Él se encuentra en mi balcón cada noche. Permanece ante las sombras escondido y destrozado. Un frío corazón únicamente capaz de causar daño fue derretido solo por mi.
Y está mal, lo tengo tan cerca, tan fácil de atraparlo y cumplir mi labor como Lad...
Estaba enamorada y lo sabía, pero más le dolía tener que aceptarlo, le daban ganas de golpearse a sí misma cada vez que lo pensaba, cada vez que se imaginaba saliendo...no, para empezar era imposible, simplemente ridículo imaginarse a ambos en una cita, era algo enfermo, algo que estaba mal a la vista de todos, algo que iba a decepcionar a sus compañeros, ni siquiera había pensado en eso, aunque cuenta con la ventaja de no haber revelado su identidad.
Se apartó con brusquedad del hombre, odiaba mentir, pero por el bien de su salud mental debía hacerlo, aunque su corazón gritara que no.
—Sí, sé lo que siento, y es lástima.
Él la miró asombrado, no eran las palabras que esperaba, pero dejó que continuara.
—Qui-quiero decir, dijiste que habías perdido a tu esposa, ¿no? Me siento mal por ti, porque tengas que hacer todo esto, desearía que hubiera una mejor forma, pero la muerte es algo que no nos da oportunidad de nada, y hay que aceptarlo.
Tenía la mirada baja, y como era de esperarse, cuando la levantó, Hawk Moth se había marchado. Estaba perdiendo la cabeza por él. Chat Noir que siguió observando todo, se marchó a la vez.
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