentirse tan obvio quería hablar en general. Dándose cuenta de que no había marcha atrás, solo le quedaba esperar la respuesta que la profesora le diera. 

Ella negó sonriente y divertida. Louis enarco una ceja, sintiéndose sorprendido. 

—La homofobia es algo que tenemos prohibido. Uno de nuestros profesores de Historia es abiertamente homosexual y los alumnos le admiran y quieren. Intentamos acabar con esa forma de pensar, no podemos cambiar al mundo, pero si podemos cambiar la forma de pensar de nuestros alumnos. O intentarlo por lo menos. —La profesora se escuchaba fresca y segura de lo que estaba diciendo, Louis aun tenía sus dudas. 

—Me parece bastante… uhm… ¿Sorprendente? Nunca escuche de una escuela que no tuviera un caso de acoso escolar o algo así. A los chicos les encanta molesta niños, más a los homosexuales. 

—Me estas queriendo decir que, ¿Harry está teniendo indicios de ser homosexual? —Louis casi se ahoga después de escuchar aquello. No podía decirle que sí, no quería, porque sabía que gran parte era su culpa, por besar y cambiar la forma de pensar de un niño. Louis negó, claramente mintiendo y claramente la maestra lo supo. 

—Tenemos alumnos que se han declarado homosexuales y no han demostrado que alguien los hostigue, queremos cambiar eso. No tiene nada de malo que me digas que crees que Harry podría volverse así algún día. No tiene nada de malo. 

—Nunca dije eso, yo nunca pensaría que tiene algo de malo. Lo apoyaría siempre. Es solo que, no quiero que alguien lo moleste, solo quiero que este bien.

—Hace 18 años esta escuela era un Internado exclusivamente para chicas. Ningún chico podía pisar este Colegio, solo habían maestras, solo personal femenino. Faldas por todos lados. —Rió por su comentario y siguió. —Las niñas no tenía acceso a tener cercanía con el sexo masculino, simplemente se encerraban aquí y aquí se quedaban. Un día se comenzó a ver que el 65% de casos lésbicos entre las alumnas, algo sumamente alarmante para los padres de familia. No hubo mucho revuelo público, cosa que me sorprendió. Este Colegio siempre ha sido de los mejores. Muchos padres se asustaron y comenzaron a dar de baja a sus hijas, lo alarmante fue que comenzaron a quedar muy pocas alumnas y muchas de ellas se negaban a dejar el Instituto diciendo que aquí dejarían al amor de su vida, claramente otra chica también. Te podría asegurar que la mayoría de esas parejitas ya no han vuelto a verse o se olvidaron con el tiempo. No es el punto, no sé a dónde va mi historia, pero después de eso se decidió que ya no sería más un internado, sino, un Colegio como otros, mixto. Jamás estuvimos en contra del enamoramiento que tuvieron esas niñas por otras niñas. Estamos a favor de la homosexualidad. No dejamos que los chicos se metan con otros chicos por ser homosexuales o por cualquier otra razón, lo hemos evitado. —Louis asintió más seguro. Depositando toda su confianza en la palabra de la maestra O’Donnell, confiaría en ella.

—Gracias… yo… necesitaba saber eso. —No sabía que decir realmente. Se sentía estúpido y no entendía porque, solo quería salir de ahí. —Bueno, no le quito más su tiempo, debo irme. —Louis se despidió estrechando su mano con la de ella. Le sonrió y la maestra le correspondió, se levanto de su asiento listo para irse cuando la voz femenina y cantarina de la maestra lo llamo. 

—Louis… —Louis giro sobre sus talones, encontrándose con la mirada azul de Katherine. —Harry estará seguro aquí. —Louis asintió y agradeció por última vez para dirigirse a la salida. 

El viaje había sido callado. Harry mantenía su examen en sus manos, sintiéndose completamente de lo que había logrado. No podía dejar de mirarlo y ojearlo y ver, como no tenía ninguna cruz en las respuestas, solo palomitas haciéndolo sentir más que inteligente. Se sentía completamente feliz. 

Louis podía sentir la felicidad de Harry. De vez en cuando el rizado le mostraba el examen y Louis le sonreía y le susurraba un “felicidades”, Harry lo abrazaba y Louis le besaba la cabeza o más bien el pelo. 

Había llegado a la Cafetería y Harry había bajado muy entusiasmado por enseñarle su examen a Lynette, su nueva amiga de confianza, pero, ¿Qué se encontró? Todo estaba apagado y el letrero de “cerrado” aun seguía ahí. Harry frunció el seño, él podía jurar que los viernes también abrían. 

Maura se acerco a abrir la Cafetería con sumo cuidado, asegurándose de que Harry entrara primero y en cuanto el rizado puso un pie en la Cafetería todas las luces se encendieron y comenzaron a salir todos los empleados de quien sabe dónde. 

Al mismo tiempo, todos gritaron un “Felicidades Harry” y el mencionado no pudo evitar casi morir de la emoción, no sabía a dónde mirar ni que hacer, solo se dedico a agradecer. No entendía como todos ellos se habían enterado de que había pasado su tormentoso examen y cómo fue que organizaron todo tan rápido. 

Sus ojos se pasearon por todo el lugar, reconociendo la mayoría de las caras, mientras que otras, simplemente jamás las había visto pero también agradecía que estuviesen presentes. Incluso su mirada verde chocó con la mirada verde de Lilith, ella se sonrojo pero Harry la ignoro. Encontró a Dante, el chico que era ayudante de Lynette, pero no encontraba a la castaña que tanto quería ver. La culpable de que Harry amara tanto los panecillos y galletas recién horneadas. 

Suspiro algo triste, deseaba que ella estuviese con él en ese momento, le había tomado mucho cariño y aun no olvidaba que debían preparar unos pasteles juntos. Al final, notó la presencia de sus tres amigos que se encontraban detrás de la barra y como pudieron se escabulleron entre los empleados para abrazar y llenar a Harry de sinceras felicitaciones. 

Liam se sentía más que orgulloso, sabía que Harry era listo, pero sacarse un 10 perfecto, eso sí que fue impresionante. Podría pasar, que después Harry se convirtiera en su competencia para ver quién era el más listo, pero Liam se negaba a verlo como enemigo. El no veía a nadie como enemigo. 

Los cinco chicos se encaminaron a la mesa más cercana y fueron seguidos por todo el personal, incluidos los padres de Niall. Entre la multitud una voz femenina se escucho, luchando por tener espacio para poder pasar entre ellos; Harry reconoció su voz al instante y se emociono al ver un gran pastel de chocolate gigante y decorado y en el centro un “Felicidades Harry” en letras cursivas, detrás de aquel pastel se escondía la culpable de tal delicia, Lynette colocó el pastel en la mesa, felicitando a Harry y él se le echó encima agradeciéndole por el pastel y por su importante presencia. 

Aquella escena enterneció a todo el mundo, se veían adorables. 

—No podía perderme este día Harry. —Hablo Lynette mientras tomaba un cuchillo que Dante le tendía, estaba lista para cortarlo. 

—Muchas gracias, de verdad significa mucho. 

—Y tú significas mucho para mí, pequeño angelito. —Las mejillas de Harry se sonrosaron y ella no pudo evitar pellizcarle una mejilla y revolver –Más- el cabello. 

El pastel había sido cortado y todos habían tenido su pedazo bastante bien reportado. Una vez que la pequeña fiesta dio por terminada, Maura les regalo el día a todos, advirtiéndoles que los quería mañana temprano aquí. 

Habían llegado a la casa de los Horan donde la fiesta seguiría para los chicos. Bobby se encargó de robarse a Louis y llevarlo a mirar varios departamentos y el no se negó. Entusiasmado, se despidió de todos y salió junto al mayor para abrirse rumbo a donde sería su nuevo hogar. 

La tarde estaba yendo bastante cansada. Habían visto muchísimos departamentos muy caros pero jodidamente bonitos. Eran como una mansión pero muchísimo más pequeñas, pero cómoda a la vez, eran perfectas para Harry y Louis, pero eran carísimos también. 

Louis estaba sintiéndose mal, no sabían si realmente iban progresando o estaban igual. Le había dejado en claro dos o tres veces a Bobby que por más que le encantasen esos lujosos departamentos no podría rentar uno, así, que prefería ver los más económicos pero cercanos a la vez. Bobby se negaba y se reía de él, preguntándole como se le ocurría pedirle tal cosa. 

El ojiazul se sentía completamente cansado y avisándole que mejor seguirían su búsqueda otro día pero Bobby tenía otros planes. 

—Ven aquí, Louis. Estos te encantaran. —Bobby había bajado del auto con mucho ánimo y seguido de él venía Louis, bastante demacrado, pero con un intento de sonrisa fingida. 

Una mujer de aproximadamente 45 años de edad los recibió con una sonrisa, invitándoles a pasar. El lugar era cómodo y lujoso, otro lugar que él no podría pagar.

—Bueno, me presento. —Hablo la mujer, volviendo a Louis a la tierra. —Mi nombre es Jessica Calder, soy la dueña de los departamentos, es un gusto conocerte Louis. —Louis le estiro la mano y la mujer, sin duda, la tomo. 

—Louis Tomlinson, mucho gusto Señora. 

—Bien Louis, te presentó a mi tesoro. Este departamento es el más bonito y lujoso; en pocas palabras, te presento tu nuevo hogar. —La mujer sonrió y hablo muy segura de sí misma. Louis, bueno, Louis solo abrió los ojos como dos enormes platos. 

We are not real brothers.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora