Un nuevo amor - Markle

Extra final

Narra Maya:

Me mire al espejo completamente nerviosa, mi corazón latiendo sin control mientras sentía como podría salir de mi pecho en cualquier momento. Mis manos sudaban y no dejaba de recorrer la habitación de un lado al otro, debí haber salido de aquí hace como media hora y solo podía dedicarme ah ignorar los golpes y voces al otro lado de la puerta.

- ¡Maya Penelope Hunter! te ordeno salir de ahí en este instante - mi amiga estaba definitivamente molesta - Farkle no se merece esto - y tenia razón

Me deje caer junto ah la puerta, mis ojos aguantando las lágrimas que amenazaban con salir - Tengo miedo - confesé en un sollozo - ¿Y si no quiere pasar toda una vida ah mi lado? cuando me embarace la primera vez sentí que de alguna manera estaba amarrando ah Farkle, ¿Que tal si no soy lo que tanto espera? - 

- Lo eres - mi corazón late asiéndome sentir dolor - te amo de una sobre manera increíble, amo ah nuestros hijos y no puedo esperar para casarme contigo - siento que todo desaparece por un segundo excepto él - ¿Quieres salir de ahí y casarte conmigo? -

Me levanto de golpe para abrir la habitación y lanzarme ah sus brazos, la culpa me invade pero no me permito derramar más lágrimas de las necesarias, limpia mi rostro con sus pulgares guiándome ante el juez, inevitablemente me lleva al altar. Tiemblo al tener la mirada de todos sobre mi, caras de alivio me invaden.

- No me dejes caer - apenas es un murmuro

- Nunca - y le creo

- Al fin - todos ríen - estamos aquí reunidos... - y mi mente divaga 

Narra Farkle:

Esta distraída pero no me importa, tenerla ah mi lado es suficiente por el momento. Respiro hondo al notar que mi momento llega, busco en mi bolsillo los votos que planee hace semanas y me sorprendo al ver que no están, el aire se atora en mi garganta y ahora todos me miran, incluida Maya con unos ojos tan brillantes como el cielo.

- Respira - me digo - empieza por el principio - 

Tomo ambas de sus manos dejando que quede justo frente ah mi, azul contra azul.

- Jamás conocí ah alguien como tú... tan viva, tan decidida y sincera, tan fugas y fiel, eres tú, sencillamente tú, amor. En los últimos años eh conocido ah tantas personas y solo tú me llenas de la manera en la que sabes hacerlo, eh estado toda la vida esperando ah que algo, alguien... me hiciera sentir de verdad la magia del amor, y cuando llegaste volviendo mi mundo de cabeza, cuando te mire ah los ojos por primera vez supe, sin dudarlo, que ese alguien especial solo podías ser tú. Estoy completamente orgulloso y feliz de poder gritarle al mundo que eres mi primer amor, mi verdadero y único amor - no se como lo hago, mi corazón comienza ah mandarse solo dejando todo salir - puedo decirte que sin lugar ah duda eres lo mejor que me ah pasado y no tienes una idea de cuánto eh esperado por ti, cuanto eh deseado tenerte entre mis brazos como lo hago ahora, cuanto eh deseado conocerte -

Sus lágrimas salen de nuevo ah flote aguantando cualquier ruido que quiera soltar, su rubio cabello cae en perfectas ondas sobre sus hombros, sus manos antes frías permanecen en calor gracias ah las mías, su maquillaje aunque algo corrido realza su rostro haciéndola lucir hermosa, ese vestido es perfecto para ella, lleno de encajes brillantes color plata.

- Eres especial Maya Hunter - junto nuestras frentes -eres especial de una manera diferente... eres honesta, responsable, increíblemente inefable, mi número uno, mi chica, mi amor, mía. Eres lo más importante para mi bebé, tan única y magnifica, tan mía... lo siento en cada fracción de mi alma. Eres la persona con la que planeo pasar una vida -

El impulso me gana y termino atraiéndola ah mis labios, el beso es brutal y no me importa si cientos de personas nos están mirando ahora, muerdo su labio inferior sintiendo su aliento y ah mi me parece la gloria. Mis manos están en su cintura y las de ella se aferran ah mi cuello siguiéndome con hambre atrasada, no quiero separarme pero el oxigeno se va escapando de apoco de mi cuerpo.

- Los declaro marido y mujer - ambos sonreiremos fundiéndonos en un fuerte abrazo