Caída Libre

74 5 5
                                    

Justin POV

Kelli lanzó un chillido desgarrador y se transformó en una montaña de polvo dorado. Jade estaba parada a su costado, con la daga de bronce celestial en la mano y el pelo cubierto de polvo. A pesar de lo lastimada y sucia que estaba, se veía hermosa. Siempre lo hacía.

De repente, el avión dio una fuerte sacudida. "Los motores están fallando." dijeron Camila y Lucía al unísono, asustadas "Estamos en caída libre."

¿Quieren saber cómo terminamos en esa complicada situación? Acá tienen la historia.

+++ (24 horas antes)

Desperté con un dolor de cabeza, y un acontecimiento alarmante, Jade no estaba. Había dormido conmigo (A/N: No lo malpiensen por favor xD) la noche anterior, y por alguna razón no estaba. 'Probablemente salió a hacer algo' me dije a mi mismo. Por suerte, tenía razón, pero no me quitó el susto. "¿Dónde estabas?" le pregunté cuando la vi "Casi me desespero." Ella sólo sonrió y dijo: "Fui a buscarnos un pasaje de ida para completarla misión." Al terminar de decir eso, sacó nueve boletos de avión de su bolso. "El avión sale en cuatro horas, tenemos que juntar las cosas e ir. No podemos aplazarlo más." Eso último lo dijo con firmeza, como aceptando el título de líder de la misión y futura heróe del Olimpo, cómo todos nosotros.

Después de haber empacado rápidamente las pocos cosas que nos quedaban a todos, todos nos dirijimos a explicarle a Thomas que teníamos que dejarlo, porque teníamos como prioridad la misión y él era un pequeña molestia. Mientras nos acercábamos a su cabaña, escuchamos unos sollozos. No eran sollozos de chica, era claramente un chico, y parecía tratar de ocultar que lloraba. Entre lágrima y lágrima, escuchamos que la persona adentro, Thomas, decía: "Z... Zo... Zoe... T... Te nece... Te necesito..." Los ojos verde mar de Zoe se abrieron ampliamente por la sorpresa.

Zoe POV

¿¡QUÉ!? Había dicho que me amaba, y ahora decía que me necesitaba. ¿Cómo podía amarme y necesitarme después de haberme dejado sola tantos años? Maldito despreciable. Pero hay que admitirlo, alguna vez yo también lo amé. Pero era pequeña, inocente. Todavía no tenía ni idea de que era una semidiosa, y mucho menos de que era una de las semidosas más poderosas de todos lo tiempos, pero que tardaría en controlar mis poderes. Abrí la ¿Puerta? de la pequeña tienda de campaña en la que dormían los chicos, y me encontré con un lloroso Thomas. Ver lo así debe de haberme tocado un nervio, porque comenzé a gritarle desontroladamente: "¿¡QUÉ MIERDA DECÍS!? NO DIGAS ESTUPIDECES ¿¡QUERÉS!?" Eso sólo pareció enojarlo y entristecerlo más, y debo admitir que me sentí un poco mal. Aún así, mientras armaba ese pequeño escándalo, pude notar que Santiago sonreía, como si todo eso le divirtiera. Aún así, seguí gritando hasta que Alice me tranquilizó con charmspeak (A/N: No se como se dice eso en castellano xD) y me obligó a salir de la carpa, pero aún así pude captar pequeños fragmentos de su conversación, cosas como: "Tenemos que ir." o "La necesito demasiado." o cosas por el estilo.
Cuando salieron del lugar, me di cuenta que Helena y Santiago tenían un ojo morado, y que todos lo demás se quejaban porque algo les dolía. ¿Qué podía haber hecho esa bestia que se hacía llamar a si mismo Thomas?
Después de eso, nos dirigimos hacia el aeropuerto y, sorprendentemente, nuestra estadía allí fue corta, cosa que me resultó bastante sospechosa. "PASAJEROS DEL VUELO 818 POR FAVOR ACÉRQUENSE A LA PUERTA CORRESPONDIENTE."
Subimos al avión tranquilamente, pero no pasaron ni cinco minutos y se desató un pequeña parte del apocalipsis, el principio del posible fin.
-----------------
Espero que les guste el capítulo! :3 -Justina

Los CincoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora