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Claude no tuvo tanto tiempo de platicar con Cossett, por que le causaba un poco de incomodidad, por el simple hecho de que era una mujer...
Bastante hermosa, por cierto
Claude pensaba que Cossett tenía el fisico perfecto de una reina francesa. Él pensaba que sus ojos no estaban envenenados de obsesión por adquirir poder o algo más.
***
Una tarde, Claude y Cossett salieron para conseguir algo para el almuerzo, llevaron consigo carne, calabacines, pimientos, coles pequeñas, y otras verduras.
De repente, un vandido intentó hacerle un acto vulgar a la joven Cossett y Claude lo evitó.
-Ella es una dama, respétela como tal- dijo él en voz alta.
Este vandido se fue y Cossett le miró tan profundamente.
Esa mirada, dijo más que un simple <<Gracias>>.
Claude pensó con más certeza que ella era muy hermosa.
Cuando cayó la noche, ellos ya habían cenado y cada uno se fue a su alcoba.
Claude pensaba profundamente en aquella mirada suave, pero preocupada de Cossett.
-Quién se cree que es para causar algo así en mi interior?...- pensó

Claude FrolloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora