cuentos para dormir, homofóbicos

algo tarde para extrañar.

Hoy me di cuenta; en realidad te empecé a amar no fui capaz de decírtelo ni de besar tus labios. Quisiera haberte demostrado esos pequeños gestos que sé que te hubiesen gustado ...

Tal vez los rumores no eran mentiras, pero tarde me di cuenta. Tu ya no estás y tu corazón posiblemente nunca estará a mi lado de la misma forma que el mío quiere quedarse al lado tuyo.

Discúlpame tal vez al inicio me asusté, miraba tus ojos en las clases y si las mirabas llegaban a coincidir cierto contacto surgía tal vez para ti era algo amistoso pero para mí fue más allá.

Entendí muy tarde. La noche en que te ví por última vez no pude soportar llore aunque; al frente tuyo estaba riendo por qué sabía que tus sueños se hacían realidad y me hacía feliz verte sonriente, radiante con un pequeño opaco rayo de energía por que nos dejabas atrás.

Mientras ese día llegaba a mi casa llore aunque por dentro fuera feliz por ti. Odio ese egoísmo aún tomando en cuenta que tú nunca me habrías podido corresponder lo tuyo para mi era algo más fraternal pero lo mío para ti era algo más allá.

Aún te lloro por qué siento que falle, antes miraba tu puesto vacío que con el paso de los meses lo quitaron. Pero aún yo seguía mirando. Ahora en otro patio y en otro salón sigo buscando donde sería tu puesto.

Ya sé nuestros padres se hubieran opuesto a toda costa pero ... ¿Por qué tenías que volverte tan intocable? ... Todos los días hablo de ti con la esperanza de que algún día volvamos a vernos.

Tal vez muy tarde me di cuenta pero... Te sigo esperando no sé cuánto tiempo más soporte tanta presión pero esperaré para poder volver a tomar un juguito de cajita a tu lado mientras nos contamos la vida y reímos y cada vez me enamoro más de tu risa mujer.

Quiero volver a tenerte en mis brazos mientras apoyas tu cabeza en mi hombro y lloras, volver colocar tus cabellos detrás de tu oreja cada vez que se interponen entre tu rostro alegre al viento... Simplemente déjame amarte como amigas... Cómo lo único que me puedes brindar. Me conformare con solo verte sonreír y escucharte para que cada vez que lo necesites sacarte una sonrisa.