27. te amo.

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Sexto empezaba como siempre. El sombrero seleccionador mandando a los novatos a cada casa, el discurso de Dumbeldore, otro profesor para defensa contra las artes oscuras o para el puesto maldito,  que viene a ser lo mismo y el gran banquete.

Draco se veía demacrado. Con un smoking negro tapándole los brazos. Habían tenido un, ¿Cómo decirlo?, un pequeño percance con el cicatrizado. Draco empezaba a tenerle odio a Harry, otra vez.  Su padre había pasado unos días mobiditos con el tema de si era mortifago o no. ¿Y adivinar en a quien le torturaron todo los santos días? Exacto, a nuestro querido Draco. En el fondo, bastante fondo, si quería a su padre. Normal, era su padre, el héroe de pequeño. Ahora, era una persona totalmente ajena. Un Mortífago que lo único que hace es servir al que no debe ser nombrado. Ahora el Slytherin tenía que segir sus pasos.
Lo que vieron el trío de oro en el callejón Knockturn era cierto. Las sospechas de Harry Potter lo eran. Draco Lucius Malfoy Black era un Mortífago. ¿Cómo es posible que solo un niño lo sea? Respuesta simple: Ponle a elegir entre las cosas que más valora y un director ya bastante anciano. ¿Que va ha elegir?

Hermione notaba como su novio estaba raro. Al terminar de comer fue junto a él,  alejados de la gente.

-Me alegra verte Hermione- esbozó una sonrisa.

-Nos vimos hace 4 días Draco.- Sonrió la castaña.  "Aunque yo te vi hace unos o dos"- Draco, ¿Te ocurre algo?

El rubio negó y besó los dulces labios de Hermione. ¿Cómo le diría a su novia, una "impura" que el era un Mortífago? No podía,  al menos no todavía. 

Tenía que matar a Albus Dumbledore. El mayor mago que existía. ¿Cómo demonios un niño de 16 años puede contra el mayor mago? ¿Por qué había elegido el señor tenebroso a el rubio?
Principalmente, por castigo ha Lucius. Aunque a este poco le importaba Draco cuando se desquiciaba con él, lo quería, quería a su único hijo. Aunque Voldemort pensó en la remota idea de que el rubio lo consiguiera. Estaría viviendo en el castillo. Teniendo miles de oportunidades. Y si no lo lograba en el intento estaría muerto. Un buen castigo para Lucius, si no moría, sería enviado a Azkaban, pero si lograba matar al anciano y salir invicto, lo alistaría en sus primeras filas.

Su primer intento fue a través de otra persona. Había visto miles de veces como utilizaban el maleficio Inperius. Y no le fue muy difícil hacerlo. Sin embargo la dichosa niña tuvo que tocar el envoltorio antes de dárselo al director. Primer fallo. Con ello conllevaba a una tortura a su madre y padre. Draco veía su mundo caerse poco a poco, lo que lo mantenía palpitante era la constante presión y su castaña.
Entró al gran comedor y vió a la chica con al que había empleado el maleficio. Potter estaba hablando con ella. Sintió unas terribles ganas de vomitar. Subió con paso rápido al baño de Myrttle.

-¿Otra vez aquí Malfoy?- No usaba su usual modo Irónico de hablar. Sentía verdadera lastima por el niño. Myrttle  escuchaba las veces que Draco hiba allí a gritar y llorar. Algunas veces la fantasma intentaba consolarlo.

El Slytherin se apoyo en uno de los grifos y empezó sollozar, se limpio la cara aún que las lagrimas seguían callando. Lo que un día fue un orgulloso niño había quedado sepultado con ojeras, piel pálida y ojos inchados.

-Los van a matar... yo lo se Myrttle...- la fantasma emitió un gemidos y se fue a su cubículo. Harry Potter entró al baño. Levantó su varita en modo de defensa.

-¡Fuiste tu!- Draco le lanzó un hechizo, Harry lo esquivo. Y así ocurrió sucesivamente hasta que grito...-¡Serpentonsia!- Draco calló al suelo y enormes manchas de sangre se extendían por el cuerpo del chico. 
¿Quien es el malo? ¿Draco? Que intentaba salvar a su familia y su propio pellejo, aguantando de primera mano a Lord Voldemort y con una tarea como esa o ¿Harry?  Que ni se molestó en intentar entender las razones del chico. Por simple odio. Hasta a la rata le dejo unos momentos para explicarse. Severus acudió en la ayuda del chico. Esa noche Hermione lo citó en la torre de Astronomía,  donde no dentro de mucho se avecina ria un gran acontecimiento.

-Por Merlín Draco...- Hemrione se llevó las manos a la boca. Hacia una semana que no veía a su Hurón.  En una semana se veía tan ido.

-Lo... Lo siento Hermione- rompió en llantos.- Mi padre... es lo que dice Harry.-Hermione no sabia que hacer- y yo también...- La castaña lanzó un leve quejido.- Tiene a mis padres Hermione. El los tiene. Me manda mensajes con las voces de ellos. Gritando sin cesar.-Hermione veía al su Hurón arrodillado en el suelo. Este se acercó a los pies de ella.- Perdoname, aléjate de mi si lo deseas, pero no me odios, por favor Hermione no lo hagas, eres de las pocas cosas que me mantienen aquí...-Hermione se agachó y abrazo a Draco.

-Estúpido,  nunca te voy a dejar.- Miró el brazo del chico.- ¿Puedo?- este asintió impresionado.

-Soy un monstruo- la marca tenebrosa reposaba todavía con los bordes rojos en el antebrazo de Draco.

-Debe doler... y Draco,  no lo heres.

-Soy un Mortífago Hermione. Un asqueroso Mortífago...- Hermione beso a Draco. El rubio sintió que recobraba la vida.

-No es culpa tuya no tener opción. No es tu culpa que este mundo sea un desastre. Eres una víctima de estas desdichas. -Se volvieron a besar. Derramando lagrimas.- Harry, te hirió ¿Verdad?

-Si...- la castaña se abalanzó sobre Draco.

-Lo siento mucho.

-Hermione, habíamos jurado, no ocultarnos nada. Tengo que contarte algo. Pero promete que no le contarás a Potter ni a Weasly. A nadie.

-Si...

-Tengo que matar a Dumbeldore. Los Mortífagos van a venir... lo se, lo presiento... Huye Hermione. Por favor.

-No puedo. ¿Tu que vas ha hacer?

-Intentar sobrevivir...- Le dedicó una sonrisa.

-Te amo Draco.

-Te amo Hermione.

-Para siempre- Recitaron ambos. Se fundieron en un largo beso.







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Nos leemos pronto mis pequeños Wattpacitos.

TLpoison999

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