Momentos Sagicornio

Boda

Perdonen si estos días nuevamente no contesto comentarios y tardo en publicar, vengo tan cansada de trabajar que no tengo ganas de nada, pero mañana ya es sábado y estaré descansada, por lo cual me dedicaré a responderos, muchas gracias a todos por leer estos momentos y que os gusten, os amo

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Finalmente tras meses de planear su boda, finalmente el dia donde serían esposos llegó.

Cada uno de los novios estaban en una habitación separados con sus respectivos padrinos de boda y acompañantes, que por cierto estaban intentando calmar a unos muy nerviosos novios.

En la habitacion de Shura...

-Debes calmarte Shuris, si no todo mi trabajo de dejarte perfecto y bello será en vano- Le regaño su hermano Afrodita, el cual mostraba un gesto contrariado.

¿El motivo de su regaño? Era que Shura no paraba de tocarse el cabello de manera nerviosa y removerse su corbata plateada.

-No puedo evitarlo Afrodita, finalmente llego el dia ¿Y si Aioros se arrepiente de casarse conmigo? ¿Y si...?- Mu, su otro hermano de palabra, le detuvo al ver cómo la crisis estaba dándose en el español.

-Cálmate hermano, todo irá bien ¿y sabes por que? Porque Aioros te ama, vuestro amor estaba destinado en las estrellas y lo sigue estando, por mas baches que habeis pasado aqui estais hoy, al igual que en el futuro aunque paseis nuevos baches lo superareis juntos, por que ese amor es eterno- Le asegura sincero tomándole de las manos, lo cual terminó con calmar al Capricornio y sonreir.

-Tienes razón... Gracias Mu... Afrodita...- Agradeció a sus dos hermanos dándoles un fuerte abrazo.

Mientras tanto en la habitación del Sagitario....

Este otro novio estaba aún mucho peor que el español...

No paraba de murmurar incoherencias, caminar como león enjaulado y revolverse sus castaños cabellos.

Su hermano menor Aioria y Milo lo miraban exasperados.

-¡Ya para de una vez Aioros, me estas mareando!- Explotó al final el de Leo, tras ver como su hermano mayor daba vueltas por el espacio durante diez minutos seguidos.

-Es que no puedo evitarlo ¿Y si Shura no está? ¿Y si no soy lo suficiente bueno para el? ¿Y si se cansa de mí?- Empezó a hablar muy rápido, tanto que al final ninguno de aquellos dos pudo entender lo que decía

-Suficiente, Aioros, es normal que estés nervioso por la boda, yo cuando me case con mi borrego estaba igual de nervioso, pero al imaginarme que compartiría toda mi vida con ese hombre maravilloso, todos los nervios se me pasaron, ademas estas hablando de Shura, el lleva amandote desde que era un niño, esos sentimientos no morirán, ¿Has visto cómo te mira? Eres su vida y tu la de el... asi que tranquilizate y sonrie, por que estas a punto de unir tu vida y tu futuro con esa persona tan especial para ti- Le dijo serio Milo, posando sus manos en los hombros del castaño, más al acabar de hablar le dedicó una sonrisa

Aioros se tranquilizo con esas palabras, mas luego sonrió ampliamente hacia Milo y Aioria.

-Tienes razón Milo, el amor de mi vida me espera...- Y con esas palabras, mas los suspiros de alivio por sus dos acompañantes, volvieron a terminar de arreglar a Aioros para que estuviera perfecto junto a Shura.

Los novios se encontraron frente a frente en el altar con ambas sonrisas en sus labios.

La ceremonia dio inicio hasta que finalmente el cura los declaro esposos.

"Finalmente juntos para siempre"

"Eternos como las estrellas seremos"

Y así, con un beso lleno de dulzura y promesas, fueron aplaudidos por todos los invitados de la ceremonia.