Baby Kiki ➵ Wonki

4; Sintiéndonos

Kihyun se acercó cauteloso, el mayor lo tomó del brazo izquierdo y lo acercó bruscamente. El pelirosa soltó un pequeño sonido de espanto.

Hoseok posicionó al pequeño en su regazo, el menor pensó que esa posición era muy rara, quizo salir de encima de su niñero pero este no se lo permitió. Y sin decir ni una sola palabra, lo besó por una zona cerca de la mejilla, al costado del mentón, parecía que le estaba besando el cuello.

Hoseok se alejó y quedó embobado con la mirada asustada de Kihyun. ¿Acaso no le habían gustado sus besos? ¿Se pasó con el inocente Kiki?

–¿Sucede algo?

Se movió un poco, acomodando al pequeño quien parecía atónito ahora.

–Ay, hyung...en tus pantalones...–Kihyun se quedó sorprendido.

El mayor frunció el entrecejo confundido, hasta que sus neuronas hicieron conexión y ¡Pum!

–¡Oh! Eso...yo..–El pelinegro no supo qué decir para justificar su creciente erección. Mientras tanto el pequeño Kiki curioso exploraba.

–¡Vaya! Se siente...muy...duro. –Reconoció el menor moviéndose sobre el mayor para poder sentir lo que éste tenía escondido en sus pantalones.

–Si, si...lo esta, ahora no hagas eso. –Dijo Hoseok en desespero, fingiendo tranquilidad, pero en realidad ya estaba de los pelos y sabía que en breve perdería la cordura. Soltó un silencioso jadeo y cerró los ojos con fuerza, dejándose llevar un poco y deseando que su tortura terminara.

"Por favor Kiki, no lo hagas más difícil..." Y puso ambas manos en las caderas del menor.

–¿Duele, hyung? –Preguntó a lo que paraba ese movimiento que volvía loco al mayor.

–Si Kiki, duele y mucho. –Admitió suplicante. – A lo mejor deberías seguir moviéndote para que p-pase.

–P-pero hyung...

Entonces el teléfono sonó, sacando a ambos de ese momento caliente, bueno en realidad...sólo a Hoseok, porque Kihyun seguía con su carita inocente sin entender lo que estaba pasando.

–¡Yo voy! -Exclamó Kiki safandose de su regazo, pues si, había algo que le gustase hacer a Kihyun, eso era contestar el teléfono.

Mientras el menor se iba, Hoseok se quedó ahí, intacto, necesitado y duro por demás.

"¡Ay dios! ¿Qué mierda te he hecho? " Lloró mentalmente.

Hoseok se levantó y fue directo al baño, pero en eso...

–Si hyung, Kiki te extraña muchito. –Pausa– Umhh...s-si..–Kiki suspiró. –Ven lo más pronto posible, te necesito.

Entonces Hoseok abrió los ojos inmensamente. Ese niño estaba lleno de mensajes subliminales, pero aparte de eso, hubo algo que no dejó pasar ante sus pensamientos, y lo soltó cuando Kiki decidió colgar el teléfono.

–¿Quien era, Kihyunnie? –Preguntó al menor que posó su mirada sobre él.

–Oh, era mi otro hyung...

–Comprendo, no sabía que tuvieses hermanos.

–No los tengo, es hijo de los amigos de papi y mami. Tiene diecinueve y también fue mi niñero hace poco.

–¿En serio? –Preguntó Hoseok en un fingido tono tierno, al parecer había descubierto cierta posesividad de su organismo. –¿Y por qué dejó de se tu niñero?

–No lo sé, nunca me ha dicho, pero creo que es porque ingresó a la universidad. –Comentó el menor entristecido. El pelinegro en serio lo sintió y fue a abrazarlo, dejando de lado inquieto miembro palpitante, y cierta chispa de celos.

–Lo debes extrañar mucho.

–Mucho...–El menor agachó la mirada.

Y ambos quedaron así, abrazados por un largo tiempo.

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