°Capítulo 8°

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Me desperté por el sonido de un auto pasar a toda velocidad. Unos pálidos brazos rodeaban mi cintura, los reconocí de inmediato. Jos dormía cómodamente a mi lado, se veía hermoso durmiendo.

Me levante con cuidado, procurándome no despertarlo. Me vestí en silencio.

-¿Dónde crees que vas?- pregunto él con una voz seductoramente ronca.

-Tengo que ir con las chicas...

-_____, debo decirte que estas hermosa- musito levantándose del colchón- y no vas a ir sin mí.

Le sonreí. Jos se aproximó a mí y beso mis labios con suma dulzura, para luego besar también mi frente y arreglar se a toda prisa.

Después de unos 30 minutos yacíamos en el auto de Jos, Coloco en la estéreo una de mis canciones favoritas y empezamos a cantar y juntos, como dos locos.

-¿Sabes?-dijo él al terminar la canción- anoche me desperté a más de la media noche y...-rio vacilante y Froto su nuca nervioso- te observe. Observe lo más hermoso que el mundo pudo haber creado: a Ti. No puedo explicar la manera en la que me haces enloquecer, ______. Te juro que si alguna vez alguien te dice que no eres bella, recuerda que esa persona está loca... luego me dices y lo dejo sin hijos.

Reí a carcajadas mientras Jos estacionada en un pequeño conjunto de apartamentos. Bajamos del auto, me tomo de la mano y me di la gran libertad de entrelazar nuestros dedos. Entramo al conjunto de apartamentos, el recepcionista, el cual era gay, miro a Jos de arriba abajo y después me felicito con una mirada pervertida y levantadas de pulgar ¡Claro! sin que Jos lo notara. Subimos al elevador solo. Jos tomo ventaja de lo desierto que estaba el elevador, me rodeo por detrás con sus fuertes brazos y comenzó a besar mi cuello. ¡Me está torturando!

-J... Jos- dije con la voz entrecortada- me encanta pero... aquí no.

Dio los últimos tres besos y gruño apartando sus labios de mi cuelo. Tomo suavemente mis mejillas y beso una de ella, para luego besarme. Sus labios eran un total delirio, la más deliciosa y extraña exquisitez de todo el mundo. Deberían darle un premio por "el delirio más exquisito".

Disfrutaba plenamente sus besos, y al parecer él los míos. Aunque debo admitir que no soy una experta besando, antes de lo de ayer solo había besado tres beses: a mi mamá, Jos y un cachorrito que tenía a los 11 años. Creo que soy una loser, pero ¡vayas loser! opino que no debo ser tan tonta porque, bueno, desde ayer tengo al mejor novio que puedo tener, el mejor definitivamente. Amaba a ese chico de ojos mieles, con cabello color negriso. Desde mucho antes de que existiera mi apremio por la sexualidad, lo amaba aunque no tanto como ahora.

Las puertas del elevador se abrieron y me despegue de él rápidamente. Allí parada esperando el elevador estaba la anciana robusta del apartamento al final del pasillo. Era algún tipo de girl metal ya que su vestimenta era oscura y llevaba una playera que decía "Amo el metal" (Una abuelita con mucho estilo)

Salimos de él y nos dirigimos a mi apartamento. Al abrir la puerta me encontré con lo más vergonzoso que podía estar en el living

LUJURIA. |Jos Canela| HotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora