Enamorada del enemigo - Legado Espinosa

Cuarto mes.

Narra Ruben.

Han pasado dos meses desde que volvi a hablar con mi padre y la verdad apesar de todo el daño que me hizo en el pasado, estoy muy feliz de tenerlo cerca de mi, como él me dijo tiene cancer en todo el cuerpo y lamentablemente ya esta muy avanzado como para encontrar una forma de tratarlo, el doctor me dijo que solo queda esperar a que dejen de funcionar sus organos, y mi padre esta conciente de eso y aprovecha cada oportunidad que tiene para pedirme perdon o simplemente estar cerca de mi.

-Buenos días papa.- digo entrando a la cocina.

-Buenos días hijo.- dice sonriendo, me siento a su lado e inmediatamente me sirven mi plato. -¿Como te has sentido?- pregunto comenzando a comer.

-Un poco más cansado.- dice y es verdad, se le ve agotado.

-Deberiamos de hablarle al medico.- digo indeciso.

-Es algo normal hijo, la enfermedad esta avanzando y no hay nada que podamos hacer para evitarlo.- dice resignado y suspiro.

-Es que no puedo simplemente dejar que mueras sin hacer nada.- digo enojado.

-Haz hecho mucho por mi.- dice y toma mi brazo. -Me has perdonado aun cuando no lo merecia y me diste la oportunidad de volver a estar contigo y eso es algo que nunca espere que hicieras porque se que fui un pesimo padre.- dice triste.

-Pero yo no quiero perderte ahora que te tengo.- digo tomando su mano. -Solo espero que falte un poco mas para perderte.- digo y el asiente.

-Espero lo mismo hijo.- dice sonriendo, en eso suena mi celular, lo saco y veo que es Andy.

-Hola Andy.- digo sonriendo.

-Hola Ruben, ¿estas ocupado?- pregunta curiosa.

-No amor, ¿ocupas algo?- pregunto preocupado y mi padre me mira curioso.

-Es que pense que podriamos vernos.- dice nerviosa y suspiro.

-Claro nena, dime donde.- digo ignorando la mirada de mi padre.

-En mi pasteleria, la parte trasera.- dice seria.

-Bien presiosa, nos vemos en media hora.- digo y cuelgo, veo a mi papa que me esta mirando burlon. -¿Que?- pregunto serio.

-¿Tu novia?- pregunta sonriendo, asiento. -Me alegra que alguien te haga feliz, ¿como es ella?- pregunta con interes.

-Es rubia, pero no tiene ni un pelo de tonta al contrario es muy inteligente, esta estudiando ciencias politicas, es bajita, muy risueña, cariñosa, tiene todo, pero no es presumida.- digo sonriendo al recordarla.

-Sientes algo por ella.- afirma mi papa y lo miro curioso, nunca habia pensado en esa posibilidad, pero ¿la amo? ¿O siento siquiera algo por ella?

Suspiro. -Si, la quiero.- miento ¿o talves no? -Bueno te dejo papa, la voy a ir a ver ya que hoy cumplimos meses de pareja.- digo parandome.

-Bien, espero conocerla pronto.- dice sonriendo y me tenso, se supone que Andrea no debe de tener ningun significado personal y eso implica el que no conozca a mi padre.

-Claro papa.- miento y salgo de la cocina. -Toro.- digo serio y se para del sillon.

-Dejame adivinar vas a ir a ver a la Espinosa.- dice serio y ruedo los ojos al oir su tono en su apellido.

-Así es, ya sabes que hacer.- digo serio y salgo de la casa, me subo a mi carro y arranco, demonios no tengo nada que darle, pasare por algo.

Narra Andy.

Llego a la pasteleria y me fijo que nadie me siguiera, suspiro de alivio al ver que es así, pero estare atenta por si llegan antes que Ruben, entro a la cocina y veo a las chicas.

-Hola, no vine a trabajar ni como clienta, solo esperare a alguien y me voy.- digo seria y ellas asienten, salgo por la puerta trasera y me recargo en la pared.

Abro en mi celular las camaras de vigilancia del negocio y reviso que no haya ningun hombre de mi hermano, suspiro de alivio, todavia recuerdo nuestra "pelea" de esta mañana.

RECUERDO. 

Me despierto y dejo mi celular en la cama, me emto a bañar y me cambio rapido ya que hoy tengo pensado ver a Ruben ya que cumplimos 4 meses juntos y eso sin duda es hermoso, me cambio y al salir de mi cuarto veo a mi hermano en mi cama con mi celular. 

-¿Que haces?- pregunto y comienzo a peinarme. 

-¿Tienes novio?- pregunta serio y me tenso. 

-No.- miento y continuo con lo mio. 

-Entonces porque tienes este tipo de mesnajes con un tal Ruben.- dice enojado y me volteo. 

-No tenias porque revisar mi celular.- digo molesta y me acerco a él. 

-¿Quien demonios es Ruben?- pregunta enojado. 

-Eso a ti no te interesa, dame mi celular.- exijo enojada y el lo lanza a la cama. 

-Dime quien es Andrea.- dice entre dientes. 

-No, ahora sal de mi cuarto.- digo molesta y el suspira. 

-Sabes que no puedes andar con quien sea.- dice serio y ruedo los ojos. -

Yo se lo que puedo y no hacer, y no soy ninguna tonta para andar con alguien que se quiera aprovechar de mi.- digo seria. -Ahora sal de mi cuarto.- digo enojada y él niega y sale cerrando la puerta con fuerza, suspiro y me siento en la cama. 

FIN.

Coconiendolo pondra a personas a vigilarme y no puedo dejar que conozca a Ruben, al menos no por el momento, todavia no confio mucho en él como para decirle del negocio familiar, así que voy a tener que dejar de verlo por un tiempo.

Veo como Ruben llega y sonrio al verlo.

-Hola amor.- dice y me besa, paso mis brazos por su cuello.

-Hola.- digo sonrojada.

-Te traje esto.- dice y me da un ramo de rosas, sonrio.

-Gracias.- digo y lo beso. -Yo no pude traerte nada.- digo triste al recordar el regalo en mi buro, pero al salirme rapido se me olvido.

-No importa, lo que importa es que que pudimos vernos.- dice sonriendo.

-Sobre eso, temo que por el momento no nos podremos ver.- digo nerviosa y me ve curioso.

-¿Por que no amor?- pregunta serio.

-Porque mi hermano es muy sobre protector conmigo y pues sospecha que ando con alguien y no quiero meterte en problemas.- digo la verdad a medias y él suspira.

-Esta bien.- dice serio. -Pero espero conocer a tu familia en un futuro nena.- dice y me abraza.

-Si, pero por el momento no, debo tranquilizar a mi hermano.- susurro contra su hombro.

-Bien, entonces me voy para no causarte molestias en tu casa.- dice separandose de mi.

-Si.- susurro y me besa.

-Espero que no sea mucho el tiempo que nos alejemos.- pide y sonrio.

-No sera mucho.- digo y nos separamos.

-Adios nena.- dice sonriendo.

-Adios.- digo y él se va.

Suspiro, espero que mi hermano olvide pronto el asunto sobre mi pareja y me deje volver a la "normalidad" con Ruben.